— Te dejaré aquí cariño, mientras hablo con mis hombres de Legión para asegurar un retorno sin inconvenientes también hablaré con tus amigos, tú necesitas un poco más de tiempo, la casa es vieja, pero te servirá como refugio, descansa lo que necesites aquí — Camila acaricia el rostro de Lilith, ella siente la calidez de aquellas manos, posteriormente Camila abandona el sitio, Lilith avanza algunos pasos encontrando una habitación.El aire pesado de aquella habitación parecía teñido con las sombras de su pasado doloroso. Las paredes, aunque desgastadas le daban el ambiente de aquella hacienda, ella aún llevaba muy presente consigo el eco de los gritos ahogados, de las noches interminables que Lilith pasó prisionera, sintiendo cómo su identidad se desmoronaba bajo el peso de la opresión, ella toma la decisión de sentarse en el suelo. Con la espalda contra la madera fría, respiró profundamente, tratando de encontrar algo entre las cenizas de lo que alguna vez fue, tratando de pensar que
Días atrás Rusia El gran dolor invisible de Kamill una tortura que mata su alma, encierra su vida en la miseria, aquella noche en la que una perdida estaba ocurriendo.Aquel día La celda estaba sumida en una penumbra opresiva. Las paredes de piedra, ásperas y húmedas, parecían absorber cualquier resquicio de esperanza que pudiera colarse entre los barrotes oxidados de la ventana. Kamill, sentado sobre un lecho de paja mojada y desgastada, respiraba con dificultad. El frío de la noche rusa se filtraba a través de las grietas del muro, helándole la piel y los huesos, pero no era el frío lo que lo desgarraba. No, su tormento era algo mucho más profundo, más intangible, y sin embargo, mucho más cruel.Era un dolor que no podía señalar ni describir con palabras precisas, porque no provenía de una herida visible, ni de las innumerables marcas que los verdugos habían dejado en su cuerpo. Kamill podía soportar las palizas, las cadenas, e incluso el hambre que consumía lentamente sus fuerzas.
Los recuerdos de las noches en prisión en aquella celda pasando frío hambre torturas habían marcado una pauta importante en Kamill Becker, entonces el chico detiene su mirada fijamente en el rostro de la mujer que lo trajo al mundo.Marta estaba de pie, imponente, con la mirada fija en Kamill, quien permanecía frente a ella, firme, como si la fuerza de su resolución fuese un escudo impenetrable. La tensión entre ambos era palpable, como un cuchillo que cortaba el aire en silencio volviendo pequeño aquel departamento ante la presencia de madre e hijo.—Kamill, ¿qué tan lejos estás dispuesto a llegar para mantener a Lilith fuera de tu vida? —preguntó Marta, su voz llena de autoridad, pero con un matiz de duda. Sabía que su hijo no era un hombre de medias tintas, pero esta vez quería escucharlo de sus propios labios.Kamill levantó la cabeza con un gesto lento y calculado. Sus ojos esmeraldas brillaban con una mezcla de furia y determinación. Cada palabra que saldría de su boca estaba ca
Meses después.El sol del verano brillaba con intensidad sobre los campos de Paraguay, reflejándose en los vastos pastizales y en el río que serpenteaba a lo lejos. Lilith se detuvo al borde de la pista de carreras improvisada, respirando profundamente mientras acariciaba la crin de Áurea, la yegua que Camila Becker le había obsequiado hace dos meses exactamente. Aquel animal no era solo un regalo, sino un símbolo de fuerza y superación, una extensión de su propio espíritu indomable.Lilith había cambiado. Los meses de disciplina, dolor y arduo esfuerzo la habían moldeado en una versión más fuerte y resoluta de sí misma. Con la guía Camila, quien era la encarnación de la sabiduría y la resiliencia, Lilith había encontrado una forma de cargar con el dolor sin dejarse consumir por él, aunque por las noches aún seguía sucumbiendo en el abismo, la fuerza era más dominante, habla encontrado en el dolor su propia fortaleza. Pese a que si corazón extrañaba a Kamill, últimamente siente que es
RUSIAAquella noche La Mansión que ocupaba Martha, era una mansión conocida como el símbolo de poder y opulencia bajo la fría luna de invierno en Moscú. Aquella noche sus bastos salones brillaban con un esplendor oscuro candelabro de cristal reflejaban la luz sobre las paredes adornadas con retratos antiguos líderes de la mafia rusa la gala un evento reservado para los hombres y mujeres más temidos de la organización estaba en su apogeo.Kamill Becker había soportado meses de agonía pruebas que habrían quebrado a cualquier, noches de torturas que dejaban cicatrices no solo en la piel sino en el alma; sin embargo allí estaba él, vestido con un impecable traje negro, sus ojos como dos pozos de hielo enfrentando a los que alguna vez lo consideraron como su presa, aquel a quien tanto daño podían causar.Cuando el reloj marcó la medianoche el sonido de una campana resonó en el salón silenciando el murmullo de las conversaciones entonces un hombre de imponente presencia y mirada calculadora
La tarde caía sobre el hipódromo privado, el frío se sentía en cada rincón, pero eo ambiente ardía con la expectación de la carrera más importante de la temporada en Noruega. La élite criminal y financiera se mezclaba en las gradas exclusivas, donde el lujo y el peligro compartían una copa de champán.- Señora Becker, debe de tener cuidado, es la primera vez que esta saliendo - Dom se acerca a ella, la cadena de Cruz brilla con tanta intensidad - Usted sabe perfectamente quién estará en esta carrera.- Dom, todo estará bien - Fue la respuesta de Lilith.- No cabe dudas que sus ojos avellanas son encantadoras, pero estos de color gris, la convierten en la Amazona de Acero.- Dom, gracias por las palabras - Lilith sonríe - ¿hablaste con la abuela? - Mi señora esta cada vez más débil.Lilith al escuchar aquello solo suspira con fuerza, tres años definitivamente han sido pesados para Camila.- La dejo para que pueda prepararse señora - Dom salio dejando a Lilith a solas con la yegua.Epo
La puerta del despacho se abrió con un crujido que resonó en el aire denso del lugar. El sonido pareció detener el tiempo por un instante. Kamill Becker, el hombre que regía con mano de hierro el imperio criminal ruso, no dejó de escribir en su escritorio, pero sus ojos, aquellos ojos verdes que parecían iluminar las sombras de su propia alma, se alzaron lentamente hacia la entrada, sabia que la amazona estaba alli, pero el ambiente se sentíat totalmente diferente.Una figura encapuchada en negro apareció en el umbral, desbordando una presencia inconfundible. Sus pasos, firmes y seguros, llenaron el espacio con la resonancia de un eco de guerra, una melodía de acero que cortaba el aire. La amazona vestida completamente de negro, con su mirada fría como el hielo, caminó hacia él. Kamill no pudo evitar sentir un estremecimiento que recorrió su columna vertebral, un escalofrío involuntario que hizo que su piel se erizara.Ella no necesitaba decir palabra alguna para que el despacho se ll
- Es un gusto conocerla Señorita Ivanova - Lilith extiende la mano y Polina hace lo mismo, aquello toma por sorpresa a Kamill.El aire parecía detenerse cuando la mano de Lilith, fría como un amanecer en pleno invierno, rozó la de Polina. La temperatura de la sala descendió de forma tan palpable que Polina juró que la propia Reina del Hielo había invadido el lugar con su presencia. El contacto fue breve, pero suficiente para que un escalofrío recorriera su columna, erizándole la piel. Epona se erguía frente a ella con una elegancia que parecía sobrenatural. Sus movimientos eran precisos, fluidos, como si cada gesto estuviera cuidadosamente calculado. A pesar de la frialdad que transmitía, había algo en su porte que irradiaba un poder cálido, una llama oculta bajo su gélida superficie. -Polina -dijo la amazona con una voz grave pero melodiosa, mientras sus ojos, profundos como un bosque en penumbra, se clavaban en los de la pelirroja. Polina intentó hablar, pero las palabras se enre