Tú si sabes quererme©Safe Creative Código 2109289374098Instagram @anamarescritoraENRIQUE-Dos días después- La guerra estaba avisada y yo ya había tomado cartas en el asunto, no había tiempo que perder. Con Izel aquí y sabiendo de la existencia de mi hijo ya no podía estar bajo el yugo y el miedo de mi madre, ni mantener el secreto que me dijo mi padre antes de morir bajo llave, era momento de destapar el caño y sacar la peste. Así que llamé a la cárcel para saber los horarios de visita y programé ir el jueves por la mañana para verla, Salvador me acompañará. No sé si Leonora Martínez Gutiérrez sea mi madre y qué condena esté cumpliendo pero puedo jurar que es mejor persona que Pastora y eso es un consuelo. ⏤¿Estás seguro de lo que estás haciendo? ⏤ me pregunta Salvador, mientras ve por la ventana. Este camino es desconocido para los dos, jamás pensamos que llegaríamos a recorrerlo y, eso nos alegra en cierta forma. ⏤Lo estoy, Leonora Martínez es la clave de mi pasado y la form
Tú si sabes quererme©Safe Creative Código 2109289374098Instagram @anamarescritoraSalvadorAl escuchar la última frase veo como los ojos de Enrique se abre ampliamente sorprendido con la noticia. De pronto, yo paso de ser un simple acompañante a ser un testigo de lo que sé nos contarán en este momento. ⎯¡Dígamelo todo! ⎯ exige Enrique, mientras sus manos se tensan y las pone extendidas sobre la mesa. La señora suspira, lo hace hondo, tratando de guardar la calma como si estuviera a punto de revelar un secreto que ha cargado por años pero que sabe le costará algo más que los gritos de Enrique o sus exigencias. ⎯Enrique… ⎯ murmura, para luego voltear a ambos lados. Se queda viendo a una de las custodias que hay en la entrada. Ambos volteamos a verla como si quisiéramos averiguar qué es lo que pasará… ¿a caso se siente amenazada? ⎯Dígame… le juro por lo que usted quiera que no pasará nada. ⎯¿Seguro?, su madre es muy poderosa ⎯recalca ⎯, sabe lo que más me duele, a quién herir… ten
Tú si sabes quererme©Safe Creative Código 2109289374098Instagram @anamarescritoraENRIQUE Salí del lugar con la cabeza echa todo un lío, no podía creer lo que acababa de escuchar pero, a la vez, todo se me hacía lógico. Toda la vida había sentido que mi familia no era mía y hoy… lo comprobé. Me subo junto con Salvador a la camioneta y, en cuanto cierran la puerta, doy un suspiro tan estruendoso que parece que quiero sacar el alma ahí. ⎯¿Dónde nos dirigimos señor? ⎯ pregunta el chofer, pero yo no tengo ánimos de responderle. ⎯Llévanos a la oficina ⎯ ordena Salvador. ⎯¡No! ⎯ interfiero ⎯, a la oficina no, donde sea menos a encerrarme en cuatro paredes. ⎯Llévanos al restaurante de siempre ⎯ le indica, y después de un ‘si señor’, el auto avanza. Voy en silencio, si soy sincero no quiero hablar con nadie de nada. Todo lo que me acaban de decir me ronda por la cabeza y poco a poco trato de asimilarlo. No sé si tengo más coraje de que soy una víctima más de Pastora o porque mi padre
Tú si sabes quererme©Safe Creative Código 2109289374098IG @anamarescritoraIzel Enrique me toma de la cintura y me carga con sus fuertes brazos para llevarme dentro. Yo me elevo, me aferro de su cuerpo y me dejo ir junto con él hacia lo que sé será un paraíso en segundos. Podría decir que su llamada me tomó algo desprevenida pero nada que no pudiera resolver con un pretexto para poder llegar. Él me necesitaba, lo escuché en su voz y ahora, estoy aquí. Ambos caemos sobre la suave cama, y sus labios no dejan de recorrer mi cuerpo, están deseosos, más de lo que yo me podría haber imaginado, y sus manos me acarician con una pasión que siento que en cualquier momento me arrancarán la ropa. Poco a poco la intensión va pasando, pero llega la ternura. Enrique se separa de mi rostro unos segundos y me ve a los ojos. Ese gesto me lleva a la primera vez que estuvimos juntos en aquella cabaña, por lo que sonrío de inmediato. Puede ser que haya habido años de separación pero, nuestro amor no
Tú si sabes quererme©Safe Creative Código 2109289374098IG @anamarescritoraEnriqueDespués de estar con Izel y de saber que ambos teníamos un plan, me quedé mucho más tranquilo. Sin embargo, supongo que mi felicidad venía del hecho de saber que Pastora no era mi madre y que no le debía absolutamente nada. Este día, otro Enrique de León nació y el débil, sumiso y maltratado había muerto, los días de pasarme por encima había muerto. Así, llegué a mi casa con una sonrisa en el rostro y con la decisión de empezar. Por lo que, tan solo abrí la puerta de la casa me dirigí a mi oficina, aún llena de cajas sin abrir, cerré la puerta y saqué mi móvil para poder hablar en privado. Es exactamente la una de la mañana y sé que Carolina duerme en su habitación. ⎯¿Diga? ⎯ escucho la voz del detective. ⎯Tengo otro trabajo para usted ⎯ hablo sin más. ⎯Entonces, la información que le di funcionó, ¿cierto? ⎯ me dice seguro. ⎯Desde cuándo es usted quién hace la preguntas. ⎯No se lo pregunté, se l
Tú si sabes quererme©Safe Creative Código 2109289374098IG @anamarescritoraIzelAbro la puerta de la casa con sumo cuidado, ya que no quiero que mi madre se percate que acabo de llegar. Dejo el abrigo sobre el elegante perchero y subo las escaleras con cuidado para dirigirme hacia las habitaciones. Voy entrando al área de las puertas cuando veo la puerta de Toño entre abierta y la luz prendida. Me acerco y escucho que está platicando con Miguel. ⎯Y, ¿tu esposa e hijo están en el cielo, padrino? ⎯ pregunta con esa voz tierna. ⎯Así es… están en el cielo desde hace mucho tiempo. Los dos se cuidan. ⎯¡Qué bonito! ⎯ expresa ⎯, pero debes extrañarla mucho. ⎯Así es… un poquito cada día para que no me duela el corazón. Pero, ¿sabes?, ser tu padrino me ayuda a no hacerlo tan seguido ⎯ le consuela. ⎯Eso es bueno… ⎯le responde ⎯¿crees que mi papá me haya extrañado todo este tiempo?⎯¡Claro que sí!, estoy seguro que te extrañó horrores pero, ya no más. Ahora vivimos en la misma ciudad que é
Tú si sabes quererme©Safe Creative Código 2109289374098IG @anamarescritoraThalia-días después- De pronto la noticia de que Pastora no era madre de Enrique revolucionó todo, y las razones para sacarla de su vida se volvieron cada vez más grandes e Izel, no se quedaría atrás. Los planes cambiaron de la noche a la mañana, lo que pensaba hacer Izel lo pospuso y prefirió seguir el plan de Enrique para así, juntos, poder hacerlo más rápido y mejor. Por su lado, Enrique, comenzó a tomar medidas precautorias con respecto a sus negocios. Lo primero que hizo fue asegurarse de que su padre le hubiese dejado todo a él y nada más que a él. Leyó de nuevo el testamento, los contratos y las disposiciones y supo que, en cierto modo, su padre le estaba recompensando por todo lo que había pasado. Por otro lado, hizo una alianza con Miguel Caballero y Salvador para hacer la empresa más fuerte y que así no hubiese algún tipo de debilidad que le pudiera echar su plan atrás. Así como llamó a sus abo
Tú si sabes quererme©Safe Creative Código 2109289374098IG @anamarescritoraSalvador⎯¡Salva!⎯ escucho el grito de mi esposa, y tanto Miguel como yo dejamos nuestras copas y subimos las escaleras para unirnos con ella. Al llegar, vemos a Carolina sobre el suelo y a Enrique tratando de que recobre el conocimiento.⎯Venga Caro, despierta…⎯ le murmura, mientras le echa un poco de aire con un abanico de mano. ⎯¿Qué pasó?⎯ pregunto. ⎯No sé, se desmayó⎯ contesta Thalia. ⎯Llamaré a la ambulancia⎯ agrega Miguel, para luego tomar el móvil y comenzar a marcar. Me acerco a ellos tres y mientras escuchamos a Miguel dando las instrucciones nosotros nos vemos a los ojos.⎯¿Qué estaba haciendo? ⎯Abajo me dijo que se sentía un poco rara, dijo que era el vino, subió y la vi cerca de la habitación donde estaban ellos⎯ me indica, y ve a Izel y a Enrique. ⎯¿Qué hacían ahí solos?⎯ pregunto, algo molesto. ⎯Nada⎯ contesta Izel⎯, yo subí al baño y luego Enrique me contaba lo de su madre… momentos desp