Keene Taylor
Que criatura más combativa, la sonrisa en mis labios es difícil de contener ¡Me encanta! Esa personalidad. Y estoy seguro que será un dolor en el trasero de Garrett. —Keene, disculpa la actitud de Abigail, ella es muy buena en su trabajo. Pero es una chica que siempre habla sin detenerse a pensar mucho. —No, estoy molesto Luisa, me gusta ese carácter. Además necesito alguien que no se deje amedrentar por Garrett, eso evitará que mi hermano se la coma viva. Luisa, se ríe a carcajadas, sabe de lo que hablo. Garrett, es difícil de manejar mi hermano tiene el ego sobre la cabeza como un farol, razón por la que se mete en tantos problemas. Y es a mí quien le toca limpiar sus idioteces. —Si, estás seguro que Abigail, puede con la tarea y no terminará matando a tú hermano —Suelta una nueva carcajada Luisa después de luchar para contenerse —Yo la elegí porque es buena en lo que hace, sin embargo al final es decisión tuya. Ya que estás de acuerdo. Dejare las cosas como están. Asiento, estoy de acuerdo con la elección de agente. Veamos como la dulce señorita Abigail sale bien librada, espero que muestre sus garras cuando sea indispensable. De lo contrario Garrett se la comerá viva, sin dejar ni sus huesos. Abigail Torres ¿Por qué a mí? Que se supone que hice, para ir directo al precipicio. Luisa, me odia ¿Por qué no darle este cargo a Milena? Estoy protestando interiormente, mientras remuevo los documentos en busca de mi tablet, necesito conocer a mi futuro cliente, que para ser honesta solo se lo suficiente de algunas revistas de chismes. Así también por mi sobrina que lo cree en sus palabras “Un sueño” pongo mis ojos en blanco. Que va hacer un sueño ese mujeriego, quien destruye todo a su paso ¡Por favor! Ahora tengo que ir a encontrarme con ese individuo con el ego astronómico. —Abigail, jamás creí que tú me robarías a un cliente —Son las palabras que entra diciendo Milena a mi pequeña oficina. —¿Qué se supone robe está vez? Fue Luisa quien me selecciono para esta tarea, por lo que te sugiero la busques y hables con ella. Así me quitas ese peso, te aseguro que me harás un gran favor. —Ni, te pienses creo ese semblante de mosquita muerta que estás fingiendo Abigail, quien no quiere a Garrett Taylor como cliente. Solo finges no estar de acuerdo. Bueno, ah palabras necias… —Piensa lo que quieras, Milena me da completamente igual. Ahora sí me disculpas, tengo cosas que hacer antes de ir en busca de mi nueva asignación, así que la puerta está allí, si no la encuentras te consigo un mapa. La veo salir de mi oficina arrastrando sus tacones con fuerza, según ella, eso me va intimidar. Durante dos años que tengo de pertenecer a esta agencia, esa mujer me ha odiado sin explicación alguna, no entiendo porque, nunca busque hacerle daño. Además pertenecemos a áreas diferentes de clientes. En mi caso soy responsable de la imagen de políticos, alcaldes, empresarios, etc. Nada que ver con la farándula de ningún tipo. Entonces no soy su competencia como otros compañeros. Sin embargo ella me odia a muerte porque su cabeza no funciona bien. Al principio trate de llevarme bien con ella, pero luego comprendí que jamás pasaría. Porque ella simplemente me odia sin remedio. Y ahora con la indicación de Luisa, para que sea la responsable de Garrett Taylor tendré que cuidarme las espaldas de la arpilla. Horas más tarde. Porque, porque, siempre llego atrasada a cualquier lugar… Mis piernas arden por la velocidad con la que corro desde el estacionamiento hacia el gran edificio, si Luisa, se entera de mi nueva tardanza me va a despellejar viva. Llegó a recepción tratando que mi respiración se controle un poquito antes de pronunciar una palabra, la chica en el escritorio me observa detenidamente como si tuviera dos cabezas sobre mis hombros en lugar de una. —Puedo ayudarle señorita, tiene una cita —Pregunta, escucho la duda en su voz mientras que yo levanto un dedo indicado que me dé un minuto. —Se siente bien, quiere un vaso con agua —Asiento, definitivamente necesito uno —Solo espere enseguida voy a traérselo. Siéntese y espere aquí, vuelvo en un momento. Me debo ver fatal si en lugar de mandar a seguridad para que me corra ofrece agua. La chica se marcha deprisa por mi vaso con agua, mientras me acomodo en el sofá para esperar su regreso, masajeando mis pantorrillas. Luego saco de mi bolso un espejo para descubrir si realmente me veo como me siento. Estoy revisando mi rostro en el diminuto objetivo. Cuando escucho una discusión acalorada entre dos hombres que se aproximan. ¡Oh, no! —¿Quién te dio derecho a buscarme una niñera? —Gruñe quien supongo debe ser Garrett Taylor. —Tus acciones Garrett, están arruinando la imagen que quiero proyectar de la banda. Existen más integrantes no eres el único perjudicado, con tus tonterías. ¿Cómo te atreves a meter en tu habitación a esa chica? —Por enésima vez voy a repetirlo, no fui quien la llevó a mi habitación en el hotel. Ella, solita se metió, hasta donde lo veo aquí soy la víctima. —Así, quien creerá eso idiota, con el historial que tienes. Ya es suficiente, está vez pagarás por tus acciones. Tienes una idea que va suceder si su padre decide arruinarte la vida. Por dejarlo en ridículo. —¿Qué puede hacerme mandarme a la cárcel? Por educar a una zorra por hija. Entre su discusión ni enterados de mi presencia, espero que continúe de esa manera hasta que la recepcionista regresa con mi vaso con agua, atrayendo la atención de los dos hombres en mi persona. ¡Genial, simplemente genial!Abigail TorresAmbos hombres clavan su mirada sobre mi rostro con diferentes expresiones, con las cuales me dan deseos estar en cualquier lugar menos en presencia de ellos dos.—Señor Taylor, Ella, está esperando por usted, supongo—Dice la chica ofreciéndome el vaso con agua en mi dirección. Lo que me hace más notoria para los dos hombres.—Diana, acompaña a la señorita Torres a la sala de reuniones, pronto llegarán los demás chicos de la banda. Espere ahí, por favor —Dice Keene Taylor.Asiento, sin dar una respuesta es mejor que este en otro sitio por el momento. En especial por la malhumorada mirada que dirige hacia mí Garrett Taylor.¿Qué sucede con ese hombre?, Cierto que estoy un poco agitada por mi carrera por llegar tarde. No, es para tanto que me mire con disgusto.Bien, en ese caso como dice mi hermana Marta patitas para que las quiero, me pongo en marcha con Diana. Poniendo una breve distancia con ambos hombres.No, sin antes dirigir una última ojeada disimulada a ese hombre
Garrett Taylor¿Qué chistecito es este? ¿Cómo que una niñera? Estoy por protestar cuando mi hermano me dirige una mirada de advertencia para que mantenga mi boca cerrada.Luego, concentra su mirada que es muy diferente a la que me dedico para contemplarla a Ella.¿Qué demonios me estoy perdiendo aquí? Desde cuando mi hermano se distrae con una simple chica esto es sumamente interesante.Lo que me hace prestar más atencion a la mujer cuyo rostro se tiñe de rosa, mientras baja su mirada a su tableta fingiendo buscar en ella. Esa acción me golpea directo en mi cara, removiendo una sensación en mi interior de reconocimiento ¡Pero de donde!Abigail Torres dice mi hermano que se llama, sin embargo no logro entender porque me siento extraño con su presencia como si me perdiera de algo. Y lo peor es que en mi interior está surgiendo otra emoción que no me gusta ni comprendo que tiene todo que ver con mi hermano si consigue entrar en el corazón de esta mujer.Abigail TorresUna vez finaliza la
Garrett TaylorSu insistencia en decir que no es mi niñera es divertido.—Así, que niegas que mi hermanito te contrato para limpiarme el trasero —Ella comienza a negar, pero luego se detiene —Me entiendes eres mi niñera señorita Torres no tienes defensa contra eso es una verdadera lástima.— ¿Por qué es una lástima? —Pregunta confundida con mis palabras.Me acerco lentamente a ella como acechando un pequeño conejo que cayó en mi trampa, la acorralo entre mis brazos haciéndola retroceder para mantener su distancia conmigo.—¿Por qué soy un peligro para una chica como tú, mi pequeña niñera? —Hablo en serio con mi advertencia aunque ella no me entienda.—Así, quien dice que no sea al contrario señor Taylor —Me reta haciendo a copio de valentía.Muy interesante en todos mis años en la farándula jamás una chica se había mostrado tan valiente en mi presencia todas comparten muchas características que van de la admiración al quererme complacer pero con ella ni siquiera noto el nerviosismo tí
Garrett TaylorLa imagen de Abigail arrodillada sobre el suelo es tan excitante que muy malos pensamientos acuden a mi cabeza, esa posición puede ser muy divertida en una situación diferente.Me concentro en su pequeño cuerpo arqueado, para luego buscar su rostro que se torna de un lindo color rosa ¡Muy tentador! Un carraspeó seguido de una voz murmurando disculpas me saca de mi perdida momentánea de cordura.¡Pero que diablos se me está cruzando por la cabeza!Si está mujer fue contratada por mi hermano para fastidiar mi vida, debería estar burlándome de ella, hacerle la vida difícil en lugar de estar teniendo un tipo de fantasía erótica con ella entre mis piernas.—Déjame ayudarte Abi te hiciste daño ven hermana —Dice una mujer solo unos cuantos años mayor que la mencionada —Señor Taylor disculpe el espectáculo simplemente no pudimos detenernos a la velocidad que veníamos.—No, hay problema —Digo encogiéndome de hombros sin mover ni un dedo para ayudar.—Si, bueno, soy la hermana ma
Garret Taylor—Garrett, finalmente llegas hermano por un momento se nos cruzo por la mente que te habías ido directo a casa —Es el recibimiento de Dylan.—¿Qué te hizo suponer esa idiotez? —Pregunto tomando una de las cervezas sobre la mesa para llevarla a mis labios.—Se me ocurrió por el hecho que ahora tienes niñera —El muy idiota me recuerda mi cruz —Pero vaya, vaya mira quien nos acompaña esta noche.Señala con su cerveza en dirección donde Abigail se detiene decidiendo si acercarse donde nos encontramos o quedarse a una distancia prudente de nosotros. Al final parece decir por quedarse en la barra en lugar de compartir el espacio con los niños malcriados como de seguro somos reconocidos por ella.—Mira, parece que la ricura no le apetece sentarse con nosotros acaso nos considera no gratos de su compañía, creo que eso terminara por resentirme con ella —Dice Erick con un divertido puchero.—Ya déjenla en paz pobre chica simplemente nos está concediendo nuestro espacio —Interviene
Garrett TaylorVer al tipo arrimarse a ella me encendió en cuestión de escasos segundos sacando a la chica sobre mi regazo para ir por el hombre que se atreve tocar su rostro con sus asquerosas dedos juro que voy a partirle su estúpida cara.—Garrett —Escucho la empalagosa voz de quien sabe como se llame me marcho sin prestarle la mínima atención.En este momento lo único que quiero es alejar ese tipo de Abigail ni siquiera entiendo claramente porque siento hervir mi sangre con solo imaginar que ella, llegue a salir de este lugar en su compañía.Aunque se que no me debería importar ni un bledo igual no puedo dejarlo pasar ¡No, en mis narices!—Como que siempre hay imbéciles que no aceptan un no por respuesta —Digo conectando mi puño con el rostro del tipo que al verse sorprendido no tiene tiempo ni de defenderse.Una vez en el suelo completamente noqueado sangrando de su nariz fijo mi mirada furiosa en Abigail que se cubre la boca con sorpresa. Luego su mirada se transforma en otra co
Garret Taylor—Hermano, que te estaba entreteniendo nos has tenido esperando, Susana quiere bailar para nosotros en especial para ti —Murmura Dylan mientras señala con su cerveza hacia donde se encuentra la mencionada enfundada en un minivestido sobre tacones de seis centímetros, que hacen ver sus pierna largas y tonificadas.Me arrojo sobre el cómodo sofá solo estirándome lo suficiente para tomar una cerveza para luego llevarla a mis labios mientras concentro mi mirada en la chica que inicia con rítmicos movimientos de sus caderas sobre la mesa.Pero mi atención sobre ella dura poco hasta que veo aparecer a una chica diferente que deje olvidada en el pasillo de los tocadores.Quien con cortos pasos se dirige nuevamente hacia la barra tomando asiento inmediatamente el bar tender le extiende un vaso con algún tipo de bebida. A lo que ella agradece con una genuina sonrisa ¡Maldita sea Abigail!Acaso no comprendió que en ese lugar atrae la atención de cualquier idiota.—Garrett te estás
Garrett Taylor¿Qué tiene está chica que me enloquece tanto verla conversar con otros hombres?Me pregunto perdido entre el calor de sus suaves labios mientras degusto su nombre besándola Abigail Torres esta atrevida terminara volviéndome loco, no puedo dejarla ni cinco minutos sin que atraiga la atención de cuervos hacia ella.Aunque soy el menos indicado de hacerle reclamos a esos tipos, si también soy como una polilla atraído directo al fuego.Concentrado en su calor solo un momento de detracción me vale para que ella finalmente me muerda mi labio inferior, el dolor es horrible, me separo de su boca, pero no logro recuperarme cuando otro dolor mucho más intenso hace que me arquee buscando mis joyitas que fueron salvajemente lastimadas.—Pero qué demonios te pasa quiero tener hijos en un futuro loca —Ladro, con mi mano sobre mis testículos lamentándome del dolor.La muy descarada sonríe mostrándome una fila de dientes blancos, recordándome a un diablito que se acaba de salir con la