Abigail Torres
Ambos hombres clavan su mirada sobre mi rostro con diferentes expresiones, con las cuales me dan deseos estar en cualquier lugar menos en presencia de ellos dos.
—Señor Taylor, Ella, está esperando por usted, supongo—Dice la chica ofreciéndome el vaso con agua en mi dirección. Lo que me hace más notoria para los dos hombres.
—Diana, acompaña a la señorita Torres a la sala de reuniones, pronto llegarán los demás chicos de la banda. Espere ahí, por favor —Dice Keene Taylor.
Asiento, sin dar una respuesta es mejor que este en otro sitio por el momento. En especial por la malhumorada mirada que dirige hacia mí Garrett Taylor.
¿Qué sucede con ese hombre?, Cierto que estoy un poco agitada por mi carrera por llegar tarde. No, es para tanto que me mire con disgusto.
Bien, en ese caso como dice mi hermana Marta patitas para que las quiero, me pongo en marcha con Diana. Poniendo una breve distancia con ambos hombres.
No, sin antes dirigir una última ojeada disimulada a ese hombre oscuro que parece devorar mi alma con su mirada.
Garrett Taylor
Ella, ¿Dónde la he visto antes? Su rostro me parece conocido pero no recuerdo de donde, pero siento, cierta familiaridad en su rostro.
Intrigado trato de hacer memoria pero los recuerdos no acuden a mi cabeza.
—Sucede algo pareces distraído Garrett —Pregunta mi hermano interesado.
—¿Cómo se llama ella? —Pregunto en lugar de dar una respuesta.
—Preguntas por Abigail, te dije hace un momento es el agente que contrate para ayudar con tu imagen y resolver nuestro pequeño problema ¿Por qué la pregunta?
—Seguro que se llama Abigail
—Sí, estoy seguro. Hoy me presento con ella, mi amiga Luisa. Ya había hablado sobre eso, porque esa actitud interrogativa Garrett.
—Por nada, quizás la estoy confundido con alguien más solo olvídalo. Vamos terminemos con esta tontería.
Seguimos sus pasos solo unos minutos después de Abigail. Y mi mente aun pérdida en tratar de recordar de donde me es familiar esa chica.
Abigail Torres
Mantengo mi mente ocupada en mi tablet repasando mi estrategia para hacer frente al “pequeño problema de Garrett Taylor”, según las palabras de Luisa.
¡Pequeño problema! Si, claro por sus antecedentes me estoy haciendo la idea en mi mente que este hombre se convertirá en un verdadero dolor de cabeza.
Adiós mis días tranquilos tratando con políticos y senadores. Me convertiré en la niñera de un rockero malcriado.
—Señorita Torres, puedo ayudarle con algo más quizás otra bebida o comida ¿Qué se le apetece?
—Gracias, Diana pero no tengo hambre —Digo, hablo en serio mi estómago esta hecho un nudo por los nervios, la chica asiente con una sonrisa retirándose dejándome sola pocos minutos.
Mi espera por los hombres no dura mucho, entran en compañía de otros cuatro. Escoltados por Diana que trae unas carpetas entre sus brazos.
Me quedo con la boca abierta ¡Mi mente grita que estoy en un mundo paralelo donde el gen masculino, chicos bonitos predomina!
No, conozco nada sobre estos chicos. Mis únicas referencias como repito son de las revistas que revise deprisa y por todo lo que escucho de mi sobrina. Que es una fanática de esta banda de rock.
—Vaya, vaya miren que trajo el gato a nuestra reunión un lindo pajarito —Dice, uno de ellos con una sonrisa un tanto traviesa. Tomando asiento de forma descuidada, colocando sus largas y musculosas piernas enfundadas en unos pantalones de mezclilla rotos acompañadas por botas negras de combate.
Cada uno de ellos toma asiento frente a mí estudiando con su mirada a la intrusa en su reunión. Inician con bromas tratado de deducir cuál es mi razón de estar en su presencia. Con sus conjeturas me siento un poquito intimidada con estos hombres.
—Sera, que finalmente Keene decidió que debo casarme con una linda señorita que me reforme —Dice el chico que tiene sobre su cabeza un sombrero raro tipo copa.
—No, lo creo Keene jamás hace de casamentero Axel —Mmm así que él es Axel ¿Qué dijo mi sobrina sobre el aquel día? Si, hubiera prestado un tantito de atencion. Pero hace unos días atrás ni enterada estaba que trabajaría con ellos.
No estaba interesada en que sueño surrealista me imaginaria estar en presencia de estos chicos del demonio.
—Yo, pienso que ella es una grupi que se ofreció acompañarnos durante todos nuestros conciertos —¿Qué cosa?
Un carraspeo atrae la atencion de todos que se dejan de sus tontas bromas, utilizando mis costillas como guitarra. Para concentrarse en Keene cuyo rostro permanece muy serio. Nada parecido al hombre simpático que conocí hace unas horas en la agencia.
—Basta chicos es hora de que haga las presentaciones, ella es Abigail Torres, quien a partir de hoy se convertirá en el ascensor de imagen de Garrett, será responsable de limpiar sus tonterías ante el público.
—En pocas palabras esta bella señorita será su niñera —Estallan en carcajadas todos los presentes con excepción de uno.
Adivinen quién…
—No, es divertido chicos, pero si tienen razón Abigail se dedicará a limpiar su imagen. Cuidar que el escrutinio público sobre Garrett cambie ¿Cómo saben el senador de New Orleans, no está feliz por lo sucedido con su hija? Quiere la cabeza de Garrett, y no hablo precisamente la que tiene sobre los hombros. Así, que está señorita tiene la tarea de poner la balanza a nuestro favor.
Menuda tarea me están encomendando.
El mencionado quien permanece en silencio todo el tiempo durante la conversación, solo aprieta su mandíbula, manteniendo su fría mirada en mi rostro.
Esto, no, será fácil, definitivamente no.
Garrett Taylor¿Qué chistecito es este? ¿Cómo que una niñera? Estoy por protestar cuando mi hermano me dirige una mirada de advertencia para que mantenga mi boca cerrada.Luego, concentra su mirada que es muy diferente a la que me dedico para contemplarla a Ella.¿Qué demonios me estoy perdiendo aquí? Desde cuando mi hermano se distrae con una simple chica esto es sumamente interesante.Lo que me hace prestar más atencion a la mujer cuyo rostro se tiñe de rosa, mientras baja su mirada a su tableta fingiendo buscar en ella. Esa acción me golpea directo en mi cara, removiendo una sensación en mi interior de reconocimiento ¡Pero de donde!Abigail Torres dice mi hermano que se llama, sin embargo no logro entender porque me siento extraño con su presencia como si me perdiera de algo. Y lo peor es que en mi interior está surgiendo otra emoción que no me gusta ni comprendo que tiene todo que ver con mi hermano si consigue entrar en el corazón de esta mujer.Abigail TorresUna vez finaliza la
Garrett TaylorSu insistencia en decir que no es mi niñera es divertido.—Así, que niegas que mi hermanito te contrato para limpiarme el trasero —Ella comienza a negar, pero luego se detiene —Me entiendes eres mi niñera señorita Torres no tienes defensa contra eso es una verdadera lástima.— ¿Por qué es una lástima? —Pregunta confundida con mis palabras.Me acerco lentamente a ella como acechando un pequeño conejo que cayó en mi trampa, la acorralo entre mis brazos haciéndola retroceder para mantener su distancia conmigo.—¿Por qué soy un peligro para una chica como tú, mi pequeña niñera? —Hablo en serio con mi advertencia aunque ella no me entienda.—Así, quien dice que no sea al contrario señor Taylor —Me reta haciendo a copio de valentía.Muy interesante en todos mis años en la farándula jamás una chica se había mostrado tan valiente en mi presencia todas comparten muchas características que van de la admiración al quererme complacer pero con ella ni siquiera noto el nerviosismo tí
Garrett TaylorLa imagen de Abigail arrodillada sobre el suelo es tan excitante que muy malos pensamientos acuden a mi cabeza, esa posición puede ser muy divertida en una situación diferente.Me concentro en su pequeño cuerpo arqueado, para luego buscar su rostro que se torna de un lindo color rosa ¡Muy tentador! Un carraspeó seguido de una voz murmurando disculpas me saca de mi perdida momentánea de cordura.¡Pero que diablos se me está cruzando por la cabeza!Si está mujer fue contratada por mi hermano para fastidiar mi vida, debería estar burlándome de ella, hacerle la vida difícil en lugar de estar teniendo un tipo de fantasía erótica con ella entre mis piernas.—Déjame ayudarte Abi te hiciste daño ven hermana —Dice una mujer solo unos cuantos años mayor que la mencionada —Señor Taylor disculpe el espectáculo simplemente no pudimos detenernos a la velocidad que veníamos.—No, hay problema —Digo encogiéndome de hombros sin mover ni un dedo para ayudar.—Si, bueno, soy la hermana ma
Garret Taylor—Garrett, finalmente llegas hermano por un momento se nos cruzo por la mente que te habías ido directo a casa —Es el recibimiento de Dylan.—¿Qué te hizo suponer esa idiotez? —Pregunto tomando una de las cervezas sobre la mesa para llevarla a mis labios.—Se me ocurrió por el hecho que ahora tienes niñera —El muy idiota me recuerda mi cruz —Pero vaya, vaya mira quien nos acompaña esta noche.Señala con su cerveza en dirección donde Abigail se detiene decidiendo si acercarse donde nos encontramos o quedarse a una distancia prudente de nosotros. Al final parece decir por quedarse en la barra en lugar de compartir el espacio con los niños malcriados como de seguro somos reconocidos por ella.—Mira, parece que la ricura no le apetece sentarse con nosotros acaso nos considera no gratos de su compañía, creo que eso terminara por resentirme con ella —Dice Erick con un divertido puchero.—Ya déjenla en paz pobre chica simplemente nos está concediendo nuestro espacio —Interviene
Garrett TaylorVer al tipo arrimarse a ella me encendió en cuestión de escasos segundos sacando a la chica sobre mi regazo para ir por el hombre que se atreve tocar su rostro con sus asquerosas dedos juro que voy a partirle su estúpida cara.—Garrett —Escucho la empalagosa voz de quien sabe como se llame me marcho sin prestarle la mínima atención.En este momento lo único que quiero es alejar ese tipo de Abigail ni siquiera entiendo claramente porque siento hervir mi sangre con solo imaginar que ella, llegue a salir de este lugar en su compañía.Aunque se que no me debería importar ni un bledo igual no puedo dejarlo pasar ¡No, en mis narices!—Como que siempre hay imbéciles que no aceptan un no por respuesta —Digo conectando mi puño con el rostro del tipo que al verse sorprendido no tiene tiempo ni de defenderse.Una vez en el suelo completamente noqueado sangrando de su nariz fijo mi mirada furiosa en Abigail que se cubre la boca con sorpresa. Luego su mirada se transforma en otra co
Garret Taylor—Hermano, que te estaba entreteniendo nos has tenido esperando, Susana quiere bailar para nosotros en especial para ti —Murmura Dylan mientras señala con su cerveza hacia donde se encuentra la mencionada enfundada en un minivestido sobre tacones de seis centímetros, que hacen ver sus pierna largas y tonificadas.Me arrojo sobre el cómodo sofá solo estirándome lo suficiente para tomar una cerveza para luego llevarla a mis labios mientras concentro mi mirada en la chica que inicia con rítmicos movimientos de sus caderas sobre la mesa.Pero mi atención sobre ella dura poco hasta que veo aparecer a una chica diferente que deje olvidada en el pasillo de los tocadores.Quien con cortos pasos se dirige nuevamente hacia la barra tomando asiento inmediatamente el bar tender le extiende un vaso con algún tipo de bebida. A lo que ella agradece con una genuina sonrisa ¡Maldita sea Abigail!Acaso no comprendió que en ese lugar atrae la atención de cualquier idiota.—Garrett te estás
Garrett Taylor¿Qué tiene está chica que me enloquece tanto verla conversar con otros hombres?Me pregunto perdido entre el calor de sus suaves labios mientras degusto su nombre besándola Abigail Torres esta atrevida terminara volviéndome loco, no puedo dejarla ni cinco minutos sin que atraiga la atención de cuervos hacia ella.Aunque soy el menos indicado de hacerle reclamos a esos tipos, si también soy como una polilla atraído directo al fuego.Concentrado en su calor solo un momento de detracción me vale para que ella finalmente me muerda mi labio inferior, el dolor es horrible, me separo de su boca, pero no logro recuperarme cuando otro dolor mucho más intenso hace que me arquee buscando mis joyitas que fueron salvajemente lastimadas.—Pero qué demonios te pasa quiero tener hijos en un futuro loca —Ladro, con mi mano sobre mis testículos lamentándome del dolor.La muy descarada sonríe mostrándome una fila de dientes blancos, recordándome a un diablito que se acaba de salir con la
Abigail TorresEscucho la puerta abrirse sin que la persona se anuncie, dejándome completamente vulnerable a la mirada de Garrett, que permanece completamente inmóvil con su mirada fija sobre mi cuerpo, mientras que mi mente se queda completamente en blanco por unos segundos.Se que debo buscar algo con el cual cubrir mi desnudez de su mirada que poco a poco se oscurece mientras veo que traga con dificultad, sus manos convertidos en puños a ambos lados de sus caderas como si estuviera luchando con una decisión difícil en su cabeza.—¿Quién te dio permiso entrar de esa manera? —Digo, recuperando un poco de sentido común, mientras me vuelvo un poco hacia la cama buscando algo con el cual cubrirme.Para mi mala suerte mi maleta aun esta hecha por lo que me pongo a remover dentro de ella buscando que ponerme, hasta el momento no he escuchado ni una sola palabra de su parte. Seguro esta igual que yo sorprendido con la situación.Pero luego siento su brazo envolver mi cintura por la espalda