Estando en la sala del cine, nos acomodamos en nuestros lugares y no esperamos mucho para que la función empiece, tuvimos suerte de conseguir boletos ya que casi todo estaba ocupado. Realmente ni estoy prestando atención a la película, me preocupa más mi situación sentimental/ laboral con Derek, estoy considerando seriamente en decirle lo que siento, pero no ahora... quizás para la fiesta de año nuevo o tal vez para el día de San Valentín del año que viene o quizás.... no sé, no estoy segura de cuando confesarme.No voy a negar que no tengo miedo, no quiero que me rechace y se aleje de mí por haberme enamorado de él, pero ¿Y si mi confesión cambia las cosas para bien? Es una probabilidad mínima, pero existe y quiero a provecharla ¿O tal vez no? ¡Rayos, no estoy segura de que hacer! y no puedo pedirle un consejo a mi hermano, eso sería una de las cosas más estúpidas que podría hacer. Con los únicos que puedo hablar del tema es con Connor y Marian, quizás hable con ellos después.La pel
Suelto una fuerte carcajada y le digo que no, ella me increpa, diciendo que ella pensaba que me estaba yendo porque se entrometió en mi día, le he explicado que, estaba en un pequeño dilema y que necesitaba hablar con mi amiga para poder aclarar mi mente, Diana me mira con curiosidad, parece que le intriga mi situación, busco las palabras adecuadas para explicarme, no quiero rebelar mucho.—Es... con respecto a Derek.—¿Qué hizo el idiota de mi hermano? — Sisea molesta mientras se cruza de brazos haciendo un pequeño puchero.—No hizo nada es solo que.... — Tomo un poco de aire y relajo los hombros. —Sé que estamos en una relación, pero....—¿Sientes que no expresa su cariño o que no te quiere? — Ladea un poco la cabeza, me toma del brazo y me lleva hasta una banca cercana en donde tomamos asiento. —Astrid, mi hermano nunca ha sido un hombre…cariñoso ni que exprese sus sentimientos con facilidad, bueno, antes era más expresivo que ahora.—¿Fue por lo ocurrido con Mónica?—Sí, ella dejó
En nuestra mesa se encuentran mis “cuñados” y mi hermano, entre unos amigos de los siete hermanos, el que más resalta es Rayan, ya que es un hombre bastante platicador igual que Diana, además de que es muy guapo, como los modelos que aparecen en las revistas. Por lo que veo, le gusta mucho fastidiar a Derek, ya que no para de hacerle bromas, él por su parte, simplemente lo ignora y de vez en cuando contesta con un “mmm” “aja” y “lo que digas”, pero se nota en su mirada que disfruta de su conversación.—Por cierto, mamá y Jaquelín pusieron muérdagos por varias partes de la sala, incluso en la casa— Le dice en tono divertido y jocoso, además de que le ha dedicado un baile de cejas divertido.—No necesito de un muérdago para besar a mi novia ¿Lo sabias?Ella suelta una pequeña risita y le hace ojitos de niña tierna, el señor Baker pone los ojos en blanco y sigue con la conversación con su amigo. Poco a poco, varias personas empiezan a formar parejas y se ponen a bailar al ritmo de la mús
Derek.Sus palabras me sorprenden, incluso he reído de forma incrédula al no poder creerme lo que me dice ¿Sera que me lo dice por compromiso? No me quiero hacer ilusiones con sus palabras, que más daría porque fueran verdad, quizás sea por el impulso de ver el muérdago encima de nosotros... si, debe ser eso. Veo como extiende algo en mi dirección, sus mejillas están rojas y se ve bastante encantadora, tomo el regalo que me está ofreciendo y cuidadosamente quito el envoltorio.Para mi enorme sorpresa, es una cadena gruesa con una placa en medio, en ella se encuentra nuestras iniciales y en la parte de atrás dice 4ever. Mi corazón se acelera, mis ojos se vuelven a posar en Astrid, en ellos veo reflejado mucha sinceridad, ella realmente me está hablando con el corazón en la mano, pero.... ¿De verdad quiero esto? digo, la única razón por la cual me acerque a ella estos últimos meses fue por el contrato que hay de por medio, en caso contrario, muy probablemente ella estaría en su casa viv
Estando en mi casa, me voy al jardín y me siento en una de las sillas de ahí, contemplo el cielo por un largo rato, por mi mente puedo recordar con claridad las noches en las que Astrid y yo salíamos al palco para ver la estrellas y nos quedábamos ahí hasta que ella se quedaba dormida. Hace bastante frío, pero esto me ayuda a pensar. Pasado un rato, decido volver a dentro y enseguida saco mi celular de mi bolsillo.Cuando la otra parte contesta, le digo que prepare los unos documentos para mí cuanto antes, de ser posible los quiero para mañana a primera hora del día, ya que es un asunto muy urgente, él me dice que no me preocupe, que mañana mismo tendrá lo que necesito y lo enviará a mi oficina. Una vez que termino la llamada, voy a la cocina y me tomo la mitad de mi botella de wiski, lo voy a necesitar para poder dormir bien esta noche.Al día siguiente, me despierto con una horrible resaca, menos mal que mi sirvienta me tiene listo un café bien cargado junto con el desayuno listo. M
Una vez que está todo firmando, cierra la carpeta y luego la guarda en uno de sus cajones con llave, se levanta de su asiento y camina en mi dirección, ofreciéndome su mano. No me atrevo a mirarlo, así que solo me limito a aceptar su gesto para levantarme de mi lugar, estoy tan aturdida y triste, que no tengo fuerzas para ponerme de pie por mi propia fuerza.—Vamos a comer juntos por última vez.—No estoy arreglada para ir a algún lugar— Contesto en un suave murmullo, trato de ahogar mis sollozos.—Te llevo al departamento para que te arregles, ya hice una reservación.Al escuchar esto, me doy cuenta de que, parece que lleva planeando esto desde anoche y no me sorprende, cuando algo le estorba o incomoda a Derek, prefiere quitarlo de su camino cueste lo que cueste y yo me he convertido en un obstáculo en su vida, pase de ser su juguete sexual a un objeto que ya no se sirve. Asiento con la cabeza y salimos juntos del lugar sin decir ni una sola palabra más.Una vez que estoy arreglada,
Paso mis manos brazos alrededor de su torso y mis manos tiran de su ropa con algo de fuerza, quiero aferrarme a este momento por un rato más... quiero guardar en mis memorias este hermoso recuerdo, aunque en el futuro me duela, quiero tenerlo presente. Mi cuerpo tiembla de tristeza y en mi garganta empiezo a sentir dolor por forzarme a no llorar tanto, tampoco es que la música ayude mucho, la verdad.Derek no dice nada, simplemente se queda callado otra vez ante mi confesión de amor, esto hace que quede más que claro que no quiere nada conmigo, ni siquiera una relación de sexo casual, esto hace que mi corazón me duela aún más, al darme cuenta de que fui una idiota al dejarme llevar por mis sentimientos y hacer caso omiso a las advertencias y consejos de mi amiga... me siento fatal en estos momentos.—No sabes las ganas que tenia de cumplir con la promesa que te hice.—¿Qué promesa? — Escuchar su profunda voz por fin, es un alivio.—Supuse que no lo recordarías— Sigo sin mirarlo a los
“Bueno” escucho a la distancia mientras Derek regresa a la cama, acostándose una vez más, luego levanto la mirada hacia él y veo que se talla la cara con una de sus manos, resopla con fuerza y sigue escuchando a la persona del otro lado, por su expresión, sospecho que debe ser Diana. Baker aleja el teléfono de su oído y pone el altavoz.—¡Ya me enteré de lo que hiciste, Derek Baker! — La voz furica de la madre de Derek se escucha al otro lado del teléfono. —¡A ti de verdad te gusta hacer sufrir a las personas!—¿Y ahora de que hablas? Me estoy recién levantando.—¡¿Crees que no me lo dijo tu hermana?! ¡Mira que hacerle ese desplante a la pobre Astrid! Tu realmente quieres sentirte miserable toda la vida ¿Verdad?—Buenos días, señora Baker— Saludo de la forma más amable que conozco, pero me cuesta un poco de trabajo hablar ya que estoy algo afónica de tanto gritar.—¿Astrid?Derek le dice a su madre que ahora mismo estamos en su cabaña a las afueras de la ciudad, que seguimos acostados