Iris se quedó sin expresión alguna mientras que Vilma le comentaba sobre varios temas, las ultimas noticias al día.-Es una desgracia para esa familia, no tengo muy presente la chica que falleció, pero si a Madelin…hasta hace poco trabajaba en la estafeta de correo…Pero, no tengo presente a su madre…-.-Yo no conozco personalmente a ninguno de ellos…que desgracias que suelen pasar en las familias, entre aguas revueltas, entre penas ajenas…-. Acomodaba el mantel de su elegante comedor.-Mañana es el cumpleaños de Rob y todos vendrán a festejarlo, espero que vengas con tu esposo y tus hijos, me encantaría presentarle tu sobrina a Rick, parece que Marín aún no se decide a casarse, lo bueno es que mi hijo está decidido a seguir mi consejo…es un poco exigente, la última vez que hablamos me dijo muchas cosas que me dejaron tranquila…tomará un poco de distancia de ese Fred y es lo mejor, no hay que darle a la gente ventaja de inventar cosas que no son-. Las servilletas y copas eran colocadas
La esposa del reverendo entonaba aquella melancólica y triste canción de despedida, las campanas sonaban tristes, el féretro se encontraba listo para ir al último lugar donde quedaría bajo tierra.De un lado estaba Madelin y su hija, y del otro lado Calvin y su esposa Rosy…se veía un poco mejor que el día de la boda, quizás era el rubor y el brillo de labios que le destacaban aquellos ojos tan hermosos, lo cierto es que en ella algo faltaba. Madelin no se había percatado de las palabras del reverendo, su atención estaba en aquella expresión y aquellos ojos tristes.¿Acaso estaba enferma? Lamentaba no tener la suficiente confianza para acercarse a Rosy. Solo esperaba que fuera feliz, se notaba a leguas que era una sencilla y cálida persona.Calvin era todo lo contrario, lucia arrogante, cínico y descarado, pero no le sorprendió mucho, siempre había sido de esas personas imponentes y frías. ¿Que había visto ella en él cuando se enamoró? Era tan jovencita y con una vida algo difícil con
Fred abría la puerta de casa con un gran paquete en manos, siempre tenía algún detalle para su madre, y bombones para su padre, se fijó que sus padres estaban en el jardín, no quiso interrumpirles lo que parecía una seria conversación.Sabía muy en el fondo que su madre estaba realmente agotada de batallar contra Iris, contra las personas que los miraban como si él y Rick fueran dos ladronzuelos, o peor aún, como si el delito de sus sentimientos fuera algo que manchara sus vidas.Desde que estaban chicos él había sentido una extraña sensación de calidez y amor por Rick, pero Fred era tímido y retraído en muchas ocasiones, por eso le rechazaba y quizás en algún momento llegó a ser algo apático a los detalles de Rick, sus palabras, cariño y miradas.Poco a poco Rick logró que se sintiera más seguro en cuanto a luchar por sus sueños, fijar límites y exponer sus sentimientos y emociones. Quizás fue aquella ocasión que lloraba desconsoladamente que Rick acudió a buscarle al lago donde solí
Betsy se acercó a la cocina para saludar a su querida señora Fresno, si no fuera por ella, su vida hubiese sido demasiado miserable.-Señora Fresno, que alegría verla-.-Señorita Betsy. Que felicidad verle tenemos meses de no conversar y tomarnos algo…no la he olvidado-.-He recibido sus paquetes, mi padre se lo agradece-.-Es con todo cariño-.Iris ingresó a la cocina en busca de unos cocteles.-Querida estabas aquí en la cocina, se me olvida que te encanta siempre ofrecerte a lavar la vajilla y esas cosas, pero la señora Fresno se encarga de todo, además tenemos un sistema de lavado automático, no es necesario que vengas a lavar platos…estamos festejando a mi querido Rob-. Se marchaba de la cocina.La señora Fresno miró a Betsy quien parecía algo avergonzada.-No le preste atención, ya la conoce, es solo por molestarla-.-Ella siempre me ha tratado mal. pero en cambio Rob es buena persona-.-Entonces quédese con las cosas buenas, atesórelas como esas fotografías en blanco y negro qu
El nuevo día hizo su arribo con un sol que se colaba por todo el jardín y ventanales, Leroy y Moss se alistaban después del desayuno para salir de compras al centro de la ciudad, la mañana solía pasarse con prisa, el tiempo volaba y tenían varios trámites que realizar. Leroy quería ir al mercadillo de frutas y verduras, además de su habitual visita a la tienda de especias, con un sol maravilloso y reluciente se disponían a pasar por el nuevo vivero en busca de un nuevo rosal para el jardín.Caminaron algunos pasos y de un momento a otro Leroy se detuvo para tomar la mano de su esposa y colocarla sobre su pecho.-Hoy no me siento muy bien-.-Entonces te llevaré al médico con carácter urgente-.-No es necesario…tendré que ser sincero contigo, me escapé de la cama a media noche y comí varios chocolates mientras le daba una letal pincelada de maldad a Miss Noli, ya sabes aquella dama que ha envenenado a varios miembros de la familia-.-Oh Leroy eres el colmo…casi me matas de un susto-.-C
Cori colocó la tetera lista para verter el café junto a una jarrita de leche y crema. Añadió canela, le encantaba batirlo a punto con un toque de canela.-Señora Cori… ¿Usted ha soñado con Úrsula? Es que no dejo de pensar ¿Por qué ella haría tal cosa? …suicidarse-. Susurró atemorizada.-Nunca pensé que tuvieras delirios, Calvin es un buen marido, deberías dejar de hablar tantas cosas dementes-.-Es que yo creo que…bueno yo…siento que estoy en… he sentido…-.-Trágate al menos lo que preparé…-. Cori daba un manotazo en la mesa, Rosy guardó silencio, tomando el plato que tenía frente a ella se dispuso a desayunar, Cori comenzó a contarle de varios platos que eran la tentación de Calvin, era mejor que se hiciera un curso de cocina y aprendiera a prepararlos, no siempre podía contar con su ayuda, ella tenía mil cosas que hacer. Rosy no dijo palabra alguna, pero la mujer no paraba de hablar.Rosy no quería parecer desagradable así que habló sobre el jardín, el nuevo papel tapiz de la cocina
El viento azotaba las ventanas de la vieja habitación, Kimi revisaba las fotos del viejo baúl del abuelo, era hora de confrontar la verdad y la mentira, había deseado con todo su corazón no confirmar verdades, pero al final estas eran inevitables, no le diría nada al abuelo ni a su buena Loly, era su madre y desconocía la razón o motivo para aquella maldad. Su supuesta madre era un ser mezquino y despreciable.Ahora las cosas estaban claras y tenía como hacerle frente.Su tío Dick y Frederick, eran dos chicos buenos, soñadores, con metas y deseos de marcharse de Victoria, su crimen había sido sentir sus corazones conectados, su terrible crimen en aquel momento era no seguir las reglas de sus padres.- ¿Pero ¿cómo aquella tragedia los arrastró a la muerte? -. Visitaría a la señora Haida, era la hermana de Frederick, estaba segura que de algo podía ser útil visitarla. Había encontrado documentos que daban constancia de no ser un mero invento las cosas que estaba armando para llegar a la
El viento atravesaba el jardín en una ráfaga fría. El sol era cubierto por una pequeña nube. Haida reconocía el silbido apacible.Haida conocía aquel silbido sigiloso.-Sus muertes quedaron en el vacío, sin justicia y sin perdón-.Las dos mujeres guardaron silencio durante largos minutos.Kimi no paraba de llorar, Haida dejaba sus lágrimas correr sin detenerlas. El corazón le dolía, por eso la decisión de marcharse era de las más sabias que había tomado.Pero antes quería ver a Fred y Rick lejos de toda maldad, emprendiendo una nueva vida, en un nuevo lugar. Era hora de visitar la tumba de su hermano y despedirse, lo llevaría presente en su corazón y pensamientos, era hora de soltar todo aquello. Hora de soltar el pasado que les ataba y no les permitía avanzar.Kimi limpiaba sus lágrimas, estaba agotada y cansada.-Debo hablar con Clara-.-No te dirá la verdad, ahora la conoces ¿Qué quieres hacer? -.-No lo sé, me siento cansada… ¿Debo decirle a Rick? ¿Fred lo sabe? -.-Fred solo sabe