Rogel
Salgo de su habitación y luego de unos pasos me recuesto a la pared, esta mujer es peligrosa. Mi padre tiene razón, debo alejarme de ella y más, después de lo que paso hoy. Mientras todos corrían, ella ni se movió, era como si supiera que esto pasaría. No tengo dudas de que el ataque fue orquestado por su padre, pero que ganan haciendo esto, es lo que aún no me queda claro. Al final, está poniéndola a ella en peligro también, no que la ama perdidamente.
Cierro los ojos por un momento y esos ojos verdes se fijan en mi mente, esos que para otros pueden parecer vacíos. Mientras que, para mí, en este corto tiempo que los he visto de cerca he podido leer diferentes sentimientos. Dolor, vacío, vergüenza y ahora creo haber percibido… ¿Deseo? O será que reflejé en ellos lo mismo que yo sentí hace un momento, porque no voy a negarlo, esa forma en que mordió su labio casi me enloqueció. La deseo, como nunca he querido a otra mujer, por Dios, esta lujuria tiene que parar. Si no lo hago, me expondré en cualquier momento solo porque la ambiciono en mis brazos.
Escondo mi rostro entre mis manos, debo parar o me volveré loco, Sahar que me has hecho. Nada más llevamos unas semanas de conocernos y ya me has hechizado. Respiro con fuerza y comienzo a alejarme de mi tortura, ahora mismo mis pies quieren regresar y mis labios ansían decirle quien soy. Mas, no puedo, bien puede ser el enemigo y no me dejaré asesinar por escuchar mi corazón. Cuando llego a la otra casa ya los chicos habían limpiado todo.
—¿Cómo estaba Sahar?
—No se enteró de nada, estaba leyendo muy tranquila en su cama.
—Quizás como las armas fueron silenciadas con supresores, ella no escucho nada en el segundo piso.
—Eso Fernan… o quizás simplemente sabía que vendrían a atacarnos.
—Rogel, no creerás que está actuando junto con su padre.
—Opino que Rogel puede tener razón en eso Fernando. Una persona que ha estado en guerra por tantos años conoce bien los disparos sean como sean.
—Exacto, no pienso que sea tan inocente.
—Chicos, quien pierde su tiempo en una guerra con un supresor, cuando solo quiere masacrar y no el pasar desapercibido.
Donal y yo lo miramos, tiene un punto en eso, pero… debía mantener mi guardia en alto con ella. Mi instinto me decía que no era tan inocente como antes supuse, algo me está escondiendo. Por ahora no queda otra que mantener la vigilancia, en algún punto tiene que resbalar, como hoy con ese comentario de más.
Pasado unos días estoy en el área observando el perímetro, hasta ahora no ha sucedido nada raro. Siento que alguien se me acerca por detrás, no voy a virarme, si es un enemigo implantado en mi propia casa, es mejor servir de carnada ahora. Aunque debe estar bien loco para entrar aquí y creer que saldrá ileso.
—Señor.
Me viro porque sé quién me habla y sin equivocarme compruebo, que era la que atendía casi personalmente a Sahar.
—Sucede algo Ciril.
Veo que baja la cabeza y busca en su uniforme.
—Esto… encontré esta nota en el cuarto de la señora Sahar. Está algo corrida la tinta porque se humedeció. Hace unos días fui avisar como siempre del almuerzo, pero sentí a la señora gritar. Corrí adentro a ver qué pasaba, ella estaba dormida, pero al parecer tenía una pesadilla. Gritaba: << ¡No, Ali, no vayas! >> Mientras lloraba en pura agonía. Moviendo sus manos tumbo la jarra de agua de la mesita de noche. Al recogerla encontré esa nota estrujada en el piso, algo mojada por el agua derramada. Cuando leí su contenido decidí guardarla y entregársela después.
—Ya veo, gracias por tu fiel servicio.
—De nada, es mi deber con la familia Batiosta.
Luego de haberme entregado el papel se marchó y me dedique a leer. Esa nota lo decía todo, ella sabía del ataque, pues su padre le mando a decir. La rabia me cegaba, con el papel aun en mi mano entre a la casa de vigilancia. Donal venía en mi dirección, sin más le puse la nota en el pecho y seguí. El único lugar que podía desahogarme era el saco de boxeo, mejor con él que ir a donde realmente deseaba.
No sé cuánto tiempo estuve golpeando, sentía algo de cansancio, pero mi rabia seguía casi igual. Los chicos estaban sentados mirándome, sabían que cuando me ponía así era mejor dejarme.
—¿Esto es debido a que ya perdió la cabeza por ella?
—No lo sé. Lo que sí está claro es que es algo más que la traición con el padre de ella. Algo que no nos dice, quizás tu mamá lo ayude, es la única capaz de calmarlo cuando se pone así.
Saben que los oigo y es cierto que Eli tiene ese poder sobre mí, pero hoy, no creo que pueda. Solo pienso en quién diablos es Ali, ni siquiera me importa que se haya confabulado con su padre. Aun así, el que llore por otro hombre me llena de rabia y nada más recordarlo mi corazón se aprieta. Que mi diosa haya tenido un amor me está matando, me he vuelto un posesivo y por primera vez entiendo a mi padre. Si solo he empezado a quererla de esta forma en unos días, que será perder la mujer que amas de años juntos. Nada más el suponer a Sahar lejos de mí, siento que mi mundo se empieza a reducir. “¿Mi Dios que está pasando conmigo? ¿Cuántas veces deberé preguntarme lo mismo?”
Me detengo y abrazo el saco poniendo mi cabeza contra este apretando mis labios. Necesito saber quién es ese hombre, que paso entre ellos. Miro a los chicos y camino hacia ellos.
—Necesito que averigüen todo sobre un tal Ali que estuvo relacionado con Sahar en su tierra natal.
—Como haremos eso, si ni siquiera logramos obtener datos de ella.
—¡No lo sé ni me importa, búsquenlo!
Sin decir nada más me marcho, sé que he hecho algo que jamás paso antes. “Nunca he perdido el control con los chicos, esto está mal Rogel Batiosta, recupera tu cabeza”. Entro a mi habitación y directo a la ducha, necesito refrescar.
El agua fría golpea mi cabeza y siento que se disipa un poco mi mente, pero cuando lo hace, unos ojos verdes me miran. Recuerdo cómo se siente abrazarla, como muerde sus labios y m*****a sea, ahora para terminar tendré que hacer trabajo manual. Qué maravilla de vida de casado, tengo una mujer que por mis propios límites no puedo tocar, imbécil.
SaharEstas pesadillas han pasado de castaño oscuro, ya no solo son en las noches, sino que también a cualquier hora que cierre mis ojos. Pero esa no es la peor parte, sino que ahora ya no es solo una pesadilla, además he comenzado a tener otro sueño también recurrente. Es que ya no solo lloro por Ali, además de eso para rematar, me levanto sudando y llena de deseos por Ro. Sí, tengo un sueño húmedo con él y siempre me despierto en la mejor parte.Paso frustrada mi mano por mi rostro, mis pensamientos tampoco ayudan en lo más mínimo. Dios, dame un respiro, mi conciencia y deseo van a matarme si se siguen aliando en mi contra. Es una lucha entre ojos negros y marrones que me devoran. Jalan de mi alma sin contemplación, poniendo mis sentimientos en todas direcciones y mis ideas tan enredadas y alocadas que no logro pensar con claridad.Al menos algo bueno pasará en mi vida para traerme calma, ya hoy me quito el yeso, estoy feliz de volver a recuperar movilidad e independencia. Ahora si
SaharNo obstante, no abandono el mantener mi cuerpo listo para la acción y por eso he comenzado mis ejercicios. Uno de los regalos de mi esposo invisible, fue un teléfono nuevo con todo, así que puedo escuchar música mientras práctico, es mucho más fácil cuando me aíslo del mundo. Por ahora corro alrededor de la casa a primera hora de la mañana, luego de un buen calentamiento, ya que no quiero lastimar mi pierna de nuevo. Hago mis adiestramientos de rutina, los que practicábamos en el batallón. Debo reconocer que estos son bastante fuertes, por lo que debo coger calma con el inicio si quiero llegar a mi cama caminando. A veces siento nostalgia de todos los que abandone mientras entreno, pero que puedo hacer, este es mi nuevo campo de batalla. Por ahora buscaré recuperar la fuerza de mi pierna y luego comenzaré la búsqueda de mi familia.No sé cómo la estarán pasando mi madre y hermana, pero puedo suponer el modo en que las tienen. Mi tío siempre ha sido un holgazán que cree, como la
RogelDespués de unos días de estar alejado de ella, me he sentido inquieto, pero mejor. Incluso me disculpé con los chicos por haberles gritado, ellos dijeron que entendían y que harían lo posible por encontrar todo sobre el tal Ali. Hasta ahora no ha habido resultado, es difícil debido a que hay muchos Alis en Seobi.En fin, la llevé a que le quitaran el yeso y no me separe de su lado. Usé cada momento que pude para sentir su piel, su olor y su calor sin que se diera cuenta, la rozaba cada vez que podía. Ya lo sé, soy un ser extraño, primero la quiero lejos y ahora no quiero despegarme. Ni yo me entiendo, sin embargo, es así como me siento.Luego de que podía caminar libremente, su existencia comenzó a cobrar vida, no paraba por nada, era una máquina. De todas las mujeres en mi vida muy pocas me han impresionado y esta chica me tiene fuera de todo. Cuando no estaba ejercitándose, buscaba trabajo, por cierto, no me opuse a que fuera independiente. Eso sí, le busqué un trabajo donde p
SaharSupongo que debo agradecer al cansancio que tengo en estos días, que no me ha permitido volver a soñar. Estoy solo durmiendo unas cinco horas para empezar mi entrenamiento a las seis de la mañana e ir a trabajar. Luego regreso y me pongo en las clases, termino a las once de la noche con estas y entonces me hago la que duermo para luego escaparme.Estoy feliz de que al menos he logrado encontrar la guarida de mi tío, luego de vigilar por algunas noches la casa de mi padre. ¿Cómo encontré el hogar del señor Xaham? Dije que encontraría quienes eran sus espías y lo hice. Uno cayó en mi trampa siguiéndome la primera noche, lo atrapé y está encerrado en un lugar especial del cual no podrá salir… jamás. Existe una regla que impera en todas las guerras y esta es que matas o te matan, son las circunstancias quienes te obligan a tirar del gatillo, pero igual lo haces. Mas, ahora estamos fuera de esta y aunque no soy una asesina, este hombre si lo fue y por él mi cordura se marchó lejos du
RogelLa prueba definitiva ha llegado, Sahar Jayas era la prometida del tal Ali. Al parecer ese apellido es el de su madre y al llegar aquí se lo cambió para ser reconocida como hija. Además, para poder casarse en mi familia como solicitó su padre a través del acuerdo. Aunque mi progenitor dijo que era una rama de olivo, en realidad también fue un acuerdo comercial entre familias. Era dejarle algunos espacios sin nuestra competencia y a cambio ellos nos darían paz en el mercado internacional por un tiempo. No me gusta, pero es mi padre quien lleva los negocios de la familia.Pensando en lo que acabamos de descubrir, no voy a mentir, creo que iba a quebrar mis manos en el saco de boxeo, odiaba a ese hombre que ni existía. Ese que jamás he conocido ni conoceré, ese que es un héroe de guerra, ese por el que ella llora y pide, el que tiene su amor. ¿Cómo luchas contra un muerto? Estoy perdido en mis sentimientos, por más que quiero encerrarlos se están saliendo de control.Deje el gimnasio
RogelJusto cuando pienso en devorar sus labios suena un disparo, lo cual hace que ambos miremos hacia afuera. De repente suenan más disparos y la pongo detrás de mí sacando mi arma.—No te muevas de aquí.—Dame un arma.—No, claro que no.Veo que pone sus ojos en blanco, en otro momento y condiciones le daría una buena azotaina, por eso.—Vienen por mí, no por ti y, además, no pienso matar a los únicos que me pueden ayudar.La miro confundido, ¿cómo que vienen por ella? Pero no tengo tiempo de reflexionar cuando los disparos se hacen más intensos, han traído armas pesadas. Debemos apagar las luces, sin embargo, en cuanto lo analizo la sala se vuelve oscura y soy arrastrado a una pared. La miro y ella me hace señas de que hay cuatro, dos por el frente y dos por el costado, donde hay un gran ventanal. Las sombras me confirman lo que dice y sé que solo puedo acabarlos, pero entonces ella correría peligro. Sin embargo, vuelve a hacerme señales advirtiendo que se hará cargo de los de la en
SaharCuando veo cómo sostiene esa carpeta y me mira, lo sé. Me han estado investigando. Pero… ¿Qué tanto sabe? Es imposible que conozcan mi verdadera identidad, entonces, solo puede ser la parte que más duele, Ali. Cierro mis ojos, esto va a lastimar, aún no me siento preparada para hablar y menos al pensar en todo lo que ha pasado con Ro. Me siento sucia, porque incluso la adrenalina del momento me hizo provocarlo y no debí. Aspiré con fuerza para preparar mi mente, pues no hay de otra. Debo arrancarme la curita de una vez para saber cuánto conocen. Tengo que asegurarlos como mis aliados. Ro me ha dejado claro hoy, que él y mi esposo son cercanos. Aunque no creo que, al límite de permitirle tocar a su esposa, porque también me ha dejado claro que me desea. Mis sentimientos de deseo al menos son correspondidos. “¡Sahar! ¡Ubícate!” Donal quiere curiosear sobre tu identidad militar, así que démosle algo que acabe con esa curiosidad, pero antes necesito saber qué tanto saben sobre Ali. P
RogelVeo las malas caras frente a mí y me muerdo el labio porque sé que he sido todo un desgraciado y mis amigos no tardan en explotar. Me viene una buena, porque cuando ambos tienes algo que reclamarme y créanme que son pocas las veces, estallan en dúo.—¿Rogel Batiosta que está mal con tu cabeza? ¿Eso que le dijiste era necesario? No has visto como esa chica ha sufrido al tener que contarnos su historia.—Lo sé, no fue intencional, solo… solo se me escapo.—¿En serio vas a ponerte celoso de un tipo muerto? De ser así, ¿ella puede ponerse celosa de tus antiguas mujeres?—D, sé que suena mal, ¿okey? Sin embargo, no puedo esconderlo, nunca he sentido por otra mujer, lo que Sahar provoca en mí.—Si es así, hermano, por qué no contarle la verdad. Al parecer ella piensa decirte todo sobre las intenciones de su padre mañana. Que tal aprovechar esa oportunidad para crear un puente de confianza total y contarle quién eres en realidad.—Quizás lo haga Fer, pero antes debo saber que va a deci