Sahar

Estoy agotada en los brazos de Ro, mi cabeza está llena de sueños, pensando en cuan maravilloso es este hombre. Es fuerte y sensible a la vez, es un ser capaz de hacerte sentir única. Me encanta como ama a nuestro hijo desde ya, como tiene pensamientos tan lindos. Y me da algo de tristeza también, pues todo lo que le quiere dar a nuestro bebé son cosas que faltaron en su niñez. No es difícil suponerlo, su madre no lo vio crecer y su padre se negó a quererlo, es claro que todo eso le falto. Pero, yo prometo darte esa oportunidad amor, voy a hacer que cubras todos esos vacíos con nuestro pequeño, con todo lo que te brindaré. No será perfecto, nada en este mundo lo es, pero haré lo posible porque se acerque bastante a lo que significa esa palabra. Juro cuidar y proteger todo lo que creemos juntos, esos recuerdos que guardaré bien en mi memoria para un día, en el que estemos así mismos con más años a cuesta, recordar con placer todo y reírnos.

—¿Sahar?

—¡Um!

—Puedes contarme que pas