—¿Cómo le la manada turca no contesta? —Liam detuvo su revisión de documentos mirando a Liana sorprendido.—No es que no contesten, es que no nos quieren dejar hablar con Murat porque lo tienen confinado, al parecer creen que, si hay un ataque a su manada, primero irán contra la familia del alfa —Liana suspiro—, apuesto a lo que quieras que Murat debe estar encerrado en contra de su voluntad.Liam miró a Bael.—Si estuviera en peligro usaría el brazalete —Bael miraba su celular—, después de lo que pasó a Natsuki, todos confirmaron que tenían sus brazaletes bien puestos.—No podemos ir —Estefan negó con la cabeza—, me muero por traer a Joon aquí, pero está en un refugio seguro lejos de todo junto a mi hijo. Nadie dejará el palacio. No después… no nos arriesgaremos.Liam asintió.—Gabriela dice que están haciendo un banquete en honor a nuestros abuelos —explicó Liana revisando su celular—, eso suena muy bonito.—Cuando terminemos aquí… —Liam no terminó de hablar porque la puerta de su d
Belial miró por la ventana como el sol se ponía y la oscuridad invadía el Reino. El camino al palacio se alumbró con antiguas farolas. Habitación por habitación era alumbrada excepto la suya. Siempre le gustó mucho la oscuridad, incluso cuando era un ángel.Sabía que nadie más vendría, sus hermanos y Timothee se habían despedido de él antes de ir al banquete. Cuando este terminara y todos fueran acostarse, los demonios despertarían.Belial sopló a la ventana de vidrió enfrente suyo, el frío había invadido el palacio tanto que podía ver su aliento como vapor.Ellos estaban aquí.El demonio se dio la vuelta y se encontró con dos ojos rojos que alumbraron la oscuridad. Después una gran bola de fuego en medio de su habitación lo alumbró todo.Belial miró la cara alumbrada de Alan, pero no era Alan quien estaba dominando ese cuerpo. Era Agares.El fuego desapareció y la luz eléctrica sustituyó su brillo.—El maldito Belial —Agares dio un paso al frente con los brazos sujetos detrás de su c
No era ni seguro ni rápido realizar un entierro protocolar para los reyes ni el antiguo escuadrón. Es algo que a Oliver más le pesaba, su padre merecía todo un desfile y recitales en su honor, que su pueblo se arrodillara por última vez ante él y que sea recordado por su grandeza.Lo único que pudieron hacer fue una caminata con los cajones hacia el cementerio. Donde serían enterrados en el mausoleo de la familia real. Iban a hacer varias paradas. Ya que cada miembro del escuadrón pertenecía a una diferente familia y cada familia tenía su propio mausoleo.A diferencia de los entierros humanos y otros hombres lobos, en especial de los entierros de la realeza, los hombres lobos del Reino se transformaban y arrastraba las carreta donde llevaban el cajón de su Rey, como su última oportunidad de serviles. La carreta de su abuelo, por ejemplo, había sido arrastrado por los diez alfas de las manadas más importantes del mundo. Oliver era muy pequeño entonces, pero se acordaba de todas las gr
—¿Entonces no podemos regresar al Reino de modo incógnito? —preguntó Zagan.—No, al menos que quieras que te masacren inmediatamente —respondió Mammón—, no creo que estén muy contentos con ustedes después del pequeño regadero que dejaron.Zepar lanzó una roca tan lejos que está chocó con un cartel abandonado derrumbándolo.—No fue nada difícil acabar con ellos, creí que íbamos a luchar con un Rey, pero eran un grupo de ancianos inútiles —Zepar se volteo a mirar al nuevo cuerpo del hechicero le encontró a Mammón—, ¿Por qué mandarnos con seres tan insignificantes?—Porque pueden ser insignificantes para ti —siseó Mammón observando a su alrededor—, pero no los eran para ellos, era una manera de mostrarnos. De que supieran las consecuencias de enfrentarnos y para que su mente este nublada por la ira, ahora su objetivo no será solo protegerse, ellos buscarán venganza y serán más imprudentes por eso. —Esa artimaña nos costó Belial —Zagan camino despacio mirando el horizonte—, ¿Por qué no c
Ella abrió la puerta con lentitud. Como predijo Jose estaba doblando su ropa con cuidado, poniéndola sobre una maleta mediana. A él nunca le gustó mucho tener sirvientes que hicieran todo por ellos. Jose fue criado de forma humana y después vivió mucho tiempo en su mundo. Así que a veces aún luchaba con la forma en que vivía la realeza.—Amor…—No —Jose cerró su maleta con fuerza—, estoy muy enojado contigo ahora mismo.—No quiero que nos despidamos enojados.Jose bufo y se dio la vuelta para mirarla. En el pasado Gabriela solía ponerse a la defensiva incluso cuando ella estaba equivocada y la discusión era causada por sus tonterías, pero en ese momento no quería discutir, quería mirar a Jose una eternidad, quería recordar porque hacía lo que hacía.A pesar de que eran de edades muy diferentes, a Gabriela siempre le parecía que Jose era muy guapo. Comprendía ahora porque la mitad de sus tías habían caído enamoradas de él. No solo era atractivo, era arrebatadoramente adorable. Con una
—Papá, Haniel dice que vamos a irnos de la isla porque van a venir demonios gigantes que los mataran a todos y nos quedaremos huérfanos ¿Es cierto?Dantalian aparece de repente ante ellos cuando Bael entraba junto a su madre, que venía limpiándose las lágrimas después de despedirse de Alan y sus otros hijos.—¡Haniel! —chillo Lucy.—¿Acaso dije mentiras? —Haniel asomo su cabeza desde la sala—, ¡No quieran mentirnos solo porque somos niños!—Si, es cierto, los que se quedaran van a defender el Reino —Lucy intentaba no levantar la voz—, pero eso no significa que van a morir, tu padre es demasiado testarudo y terco para morir. Lamentablemente, todos tus hermanos y tú salieron igual de insensatos que él.Bael no sabía si sentirse ofendido por eso o no. Cargo a Dantalian a la sala y le dio un buen golpe en la cabeza a Haniel aunque después su madre le diera una buena reprimenda por abusar de su hermanito menor mientras Haniel le sacaba la lengua por detrás.Le dio otro golpe en la cabeza a
Gabriela aterrizó en el mirador desde donde podía ver gran parte de la ciudad, el ruido de los gritos y llamadas llegaban hasta ella. Siempre era un alboroto cuando se trataba de evacuaciones. Muchos se negaban a dejar su hogar diciendo que nunca la batalla llegaba a sus casas.Ella sonrió con diversión, los ciudadanos del Reino tenían una fe muy profunda en la familia real. Uno creería que con tantos ataques y con unos cuantos demonios andando por ahí, con el poder para desbastar todo y asesinar a cualquiera que se te cruzase. La gente se iría y abandonarían un lugar tan peligroso. Pero no, aquí estaba toda esa gente molesta de que lo encerraran por días por su seguridad. Llenando la bandeja de su tío Jaime de quejas por los días laborales perdidos.Intentaron explicarle a la población que los mismos asesinos del antiguo Rey, vendría aquí y podrían atacarlos. Sin embargo, ellos parecían creer que la familia real se encargaría de ellos en un dos por tres.—Por la diosa, de verdad que
—Aún están a tiempo de irse —dijo Estefan apareciendo de repente—, los puedo llevar en cinco segundos donde sus mamis.Taylor puso los ojos en blanco, estaban a punto de ser atacados y ella con su grupo de amigos estaban a punto de meterse en una guerra terrible. Donde enfrentarían las mayores fuerzas sobrenaturales que han podido existir.Entonces tenía que llegar Estefan con su bocaza.—¿No deberías estar en otro lado? —preguntó Taylor con mala cara.—Me pidieron que revisara las trampas —dijo Estefan con las manos en los bolsillos.—Ya las revisé varias veces —asintió Raimi sujetando fuertemente su espada nervioso porque el suelo seguía temblando por momentos—, todo está en orden, las activaremos cuando el enemigo llegué a tierra.—¿Cuándo será eso? —preguntó Steve que estaba relajadamente sentado sobre una roca, pareciendo muy aburrido—, porque hace más de una hora que están intentando cruzar la cúpula invisible y parece que nunca lo lograron.—Las fortificamos demasiado al parece