¿Cómo creen que Juli despierte? ¿Recordará lo que pasó con Brad?
JULIETTE MONTGOMERY Pude ver a Camilo y a Samantha. Es impresionante cuánto ha crecido su vientre y lo demacrada que se ve. Intenté decirle que se veía radiante como siempre, pero ella sólo negó con su cabeza. -Es irónico como funciona la vida, ¿No lo crees Juli? Un día tienes muchos planes que cumplir y al otro solo deseas vivir algunas semanas más para poder traer una vida al mundo- Sus palabras me suenan a despedida -Te vas a poner bien. Cuando la bebé nazca podrás hacer un tratamiento...- Niega acariciando su vientre -Quiero que Sally nazca y poder verla crecer, pero se que no podré hacerlo. Camilo no acepta que voy a morir, ¿Crees que él esté bien cuando yo me haya ido?- Se me rompe el corazón al escucharla decir eso porque parece una despedida -Eres su vida. Tienes que ser fuerte, ellos van a necesitarte- Pido intentando no llorar, pero eso es algo muy difícil porque se que ellos están destinados a estar juntos y de verdad se aman. Temo por Camilo si Samantha falle
BRAD ULIBARRI Nuevamente estamos tomando Montgomery y yo, pero es para celebrar que la supuesta demanda está más que desestimada. No sé si logre hacer que ella renuncie, pero la beso y no me aparta, aunque me desconcentra porque mantiene los ojos abiertos y una expresión de susto que es capaz de quitarle el ánimo a cualquiera. -¿No sabes cerrar los ojos? Pareces una estatua- Me río sin poderlo evitar -No entiendo por qué lo haces. No voy a tener sexo contigo por un beso, ¿Es esa tu intención por haberte interrumpido o tal vez comiences a sufrir demencia?- Me sirvo otra copa y relleno la suya -¿Te pedí que te acuestes conmigo?- Puedo haber bebido pero se que jamás le dije que tengamos sexo -¿Que buscas entonces?- Deja la copa y se cruza de brazos- Me acuesto, me besas y me despierto contigo en mí cama. No pasa ni un día y nuevamente estás en mi habitación besándome -Divertirme, pero contigo eso es imposible- Voy a su cama, me acuesto y enciendo el televisor -¿Por qué n
BRAD ULIBARRI Tigre me responde y me pregunta si estaba aburrido cuando le escribí. Ella me dice que estaba durmiendo después de un día largo. No hemos podido jugar demasiado y todo se lo atribuyo a Montgomery. Si no me hubiese acompañado todo sería más simple, pero con ella aquí y con el drama de mí familia se que solo puedo hablar con ella. Además intento avanzar para que ella renuncie, pero no lo hace. Sinceramente ya no se que hacer y comienzo a perder la esperanza de que se vaya por su propia cuenta. -Quiero verte Tigre- Soy directo. No creo que se asuste por eso luego de haber intercambiado muchísimos correos -También me gustaría conocerte. ¿Cómo sabría quién eres?- Jamás le di una descripción mía y es momento de hacerlo -Soy alto, musculoso, tengo el cabello castaño a la altura de los hombros- Si quiere más descripciones tendrá que verme y si con eso no es suficiente desnudarme -¿Recuerdas como soy yo? -Cabello largo, negro, lacio, delgada. ¿De que manera podrí
BRAD ULIBARRI Es lunes y llego a la oficina furioso con la gran sospecha de que Montgomery, esa rubia endemoniada, envió a su amigo a proponerme algo indecente. La veo de pie tomando su café mientras escucha música en su teléfono y ríe. No puedo creer que este escuchando una de las canciones que bailó en el club dejando a todos babear por ella, incluido mí socio que no ha dejado de pedirme su número de teléfono. -Montgomery a mí oficina ya- Me mira y me sigue aún con su teléfono en la mano -¿Se le ofrece algo?- Pregunta bebiendo su café -Fuiste tu y no te atrevas a negarlo- Deja el café sobre su escritorio luciendo imperturbable -¿De que me acusa? Llegué hace diez minutos y aún no estoy en horario laboral- Mira su reloj- Faltan exactamente cuatro minutos para que comience mi jornada Respiro agitado. No me explico cómo es capaz de hacerse la desentendida de tal manera que cualquier persona podría creerle. -Enviaste a tu amigo para seducirme, ¿En qué pensabas?- Se
JULIETTE MONTGOMERY Mauricio es mí confidente y también mí cómplice. Mentí dando una descripción que no me pertenece, pero yo no pensaba aceptar un encuentro con Dragón Rojo. En un inicio fue divertido cada ataque, cada correo y dejarlo fantasear con conocerme, pero después... me dejé enredar en su juego, en el que despertó mí curiosidad por conocerlo. Su descripción, parecida a la del demonio me hizo pensar si debía conocerlo o no, pero ¿Que probabilidad existía de que él y mí jefe fueran la misma persona? Llegó el día de vernos y luego de consultarlo con Mauricio y convencerlo de ponerme una peluca natural que corresponde a la descripción que le di a Dragón Rojo, fue que estuve lista para conocerlo. Fue la primera vez que enseñé con orgullo el lugar donde antes había una horrible cicatriz. Jamás pensé que podría ser reconocida por él cuando llegue al club. Al ver a alguien en la barra con su pelo suelto que se ajustaba a su descripción quise irme, pero él me detuvo. No
BRAD ULIBARRI Nuevamente me encuentro con Tigre y es cuando siento que puedo avanzar para descubrir si esta noche tendrá el fin que tanto anhelo. Para ninguno de los socios es difícil reconocer a un nuevo miembro cuando lo vemos llegar porque miran todo con tanto detenimiento y asombro que no saben disimular y así mismo es Tigre. Aquí en el club existe todo tipo de prácticas. Hay parejas que asisten con la fascinación de mirar como su compañero intima con alguien más. Aquí lo que el club nos ofrece es la posibilidad de ser nosotros mismos y vivir las experiencias que necesitamos o queremos tener. También hay personas que no tienen los recursos económicos para tener un cuarto de este tipo en su propia casa y por eso pagan una membresía para asistir aquí. Luego de explicarle a Tigre las reglas es que la beso. Al comprobar que no me rechaza se que puedo seguir adelante, pero sin abrumarla. Para un nuevo practicante es esencial confiar en quien los iniciará, pero en su caso me e
JULIETTE MONTGOMERY No sé si haber tenido relaciones ha sido lo correcto. Me gustó, aunque estaba demasiado nerviosa y aunque él supo que hacer se que no fue la experiencia que esperaba. No voy a mentirme a mi misma y a creer que fue lo mejor que viví en mi vida porque en un inicio me dolió como el infierno. Esperaba que todo fluyera de otra manera y no sentir dolor, al menos que fuera menor. Tal vez mis nervios me jugaron en contra o quizás al haber estado con un hombre grande físicamente implicaba que todo en él fuera de ese tamaño y para una virgen era mucho que soportar. Lo mejor que se me ocurrió fue enviarle un mensaje a Mauri para que viniera a recogerme cuando fui al baño. Al salir me vestí tan rápido como pude y me fui sin mirar atrás. Saber que Dragón Rojo no estaba complacido con lo ocurrido solo hizo que sintiera más vergüenza y no fui capaz de afrontarlo. Mauri guarda silencio mientras conduce, pero se que apenas lleguemos a mi apartamento me hará más pregunt
BRAD ULIBARRI Con la salud de mí cuñada en un momento delicado, mí familia está atravesando una de las situaciones más difíciles. Estamos todos muy unidos atentos a lo que ocurra y acompañando a mi hermano y a su mujer de la mejor manera que podemos hacerlo. Se que Montgomery entiende que debemos viajar y que está atenta a cualquier eventualidad que pueda surgir. Ella sigue sin agradarme, pero aún así le agradezco por desempeñar una labor excelente. Montgomery tuvo una excelente idea para acelerar la producción en la fábrica y así poder entregar pedidos rápidamente en nuestra ausencia. El tiempo corre y tenemos dos semanas para dejar todo en orden antes del nacimiento de mí sobrina. Los médicos creen que en dos semanas mí cuñada puede ser sometida a una cesárea para que Sally nazca y ella comenzar un tratamiento inmediato. Esperar más tiempo sería disminuir su probabilidad de vida considerablemente. Mi gran apoyo es Montgomery y estamos trabajando demasiado para dejar to