Cael

Junto a mis siete guerreros, habíamos salido durante la noche de la manada, a mi beta y gama sólo les dije que teníamos que ir a la ciudad para encargarnos de un pedido del rey, obviamente no oculté mi disgusto. Ellos no preguntaron mucho, solo accedieron como siempre, cuando llegamos a la ciudad habíamos cambiado de vehículo a uno diferente, a un vehiculo que apestaba a humano, iba con el anillo y como si fuera poco mis guerreros aún sabiendo a lo que iban, estaban esposados, usaríamos como último recurso la sedación para así poder entrar bien, según los contactos que pudo sacar el rey, que no me quizo decir de dónde, pudo conseguir una dirección donde poder presentarme con mis luchadores, iba a entrar como un agente libre que capturaba lobos al azar para las peleas y me estaba haciendo pasar por un mal humano que solo buscaba dinero y que carecía de escrupulos.

Nos hospedamos en un hotel de mala muerte, en una habitación tenía todos mis guerreros y en otra estaba yo, la idea er