Cael No lo podía creer, finalmente tenía frente a mí a Morgan, lamentablemente unas rejas me impedían acercarme, además se sentía diferente, estaba bella, hermosa, pero había algo, había cambiado. Kratos igual no le gustaba mucho la sensación, era como si la hubiera buscado, como el aire que necesitaba respirar pero ahora que la teníamos enfrente había algo diferente en ella, además de su impertinencia cuando escuché que hablaba con la hembra y pude sentir como desplegó su aroma de luna, me sentí reconfortado ella estaba creciendo cada vez más en su papel y eso era muy bueno para todos, pero toda esa alegría y esa emocion se fue a la mierda cuando apareció ese malnacido humano y dijo que ella le pertenecia ¿quien se creía que era para tocarla, ponerle las manos encima? apenas lo vi supe que él fue con quien había estado compitiendo con el tiempo de ella, apenas pudiera salir de estos barrotes destrozaría ese maldito humano por poner los ojos en donde no lo merecía.WilliamTodo era e
CaelCuando el bastardo que estaba frente a Morgan disparo al cazador en la pierna todo fue un caos, aún estábamos prisioneros en nuestras celdas, no podíamos hacer mucho, salvo tratar de alcanzar a los cazadores por entre los barrotes, yo no tuve la suerte pero unos de mis guerreros sí, el pasillo se llenó de lobos algunos en pelos y otros en puro piel, entre todos tratamos de desgarrar, atacar a los cazadores recibimos algunos disparos, pero nada de seriedad. Mi mente siempre estaba pendiente de Morgan, ella no hizo caso y se quedó parada tratando de proteger entre los barrotes a la hembra y sus cachorros, era un blanco fácil ahi parada, cuando el primer dardo le se le metió en la pierna realmente me asusté, pude ver el dolor pero aún asi se mantuvo firme y no se separó, yo rugía de impotencia, de rabia por no poder salir y más que nada, ir a ella y protegerla. Pero ella solo lo que hacia era desobedecerme una y otra vez, ya le pondría las manos encima por haberme hecho pasar todos
Rey RemoDesde que fui niño fui preparado para ser rey, mi padre estaba entre dos mundos, el mundo antiguo donde solamente importaban los alfas y el amor por mi madre, la cual era una simple mestiza, en esos tiempos los mestizos y los omegas eran esclavos por lo tanto mi padre ocultó el rango de mi madre, a pesar que fue dificil ellos lo hicieron funcionar. Mi padre fue estricto y a veces no demostraba amor hacia sus hijos pero nos inculcó a trabajar duro para lograr nuestras metas. En el proceso sufrimos mucho y casi pierdo uno de mis hermanos, Leandro el cual, a diferencia de Cael siempre fue mucho más tranquilo, más parecido a madre. Al asumir el cargo como rey de los lobos, sabía que el peso iba a ser inmenso, pero estaba convencido de que mi compañera iba a ayudar a soportar todo. Cometí errores en el camino y casi la pierdo, afortunadamente me perdonó y ahora tengo dos hermosas hijas.Según las tradiciones de los lobos, ninguna hembra puede asumir un cargo tan alto, siempre tien
Cael Habíamos llegado finalmente a la manada Sunrise, a Morgan la tenían en el hospital, estaba siendo tratada por los dardos que resultaron ser dos y el disparo en el estómago, si bien estaba asustado, mi intención era ir a verla, saber que tan mal estaba para que apenas se recuperará y estabilizara un poco para llevarmela. Lamentablemente la hembra y los cachorros no se quedarían en mi manada, sino que se irían a la manada Fierse, del alfa Jéremy Petrov, al cual tuve el desagrado de ver, no evitó mirarme con desconfianza y gruñirme como era clásico en él, creo que nunca aceptó que le quitara un par de sus amantes, pero en fin así somos los alfas, competitivos hasta lo más mínimo. Vería si estaba con alguna hembra y me la follaría, solo para irritarlo. Continué mi camino hacia el hacia el hospital, muchos de la manada Sunrise me miraban con desprecio, otros me miraban con curiosidad, habían cosas que habían cambiado por aqui que no me gustaron, como por ejemplo muchos de mis guerrer
Cael Sabía que sería arriesgado, pero de todas formas trate de llegar al hospital y sacar a Morgan de allí. Lo que no me esperaba eran a las putas brujas esperandome. -buenas noches Cael-dijo una de las brujas iba vestida solo con una camisa y dejaba muy poco a la imaginación, llevaba un sombrero de un pescado disecado. -tanto tiempo sin vernos-dijo la otra, esta afortunadamente llevaba un vestido negro, iba descalza y se habia hecho muchas trenzas, que daban la impresion de serpientes. -señoras-respondí, nunca me gustaron las brujas, siempre me ponían nervioso. -dejalo Cael, regresa a tu manada o no saldras sano de aquí-dijo la que llevaba el pescado de sombrero. -no veo por que no pueda caminar-respondí, siempre tuve la duda si estas brujas leían pensamientos. -¿porque has llegado tan lejos? tan mal, cuando eras cachorro siempre fuiste justo, pero algo paso y has decidido emprender un camino que te llevara a la destrucción. Dejalo y vete Cael-dijo la bruja de trenzas. -¿que s
MorganHan pasado dies dias desde mi rescate en las celdas, habían sido uno dias complicados, mi recuperación fue lenta porque el estar mi vinculo dañado hacia que mi recuperación fuera mas lenta de lo normal. Pero ya podía salir una vez más, hoy era el primer día que podía salir a dar una vuelta y alejarme de la casa de los guerreros, de los cuales estaría eternamente agradecida.Para evitar cualquier tipo de inconveniente con la manada Darkness y sus vigías, salí por la noche, iba caminando hacia mi casa acompañada del rey y Roger cuando muchos de los miembros de mi manada empezaron a salir de sus casas y se acercaban a mí, para saludarme, felicitarme de no se que o solo tocarme, estaban más que agradecidos por haber sobrevivido, todos sintieron mi pena cuando William murió, ellos sintieron toda la pena que yo sentí, habían cosas nuevas que tenía que hacer como luna, trabajo atrasado, que debía realizar ya no podía quedarme a lamentar lo que pudo llegar a ser, sabía que mi manada me
Morgan Estaba sentada en el patio de mi casa, pensando cómo organizar mejor mi manada y cómo poder lidiar con los cazadores en el pueblo, según nuestros informes y los de los guerreros élite de la manada real, casi la mitad del pueblo tenía vínculos con los cazadores. Siempre hay una sospecha de que algo asi pasaba, pero nunca pudimos saber muy bien qué era. Luego de tantas escaramusas, ataques y haberles secuestrado los dos camiones, descubrimos que más de la mitad del pueblo estaba metido o sabía lo que ocurría, la otra mitad solamente agachaba la cabeza y hacía vista gorda cuánto todo pasaba. Estaba tan sumida en mis pensamientos que no sentí cuando el alfa Jeremy se sentó a mi lado.-¿tienes un minuto?-pregunto con su característico tono de voz grueso, mandón y su mirada de estar muy molesto, era algo característico en casi todos las alfas, por lo que no me preocupe.-por supuesto, ¿dime en qué te puedo ayudar alfa Jeremy?-respondí amablemente.-solo Jeremy para ti Morgan, mira s
CaelHabían pasado no cuantos días desde que la vi por última vez, cuando desperté, me dijeron de que no solamente había perdido mis primeros 13 guerreros, sino que otros más se negaron a rechazar a sus compañeras y se marcharon, unas familias incluidas. Prácticamente me volví loco, golpee a quien se me cruzo, rompí todo lo que se me puso en el camino, muchos en mi manada se ocultaban por temor. Y ahí fue donde me di cuenta lo he equivocado que estaba, por mis malas decisiones y por mi actitud, había perdido muchos guerreros, si bien no me bajaba el número de guerreros, la cantidad era importante, cada uno de ellos al marcharse dejaba un sentimiento de desazón, muchos en mi manada no me veían como antes, si no me estaban evitando, me veían como un líder débil, peligroso e inestable.-he estado pensando en tu idea Fred, de aceptar lobos rouges, me parece bien, pero ningún alfa, cualquier beta, gama, hasta delta puede ingresar, de los rechazados tenemos que ver aún, vas a correr la voz