Capítulo 422
—Si lo hacemos a plena luz del día y las cámaras de seguridad nos cachan, nos meteremos en problemas.

Renato asintió repetidamente, reconociendo que Fausto tenía razón.

Si las cámaras en la calle grababan a su grupo golpeando a Juan, la policía podría arrestarlos y alguno podría entonces ya delatarlos.

Pero si esperaban a llevarlo a un lugar apartado y sin cámaras, sería mucho más seguro para ellos hacer lo que iban a hacer.

Renato envió un emoticono de pulgar hacia arriba a Fausto y luego le elogió: —No esperaba que fueras tan profesional.

Fausto, encantado con el comentario, pensó que su cliente estaba ya muy satisfecho con su trabajo.

Grabó un video de los siete u ocho hombres en la furgoneta, todos armados con bates de béisbol: —No te preocupes, Renato, mi reputación y respeto en el barrio son excelentes.

Renato, viendo a los matones con aspecto de pocos amigos y armados, se sintió aún más complacido: —Bien, después de golpearlo, envíame entonces un video y te daré un poco más de
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo