Lilith, que antes fue Zoe, decidió aceptar su nueva realidad sin medidas de tiempo, sin humanidad, al lado de su angelical esposo; Lucifer. Se sentía más llena y libre que nunca, se sentía en su verdadero hogar… Aunque de vez en cuando le llegaban a su mente esos pequeños recuerdos de su infancia, donde sus padres sonrientes, amables y cariñosos le brindaban todo su amor, esos momentos en donde solo recuerda lo positivo de la humanidad. Sin embargo, no estaba arrepentida de su decisión de vivir por siempre en el infierno con Lucifer, solo le gusta sonreír con recuerdos del pasado de una parte de su pasado que, a pesar de todo, vive en ella para siempre. Enfocando la mayor parte de su eternidad en su hermosa hija; Lifer.Lifer nació siendo una preciosa niña de cabellos dorados como su padre; Lucifer, ojos rojos brillosos y la mirada imponente de Lilith; su madre.Toda una hermosa princesa del infierno, la futura encargada de continuar con el legado de su padre, sin embargo… Ella solo t
TIERRA: Minnesota, Junio 2060.Me encuentro maravillada por lo perfecto del paisaje, descubrí un rio hermoso escondido entre muchos árboles y soledad. Creo que los humanos lo llaman bosque. No entiendo porque este lugar esta tan solo si es hermoso.El agua fría toca mis pies descalzos y me siento en una piedra enorme a orillas del rio, observando los rápidos peces que nadan contra la corriente, tocan mis dedos de los pies y luego huyen con cada movimiento. Es como si tuviesen miedo de mí pero aun así no pueden alejarse demasiado. Justo así es mi atracción con la tierra.—Los entiendo, pececitos… Yo también tengo miedo e interés en lo desconocido— les digo a los peces.— ¿Qué hace una jovencita tan sola en este lugar tan alejado? — pregunta una voz masculina desde el fondo de los árboles. Yo me pongo en alerta, tomo un palo y apunto en dirección a donde suena la voz.Desde el fondo sale un hombre con sus manos levantadas al aire.—Tranquila, no quiero hacerte daño— con una sonrisa.Su
‘’Todos hemos sido inocentes en algún momento de nuestra vida, sin embargo a veces la inocencia puede ser un problema cuando se desconoce sobre el verdadero peligro. ’’INFIERNO: sin tiempo.No puedo evitar dejar de pensar en Miguel, es alguien muy guapo y además muy inteligente. Conoce mucho sobre los humanos y ese instante en el que nos miramos fijamente pensé que me besaría, y ahí comenzaría nuestra eterna historia de amor…Obviamente las cosas no son así de fáciles, vivimos en mundos distintos, él es un ángel y yo; yo soy la hija de Lucifer, un demonio que además tiene el deber de seguir el legado de mi padre.Sin embargo eso parece no importarle, no sabe quién soy específicamente, solo sabe que soy del infierno y aun así no me trata diferente. Eso significa que es el indicado.Como es costumbre, siempre espero que mis padres estén distraídos con sus cosas infernales para escabullirme y viajar a la tierra, a ese maravilloso lago donde me encuentro con el Ángel Miguel.Solemos nada
Nueva york, Diciembre 2080.Saco de mi pequeño estuche un lente de contacto de color azul, uso mi dedo índice con cuidado y previamente lavado. No quiero una infección en el ojo izquierdo. Acomodo mi cabello para verme lo más presentable posible y tacho en el calendario la fecha de hoy: 12 de Diciembre.Lastimosamente debo hacer esto antes de salir de mi habitación, no puedo andar por el mundo demostrando mi extraña heterocromía; lo cual ha hecho que uno de mis ojos sea azul y el otro de un extraño color rojo oscuro. Es este ojo izquierdo de color rojo el que debo cubrir con un lente de contacto de color azul y así pueda parecer normal al menos en ese sentido.Es mi cumpleaños número dieciocho y estoy algo ansiosa, tener dieciocho no solo significa ser adulta oficialmente, si no que debo empezar a tomar decisiones que harán un cambio radical en mi vida. Mis amados padres; Cristina y Dustin han sido mis mejores aliados y amigos.A pesar de mis negativas sobre hacerme una ‘’fiesta’’,
DIECIOCHO AÑOS ANTES. En alguna parte de New york.El tiempo pasó, mi vientre era cada vez más grande, me mantuve oculta en la casa de aquel señor que actuaba bajo mis órdenes, me buscaba alimento, ropa y todo lo que yo necesitase.Pase todas las noches vigilando por la ventada de mi habitación esperando no ser encontrada por Miguel y sus imbéciles compañeros. No puedo creer todavía que fui traicionada de la forma más cruel por un ángel ¿No se supone que ellos eran los buenos según los humanos? Yo lo amaba y pensaba que tenía un lugar en el cielo al estar con él.No me permitía llorar por ese imbécil, debo cuidar de este pequeño bebe que crece dentro de mí. Una noche fría y con fuertes lluvias di a luz, un Doce de Diciembre… Mi pequeña bebe, es niña.Su llanto me hizo llorar, me había convertido en madre en una habitación oscura y solitaria, sin la compañía de mis padres, y me lo merezco por ser una completa estúpida.Me quede admirándola por varias horas, viéndola tomar mi dedo índic
Nueva York, Diciembre, 2080.—Skarriel, ven a mí, Skarriel— una voz dulce y lejana llama mi nombre, intento seguirla, pero todo esta borroso. Estoy caminando por un callejón que parece no tener salida.—Skarriel— continúa esa voz femenina y dulce. Me siento algo desesperada, en serio intento encontrarla, pero no puedo ver nada.Suena la alarma, me levanto empapada en sudor a pesar del frio que hace, ¿Qué clase de sueño o pesadilla fue esa? No logro reconocer esa voz, no sonaba como mi madre Cristina, la voz es de una mujer que claramente necesita ayuda, sin embargo no pude ver nada… Realmente no sé porque le doy tantas vueltas a este asunto, solo fue una pesadilla.Siento mi mano algo adolorida, al abrirla me percato que tengo sujetado con fuerza ese collar, me dormí y de manera inconsciente apreté tan fuerte la piedra que tiene como adorno que termine lastimando la palma de mi mano al punto de llegar a romperme un poco.—No puedo creerlo— murmuré, dejando a un lado ese collar y levan
Luego de recuperar mí aliento me pongo de pie. La sombra que pensé que había derrotado en el baño estaba de pie detrás de mí.—No vas a escapar de mi tan fácil, Skarriel— su voz macabra penetraba mis oídos, giré rápidamente para no darle la oportunidad de atacarme por la espalda.— ¿Cómo sabes mi nombre? — pregunte, colocándome en posición de pelea, presionando mis puños tan fuerte como puedo.—Eres la más buscada en el cielo… Yo cobraré esa recompensa por encontrarte.— ¿Recompensa? — confundida.—Muchos se rindieron con el pasar de los años, pero yo sé perfectamente que los demonios son muy inteligentes y no dejaría que encontráramos tan fácil a una hija de ellos— explico mientras se acercaba a mí.— ¿De qué mierda estás hablando? — pregunté, alejándome un paso a la vez— ¿Cómo que una hija de ellos?— ¿Ah, no lo sabes? — Pregunto mientras dejaba ver una sonrisa blanca en su rostro completamente negro— eres la hija de un demonio y un ángel. Logra empujarme contra la pared y tomarme
Infierno: sin tiempo, la habitación roja.Me mantengo en mi jaula, intentando mantener mi odio dentro de mi cuerpo, y no en mi mente. Siento que si dejo que el odio me domine por completo terminaré destruyendo esta jaula y causando yo misma una guerra infernal contra el cielo.Mi madre Lilith se asegura de pasar al menos una vez cada cierto tiempo, intenté medir el tiempo como se mide en la tierra, no quiero perder la cuenta, solo así podré saber cuánto tiempo lleva mi hija lejos de mí.—Hija mía… Confiésame ¿Qué te paso? — me pregunta, mientras se arrodilla ante mí.—Mama, levántate, no hagas esto— ordene.—No quiero verte ahí encerrada, eres mi pequeña bebé— suplica entre lágrimas.—Solo estoy pagando mis errores— musite.— ¿Qué fue lo que hiciste? ¿Qué tan malo debe ser que te obligues a estar ahí dentro? — insiste.—Madre, déjame sola por favor. No quiero hablar de ello.Mi madre se marchaba, siempre regresaba a suplicar que le confesara que había hecho. Por más que quiera, no ten