POV: Mary.
Me levanto temprano, no solo porque tengo cosas que hacer, sino, porque ya no aguanto más estar en la cama. Lo hago y salgo de la habitación, con mucho cuidado de no hacer ruido, Aiden y Maddie deben estar durmiendo.
Preparo café y con una taza inmensa llena de este preciado líquido, me dirijo hacia la terraza, para pensar mientras admiro el bello paisaje.
Al salir, siento la frialdad y el rocío de la madrugada. Todavía no amanece del todo, pero ya no está oscuro, por lo que camino sin problemas hasta llegar a la cerca que limita con el fin del acantilado. Con la taza entre mis manos, apoyo mis codos en la barandilla. Miro el mar, aún oscuro, reflejo del cielo.
No quiero pensar en nada. Ya estoy cansada de hacerlo, una y otra vez. Pongo mi mente en blanco, intento solo mover mis pensamientos a la par de las olas, a la par del sonido maravilloso de la naturaleza a mi alrededor. Cierro los o
POV: Leo.Mary y Lianny no están aquí.La decepción que me llena al no encontrarlas es grande.Le pregunto a mi madre y ella me dice que Mary fue en busca de Lianny, a casa de mi prima, pero que Maddie llamó porque se iban a quedar con ella. Yo sé que no debo pensar que todo gira a mi alrededor, pero estoy bastante seguro de que su decisión está influenciada por mi presencia. Y no la culpo. Ella no debe querer ni mirarme a la cara.Subo a mi habitación un poco frustrado. No es que solo quiera verla a ella, contarle la decisión que tomé y pedirle mantenernos unidos en esta nueva realidad. También quiero ver a mi hija, pasar tiempo con ella para recuperar lo que no pude vivir a su lado, decirle que soy su padre de una vez, aunque estoy claro de que eso debe esperar un poco.Me meto bajo la ducha para calmar mi ansiedad, el agua tan fría que me hiela los huesos, pero e
POV: Mary.Llegar y que él sea lo primero que veo, es bastante frustrante. Supongo que no hay nadie ahí arriba que entienda mis miedos y los mantenga alejados de mí. O tal vez, sí los entiende y pretende, que sí o sí, los enfrente.Debo confesar que mientras Lianny me contaba todo lo que hizo, yo solo me imaginaba a Leo jugando con ella. Y pensaba que me hubiera gustado verlo. También sentí su mirada todo el rato y no pude evitar devolvérsela cada vez que mi niña lo mencionaba.Pasar por su lado, pudo considerarse tortura, si tengo en cuenta que mis manos picaron con las ganas de tocarlo, de abrazarlo y agradecerle por darnos una oportunidad a mi hija y a mí. Pero eso se hubiera visto demasiado raro o habría descubierto todos mis deseos por él. Esos que aún, no quiero dejar salir.Ahora estamos en la terraza, vemos cómo Aiden y Aarón está
POV: Leo.Pasan tres días. Tres increíbles días.Nunca supe lo que era la felicidad hasta que escuché a mi pequeña decirme "papá". Es un sentimiento recién estrenado, casi impuesto de un día para otro, pero estoy completamente feliz de que así haya sido. No es sólo que Lianny sea el fruto del amor que Mary y yo nos tuvimos hace años, es que desde que la conocí, la conexión fue instantánea.Una niña hermosa, juguetona, alegre y de buenos sentimientos, que me recibió un día y sin conocernos, hizo más felices mis mañanas. Incluso, teniendo en cuenta que culpaba a su madre de todo lo que sufrí, pude ver en ella lo que amé y añoré de aquella mujer. Tener la dicha de disfrutar su presencia en mi vida, se siente como un verdadero milagro.Lo mismo siento cuando miro a Mary. Justo cómo lo estoy hac
POV: Mary.Me miro al espejo por última vez. Mi porte regio se acentúa con el traje formal que llevo puesto, compuesto por una falda de tubo negra y chaqueta a juego. En mis pies, unos Christian Louboutin, último regalo de mi madre antes de morir. Por más que mi relación con ella haya dejado mucho que desear, hoy quiero hacerle justicia. A ella. A mí. Y a todo el que se haya visto involucrado en esta vida de mierda.Antes de salir, pinto mis labios de rojo intenso. Estoy segura que a este juicio asistirá la crema y nata de la sociedad de Santa Marta y un poquito más allá. Algunos entenderán mi posición, la mayoría detestará mis actos, pero me importa un bledo lo que puedan pensar. Solo me interesa que cuando me vean, no les quede dudas de que soy una luchadora, una guerrera, una mujer empoderada y completamente lista para comerse el mundo.Recojo el pequeño bolso qu
POV: Leo.Ser testigo en primera plana de tanta mentira solapada, es exasperante. Pero ser testigo también, de una defensa maravillosa, capaz de desmentir, mostrando pruebas y hechos, es mucho más satisfactorio.El enfrentamiento entre mi hermana, en representación de Mary y, de Christian Anderson, por parte de Estefan Brown, es titánico. Ambos desarrollan excelentes defensas y en varios momentos logran desacreditar, a través de indirectas sutiles y emblemáticas, las intervenciones del otro.Desde el inicio, cuando Andie hace su declaración de apertura, queda demostrado su nivel, al saber llevar al jurado y a la audiencia, todos los hechos acaecidos, donde Mary jugó un papel determinante, puesto que su padre la utilizó como un objeto al ofrecerla como parte de un trato. Todo esto fue rebatido por Anderson, quien dio lectura a la contestación hecha por el demandado e intentó solicitar en
POV: Mary.Todo sucedió tan rápido que aún no soy consciente de mi nueva realidad.Al escuchar el veredicto, solo podía pensar en mi niña, en su felicidad, su tranquilidad, mientras un temblor diferente recorría mi cuerpo. Abrazar a Andrea fue como la prueba de que no estaba soñando, sí había luchado para ganar mi libertad y al final de la batalla, lo había conseguido. Habíamos ganado una, ahora faltaba otra, pero ya se iban dando pasos para terminar al fin esta guerra.Encontrarme con la mirada de Leo, con esos maravillosos ojos verdes que ya me esperaban, me hizo reflexionar en serio sobre lo que estaba sucediendo.«Soy libre».Verlo sonreír, asentir y venir a mi encuentro, como mi caballero de brillante armadura, me hizo sonreír. Un beso, largo e intenso, prometedor de muchas cosas, dio su puntazo final. Salimos de ese salón tomados de l
Mary:A estas alturas no creo que pueda decir que fui una buena madre; unos meses de redención no cuentan, pero sí debo confesarte que, en lo más profundo de mi ser, obtuve el perdón que necesitaba; antes de irme para siempre, antes de dejarte sola con mi nieta en ese mundo horrible al que tuve la culpa de traerte.De mi vida antes de tu padre, poco conoces, pero quiero que sepas que fue buena, increíble e, incluso, puedo decir que me bastó para aguantar tantos años de humillación y silencio. Precisamente porque sentí en mi piel tanta libertad, un día hace muchísimo tiempo, es que sentí la responsabilidad de entregarte a ti la posibilidad de vivirla. No como yo, que me rendí, no luché y pagué las consecuencias.Tu fortaleza la demostraste desde que llegaste al mundo, guerrera, aunque las probabilidades de que vivieras desde un i
POV: Leo.El viaje de regreso a Santa Marta, se me hace largo.Luego de una semana lejos de mis amores, la ansiedad y los nervios me llenan. Mary comprende los motivos de mi viaje, así me lo hizo saber y es lo que me gustaría creer, pero hasta que no volvamos a vernos, no estaré tranquilo. Todavía nuestra relación no está bien asentada y no quiero comenzar algo con el pie izquierdo. También deseo ver a mi pequeña, esta nueva clasificación de padre en mi vida, llegó para cambiar todo lo que hasta el momento creía era importante, pero nada se compara a lo que siento en mi pecho cuando pienso en Lianny. Mi felicidad ahora, solo está con ella. Y por supuesto, con su madre.El viaje era algo que había pospuesto por mucho tiempo. Primero, por la necesidad de hablarle a Mary sobre nuestro vigente matrimonio y luego, por todo lo que vino después. Pero ya era hora de cerrar