Sus labios temblaron de manera nerviosa cuando él la tomó de la cintura y la pegó a la pared. La mano de Dante se deslizó suavemente por la cintura de Kaylee mientras se deleitaba de la perfecta imagen que le estaba regalando su pequeña sumisa. La luna era la única fuente de luz en aquella habitación.
Dante soltó una pequeña sonrisa coqueta al escucharla gemir, ella posó la mano sobre el pecho de Dante y respiró con dificultad mientras él deslizaba su mano dentro de sus bragas. Podía sentir como sus piernas temblaban a causa del placer.
—Oh nena, mírate…—susurró mientras la acariciaba y sentía la completa humedad. — estás tan mojada… tan lista para ser follada. ¿Es lo que quieres?—preguntó mientras estimulaba su clítoris. Kaylee se mordió los labios y comenzó a menear su cad
Las luces de la casa se apagaron por completo cuando ella salió del auto. La habían visto y probablemente estaban intentando esconderse de ella. La hermosa chica de cabello oscuro se acomodó la chaqueta de cuero y soltó un suspiro antes de caminar con seguridad y elegancia por el jardín. Sus altas zapatillas rojas se clavaron levemente en el césped de la casa pero a ella no le importó. Siguió caminando con elegancia hasta su destino.La puerta principal de sus “Padres”, los ancianos que la habían hecho vivir como estúpida por tantos años.Tocó la puerta con fuerza y esperó por unos momentos para luego maldecir y meter la llave en la cerradura de la puerta.Los ancianos se sorprendieron al verla, ella frunció el ceño y maldijo levemente mientras negaba.— ¿Quién es esta niña?—preguntó
Kaylee volteó con rapidez mientras su corazón latía con fuerza y sus terminaciones nerviosas explotaban por completo a causa de los nervios. Su corazón se relajó por completo al ver al padre de Wendy con una amplia sonrisa. Kaylee sonrió ampliamente y corrió hacia los brazos del hombre. Este la abrazó con cuidado y susurró unas cuantas cosas en su oído mientras Kaylee asentía y sollozaba.El hombre se alejó del cuerpo de Kaylee y la miró fijamente para luego reír y asentir rápidamente.—Si haz cambiado demasiado— dijo para luego reír. — pero para mí sigues siendo la misma niña que venía hace años. Sigues siendo mi pequeña niña. Eres mi hija y no me importa lo que digan tus padres— dijo para luego acariciarle la mejilla y caminar hacia la puerta principal de la casa de Wendy. —
Kaylee intentó alejarse de él cuando se acercó a ella para volver a besarla. Ella sollozó y negó suavemente mientras intentaba mantener la distancia entre ellos. Dante soltó un fuerte suspiro para finalmente jalarla de los brazos y acorralarla en una pequeña esquina de la habitación. Ella respiró con fuerza y lo observó directamente a los ojos mientras susurraba unas cuantas frases inentendibles para él. Esa noche estaba dispuesto a todo con ella y lo haría todo si ella se lo permitía.—Esta noche— susurró él mientras deslizaba sus manos por la fina cintura de Kaylee. — eres mía. — dijo con una voz ronca, completamente cargada de deseo y oscuridad. — hace mucho tiempo que estoy ansioso por poder tocarte, por poder acariciarte y complacerte como lo hacía hace tiempo.—Dante... — susurró ella mientras sent
Los labios de Kaylee se abrieron de golpe soltando un poderoso gemido cuando él finalmente entró dentro de ella. Llenándola de su poderoso y rudo ser. La tomó de las manos y unió suavemente sus manos con las de ella mientras la embestía con fuerza y le besaba el cuello con pasión.La habitación estaba completamente cargada de gemidos y de la deliciosa aroma de la vela de cereza que iluminaba con delicadeza la habitación mientras se fundía sobre la mesa. Kaylee gimoteó al sentir la pequeña mordida de Dante sobre su cuello, su espalda se curvó y buscó con desesperación los carnosos labios de Dante.Él notó su desesperación y tomó los húmedos y temblorosos labios de Kaylee. Él sabía lo que a ella le gustaba y se lo daría. Sabía que ella necesitaba sentirlo, sentir sus besos y sus caricias.Ella
La cabeza de Dante daba vueltas desde la noche anterior. Había herido a Kaylee y lo sabía. Wendy no le respondía los mensajes y él sabía que ella estaría con Wendy. La había pasado súper bien con ella, le había encantado pasar tiempo con ella de nuevo pero sabía que lo había arruinado con sus estúpidos mensajes. Sabía que lo había arruinado y que ella no volvería a buscarle.Sus finanzas estaban por los aires, estaba ganando tanto dinero que nunca había imaginado que podría ganar tanto pero en especial ese día se sentía de la mierda. Sentía que había engañado a dos mujeres a pesar de saber que solo había engañado a una. Se estaba volviendo loco por saber algo de ella. Quería ver a Kaylee y sabía que tenía que hacerlo para poder explicarle todo. Tal vez si él le explicaba que é
Sus pensamientos estaban completamente enredados entre lo que estaba bien y lo que estaba mal. Sabía lo que tenía que hacer pero no quería hacerle caso a lo que se supone que debería de hacer. Dante sería padre de tal vez una niña o un niño hermoso, el problema era que posiblemente ella tendría que dejarlo vivir su vida. Y eso implicaba tener que alejarse para siempre de él.Se sentía como una completa estúpida al haber creído que ambos podrían vivir felices algún día. Lejos de todas las personas que les habían hecho daño, que ambos se apoyarían en cualquier alocada idea que tuvieran y sobre todo tendrían la oportunidad de hacer sus vidas llenas de amor y quien sabe, tal vez algún día se casarían y armarían una hermosa familia juntos.Probablemente su relación había terminado desde el
Kaylee entró con su rostro totalmente serio al restaurante. Todos la miraron con confusión y susurraron unas cuantas cosas. Sus sentimientos estaban completamente destrozados. Sentía que un camión le había pasado encima y había destrozado todo dentro de ella, aunque sabía que la vida tenía que seguir, sentía que ya no podía continuar. Ya habían pasado dos días desde que había visto a Dante, Sabía que probablemente él seguía su vida con normalidad y ella lo único que estaba haciendo era sufrir, tenía que encontrar un modo de poder salir adelante después de él.Sabía que sicontinuaba pensando en él terminaría más triste de lo que ya estaba. No había visto a su novia, no por qué no había tenido oportunidad sino que le daba miedo el hecho de darse cuenta de que tal vez esa muj
Dante se llevó las manos hacia la cabeza por solo un momento. Maldijo en pequeños susurros y le sonrió de mala gana al doctor. Su novia en cambio estaba completamente feliz y mantenía una gran sonrisa en su rostro.Dante observó las paredes del hospital y pensó en una manera de poder escapar de todo eso pero de cierta forma no había manera de escapar. Él solito se había metido en eso y ahora tenía que afrontar todas las consecuencias de sus actos. si algo sabía que había hecho mal era haber conocido a esa mujer, haberla aceptado, haberse acostado con ella, haber aceptado una relación con ella y sobre todo creer queella se estaba cuidando cuando en realidad no era cierto.Había hablado con ella y ella había confesado que había dejado de cuidarse hace meses para poder darle esa sorpresa a Dante. La mujer estaba loca yni siquiera&