Los padres de Kaylee la observaron caminar mientras Dante la sostenía de la mano como lo había hecho hace unos cuantos minutos.
— ¿Qué sucedió?— preguntó la madre de Kaylee. Dante observó a la anciana mientras Kaylee se sentaba y hacia un pequeño gesto de dolor.
—He regresado el estómago— susurró totalmente apenada. — pero me encuentro mejor.
Dante se sentó a su lado y tomó un poco de agua, totalmente relajado y despreocupado como si no hubiera hecho algo que tuviera que esconder. Los empleados de la casa entraron con los platos de comida y los colocaron frente a cada uno. Los platos eran diferentes para cada uno. Kaylee miró a Dante cuando vio la comida.
—Mamá— llam&oa
Los sollozos de la hermosa pelirroja parecía que no terminarían en ningún momento y Dante comenzaba a creer que terminaría abrazándola el resto del día.Las palabras de Nicolás retumbaron en la cabeza de Kaylee y la obligaron a regresar a la realidad. Por años había deseado que Dante la tuviera entre sus brazos de ese modo, había deseado por años poder tener una mínima cercanía con él. Siempre había fantaseado con estúpidas ideas de que él podría quererla y podrían casarse. Por estúpido que fuera, por años había estado enamorado de él y ahora tenía la cercanía que siempre había deseado. Podía tocarlo, hablar con él e incluso tener sexo cuando quisiera. Ya no tenía que observarlo de lejos y apreciar su belleza como
Las altas zapatillas de Kaylee provocaban finos sonidos al pisar el cemento de las calles de la ciudad. Con fuerza y voluntad se había mantenido al margen para evitar llorar en todo el camino hacia casa, se sentía completamente usada y esta vez se sentía muy herida.Por un momento había creído que Dante se estaba convirtiendo al menos en un amigo con el cual podría apoyarse y ella podría apoyarlo. Pero todo había sido una farsa, Dante solo la quería para grabarla y sobornarla con dinero así como Nicolás había dicho. Su cabeza estaba envuelta en pequeñas y grandes dudas que la obligaban a caer en un abismo de locura.No estaba segura de si quería volver a ver a Dante, no estaba segura de querer continuar con el contrato que había firmado hace poco, quería desaparecer p
La madre de Kaylee palideció por completo al ver llegar a su hija cubierta de sangre. Kaylee negó suavemente y se miró el vestido. Cerró los ojos con fuerza al escuchar los gritos de su madre.—La sangre no es mía— anuncio Kaylee con esperanza de poder callar a su madre. — hubo un accidente y un hombre salió herido... solo quise ayudarlo.— ¿Dónde está Dante?— preguntó su madre mientras se cruzaba de brazos y la veía fijamente. Kaylee guardo silencio por un momento y suspiró antes de comenzar a hablar.—Acaba de irse... agradeció que me dejaras pasar un momento más con él. — dijo sin poder delatar al hombre que amaba.— ¿Piensas casarte con él? &mda
Dante soltó una pequeña sonrisa coqueta al escuchar el pequeño gemido que provenía de los labios de Kaylee. Los atrapó una vez más y rodeó sus brazos en el cuerpo de la chica.Kaylee rodeó la cadera de Dante con sus piernas y olvidó por completo que sus padres se encontraban en la misma casa que ellos.Dante le mordió los labios y atrapó con sus manos él definido trasero de la chica.—Vamos a mi habitación— le ordenó. Kaylee se alejó unos centímetros de él y lo observó para finalmente negar suavemente. Él frunció el ceño y alzó una ceja antes de mirarla a los ojos. — entonces vamos a la sociedad, ambos nos divertiremos más.— ¿Qué sucede si mi madre no me encuentra?— preguntó ella.—Tendremos qué d
Kaylee se había mantenido alejada por completo de Dante. Wendy se aseguraba de que ni la mirada de Dante pudiera encontrarla entre toda la multitud.—Necesito un poco de café —susurró Kaylee mientras recogía su gran melena rojiza en una gran cola de caballo.— ¿Está bien si te acompaño?— pregunto Wendy. Kaylee negó suavemente y miró a su mejor amiga.—Estaré bien — le dijo con una amplia sonrisa para finalmente alejarse por completo de ella. Wendy la siguió con la mirada y finalmente alejó su mirada cuando la perdió entre la multitud.Era muy temprano por la mañana y el frío era completamente insoportable. Ambas estaban cansadas y completamente emocionadas a causa del viaje escolar y aunque Kaylee se mantenía callada y fingía que todo estaba bien, Wendy sabía que estaba asustada por haber roto el contrat
— ¿Conseguiste los papeles?— preguntó Kaylee mientras veía a La chica rubia. Wendy asintió y suspiró mientras bajaba las escaleras.— ¡Están en mi maleta! Creo que te encantará ver lo que descubrí.—Gracias — susurró Kaylee.Kaylee bajó del autobús y se abrazó a ella misma. Había sido un viaje largo y cansado. Se moría de hambre y sobre todo quería acostarse en su cama, cubrirse con una sábana y llorar toda la noche.Dante le había dicho cosas horribles en todo el camino y había hecho con ella todo lo que quería.Aún podía sen
El comedor se encontraba lleno de murmullos sobre Kaylee y aunque Wendy y Dante quisieran saber de ella no lograban hacerlo. Los profesores habían organizado una reunión de emergencia para hablar sobre lo sucedido. Dante mantenía su mirada en los profesores mientras con la mirada exigía información.La puerta del comedor se abrió y dejó a la vista una hermosa pelirroja con el cabello agarrado en una coleta. Una blusa sin tirantes y un pantalón negro. La mirada de Dante se clavó en el cabestrillo de Kaylee y suspiró.—Solo queríamos informarles que Kaylee está bien— dijo uno de los profesores para luego invitar a Kaylee a sentarse en un lugar. Wendy se levantó con velocidad de su asiento y corrió hacia su mejor amiga. — ha sufrido una fractura, su hombro se recuperara pronto por lo que no podrá competir en ninguna de las actividades así que s
El día había amanecido perfecto.El aire corría con tranquilidad por los jardines del gran parque. El clima se encontraba en perfecto balance, no hacía frío y no hacía calor. Las blancas nubes abarcaban gran parte del cielo y amenazaban con soltar una agradable lluvia en cualquier momento.Las actividades académicas empezarían dentro de unos minutos y todos parecían estarse divirtiendo, tal como Dante lo había planeado. Solo había un único problema.Una chica pelirroja de baja estatura que mantenía sus ojos de infarto parcialmente cerrados.El dolor aun la molestaba y la había molestado toda la noche.Wendy lucia cansada al igual que Kaylee, ambas se habían quedado toda la noche despiertas. Especialmente Wendy, la chica rubia se había asegurado que su mejor amiga tuviera todo, había cuidado su herida, su medicamen