Los murmullos de los estudiantes se escuchaban por todo el lugar, Kaylee jugaba nerviosamente con sus manos mientras pensaba en lo sucedido. Con su rostro totalmente limpio y con su cabello húmedo que la hacía ver desarreglada decidió levantar la vista.
La mirada de Dante se clavó en los claros ojos de la chica y suspiró antes de desviar la mirada y meter las manos en los bolsillos de su pantalón. Caminó tranquilamente por el escenario de la universidad y le sonrió amablemente al director.
— ¿Dante te estaba viendo?— preguntó la mejor amiga de Kaylee. Ella frunció los labios y negó mientras desviaba los ojos de aquel chico. —Te juro que yo lo vi, mantuvo la mirada durante unos segundos y la desvió cuando volteaste.
—Tal vez… se está preguntando por que luzco de esta manera… tan desalineada. — susurró Kaylee mi
– ¡Ponte tú mejor vestido!— le gritó su madre mientras corría de un lado a otro por toda la casa. Kaylee suspiró y abrió su armario mientras veía la gran cantidad de vestidos que cubrían por completo su cuerpo. Frunció el ceño y observó un vestido de color negro con la pierna un poco abierta.Arriesgándose por completo lo tomó y se dirigió al baño para darse una larga ducha que terminaría por calmar los pocos nervios que sentía. Se desnudó por completo y entró en aquella tina de agua caliente. Tomo un poco de aire y finalmente lo soltó al igual que los nervios que sentía.Los gritos de su madre se podían escuchar por todos los rincones de la casa. Su padre estaba harto y probablemente explotaría en cualquier momento a causa del pánico que le provocaba su mujer.Kaylee estaba completamen
—Señorita, ¿Puede acompañarnos al comedor?— preguntó el padre de Dante.Dante observó a su padre y negó rápidamente.—No es necesario que hables con ella en privado.—Entonces hablare con ella frente a todos. — dijo su padre.Kaylee observó al padre de Dante y tragó saliva nerviosamente mientras se acomodaba su larga cabellera.Dante se levantó de su asiento y caminó directamente a Kaylee. Se paró frente a ella y como todo un caballero le extendió su mano.—Señorita Kaylee, ¿Me permite acompañarla hasta el comedor? — preguntó con suavidad. Kaylee lo miro y sonrió ampliamente antes de asentir y tomar la pálida mano de Dante. Él sostuvo la mano de Kaylee y la llevó hacia el comedor.Dante volteo para asegurarse que nadie pudiera oírlos y suspir
Los padres de Kaylee la observaron caminar mientras Dante la sostenía de la mano como lo había hecho hace unos cuantos minutos.— ¿Qué sucedió?— preguntó la madre de Kaylee. Dante observó a la anciana mientras Kaylee se sentaba y hacia un pequeño gesto de dolor.—He regresado el estómago— susurró totalmente apenada. — pero me encuentro mejor.Dante se sentó a su lado y tomó un poco de agua, totalmente relajado y despreocupado como si no hubiera hecho algo que tuviera que esconder. Los empleados de la casa entraron con los platos de comida y los colocaron frente a cada uno. Los platos eran diferentes para cada uno. Kaylee miró a Dante cuando vio la comida.—Mamá— llam&oa
Los sollozos de la hermosa pelirroja parecía que no terminarían en ningún momento y Dante comenzaba a creer que terminaría abrazándola el resto del día.Las palabras de Nicolás retumbaron en la cabeza de Kaylee y la obligaron a regresar a la realidad. Por años había deseado que Dante la tuviera entre sus brazos de ese modo, había deseado por años poder tener una mínima cercanía con él. Siempre había fantaseado con estúpidas ideas de que él podría quererla y podrían casarse. Por estúpido que fuera, por años había estado enamorado de él y ahora tenía la cercanía que siempre había deseado. Podía tocarlo, hablar con él e incluso tener sexo cuando quisiera. Ya no tenía que observarlo de lejos y apreciar su belleza como
Las altas zapatillas de Kaylee provocaban finos sonidos al pisar el cemento de las calles de la ciudad. Con fuerza y voluntad se había mantenido al margen para evitar llorar en todo el camino hacia casa, se sentía completamente usada y esta vez se sentía muy herida.Por un momento había creído que Dante se estaba convirtiendo al menos en un amigo con el cual podría apoyarse y ella podría apoyarlo. Pero todo había sido una farsa, Dante solo la quería para grabarla y sobornarla con dinero así como Nicolás había dicho. Su cabeza estaba envuelta en pequeñas y grandes dudas que la obligaban a caer en un abismo de locura.No estaba segura de si quería volver a ver a Dante, no estaba segura de querer continuar con el contrato que había firmado hace poco, quería desaparecer p
La madre de Kaylee palideció por completo al ver llegar a su hija cubierta de sangre. Kaylee negó suavemente y se miró el vestido. Cerró los ojos con fuerza al escuchar los gritos de su madre.—La sangre no es mía— anuncio Kaylee con esperanza de poder callar a su madre. — hubo un accidente y un hombre salió herido... solo quise ayudarlo.— ¿Dónde está Dante?— preguntó su madre mientras se cruzaba de brazos y la veía fijamente. Kaylee guardo silencio por un momento y suspiró antes de comenzar a hablar.—Acaba de irse... agradeció que me dejaras pasar un momento más con él. — dijo sin poder delatar al hombre que amaba.— ¿Piensas casarte con él? &mda
Dante soltó una pequeña sonrisa coqueta al escuchar el pequeño gemido que provenía de los labios de Kaylee. Los atrapó una vez más y rodeó sus brazos en el cuerpo de la chica.Kaylee rodeó la cadera de Dante con sus piernas y olvidó por completo que sus padres se encontraban en la misma casa que ellos.Dante le mordió los labios y atrapó con sus manos él definido trasero de la chica.—Vamos a mi habitación— le ordenó. Kaylee se alejó unos centímetros de él y lo observó para finalmente negar suavemente. Él frunció el ceño y alzó una ceja antes de mirarla a los ojos. — entonces vamos a la sociedad, ambos nos divertiremos más.— ¿Qué sucede si mi madre no me encuentra?— preguntó ella.—Tendremos qué d
Kaylee se había mantenido alejada por completo de Dante. Wendy se aseguraba de que ni la mirada de Dante pudiera encontrarla entre toda la multitud.—Necesito un poco de café —susurró Kaylee mientras recogía su gran melena rojiza en una gran cola de caballo.— ¿Está bien si te acompaño?— pregunto Wendy. Kaylee negó suavemente y miró a su mejor amiga.—Estaré bien — le dijo con una amplia sonrisa para finalmente alejarse por completo de ella. Wendy la siguió con la mirada y finalmente alejó su mirada cuando la perdió entre la multitud.Era muy temprano por la mañana y el frío era completamente insoportable. Ambas estaban cansadas y completamente emocionadas a causa del viaje escolar y aunque Kaylee se mantenía callada y fingía que todo estaba bien, Wendy sabía que estaba asustada por haber roto el contrat