Yahira
Después de salir de la clínica y con una súper vergüenza, me subí al carro para luego volver a estar en silencio en el camino de regreso a casa, una vez que llegamos nos sentamos a cenar pues, ya estaba preparada la comida. Estábamos procesando cada una de las palabras que el médico había dicho, también habíamos quedado que luego de nuestra visita a la clínica hablaríamos acerca de las cosas que llevaría el cuarto del bebé entre ellos, la ropa, las cortinas y la decoración además de los muebles.
También me preguntó si yo deseaba hacer algún cambio en el cuarto que se me había asignado que no me preocupara que él correría con los gastos.
Una vez que se terminó nuestra conversación me indicó los medicamentos que el médico había dado y que los tenía que tomar inclusive fue por un vaso de agua a la cocina también me dijo que debía ser muy cuidadosa en cada una de ellas para que el proceso fuese de lo mejor.
[…]
Han pasado algunos días y efectivamente lo que el médico dijo es lo que sucedió, estaba teniendo cambios en mi cuerpo, entre ellos el exceso de la libido tenía demasiada excitación a pesar de que me daba baños de agua fría siempre me sentía muy sensible inclusive mis senos estaban enrojecidos en los pezones nada era sencillo, lo peor era que tenía que aguantarme las ganas de la mejor manera, deseaba poder estar con un hombre en toda la extensión de la palabra aunque la verdad es que nunca había estado con alguno, así que no sabía lo que era eso, pero ya creo que me podía dar un buen resfriado de tantas duchas frías que tomaba.
En algunas ocasiones había leído en libros revistas y había visto por el Internet que en ciertos casos de mujeres que se daban placer por ellas mismas así que decidí hacerlo, pues ya todo lo que me estaba sucediendo estaba excediéndose, así que tome mi tablet y puse uno de los Videos en los que se veía como se podía hacer eso, luego me recosté sobre la cama, me quité la ropa y me arrope con una sábana, Elthon no podía saber qué era lo que yo estaba haciendo, pues él no se encontraba en ese momento cerca del dormitorio.
Seguí cada uno de los pasos que hacían en ese video, la actividad de la pareja era súper intensa, así que yo empecé a sentir como mi clítoris aumentada de tamaño, toque leve mente sobre él y empecé a sentir un escalofrío recorriendo todo mi cuerpo se sentía muy delicioso, además empecé a sudar un poco y justamente cuando empecé escuchar los gemidos de la pareja en el video, yo sentía que los míos iban en aumento, necesitaba más, y fue cuando toque mis senos con una de mis manos apretando mis pezones y en un momento dado un gemido salió de mí mucho más fuerte.
Elthon
Yahira ha sido una de las personas muy aplicadas, ha tomado los medicamentos como dice la receta, inclusive me dado cuenta porque yo he visto cada una de las cajas han sido tomadas en la forma correcta, y aunque me doy cuenta que es humor a veces es un poco agradable otras veces no, hay días en que sólo pasa encerrada y unas cuantas veces sale al jardín, pero no es algo que haga comúnmente, cuando le pregunto cómo está, ella me dice que está bien aunque la noto muy tensa en algunas ocasiones, sé por lo que dijo el médico que hay días en que se pone muy excitada, pero no entiendo cómo puede con eso, asumo que hay días en que a de estar un poco más y días en que está un poco menos, se supone que en estos días lo ovulación va a estar en el punto máximo, serán los días en que debemos estar en la clínica para empezar con el tratamiento.
Fui a hacer un poco de ejercicio, pues desde que decidí tener un bebé por medio de una inseminación, no he tenido encuentros sexuales con mis amigas, así que una de las maneras en las que puedo disipar el deseo es haciendo ejercicio, por lo que tomé mis cosas y subí al gimnasio.
Regrese a mí cuarto un poco más relajado, pues ya había sudado lo suficiente, no sabía si eso era en si lo que iba necesitar todo estos días pero era lo que tenía.
Un gemido interrumpió mi paz, se podía decir y todo mi autocontrol, éste venía del dormitorio de Yahira, cuando sin duda alguna me pudo la curiosidad abrí de poquito la puerta de su dormitorio, está un poco oscuro vi que estaba en la cama, tapada con una sábana, se veía una luz a lo lejos, entré despacio y me enfoqué de donde provenía la luz, era un video donde se veía una pareja teniendo sexo no cualquier sexo era sexo duro.
Ella tenía los ojos cerrados, cuando me enfoqué en su cuerpo me pude dar cuenta que tenía una de sus manos en uno de sus senos y otra en su entrepierna, eso me dejó hipnotizado, estaba con su cadera levantada y tenía muchos fluidos en su mano, no pude más así que inconscientemente llevé mi mano a mi duro pene que estaba como una roca, y sin duda alguna cogí y empecé a sobarlo de arriba a bajo, el líquido pre seminal estaba saliendo sin ningún reparo, así que tape su orificio para que no siguiera saliendo, mas no quería venirme con sólo ver la escena que Yahira me estaba proporcionando.
No sé si me puedo percibir, o si solamente su intuición de abrir los ojos la pudo, pero se dio cuenta de que yo me encontraba mirándola con un deseo incontrolable, que sin duda alguna no iba a parar hasta no tenerla entre mis brazos, todo era perfecto ella acostada con su desnudez me daba la imagen más preciosa que pude haber observado, ella mas sin embargo quería taparse con sus manos sus partes pero yo me negué, y le dije que no lo haga me senté un lado de la cama, la miré directamente a los ojos sin decir una sola palabra acaricia su rostro, luego la bese tiernamente un beso al que correspondió con entusiasmo, nuestras bocas como si se conocieran se estaban dando la bienvenida de nuevo.
Narrador Elthon nunca en su vida se había sentido como lo hacia ahora, solo con una simple mirada inicial a la joven Yahira lo había hecho cambiar sus ideales de un momento a otro, evidentemente, ella no era de las mujeres que el solía frecuentar, pero a kilómetros se notaba lo diferente que era la chica, además de que no era alguien de las que comúnmente quieren besar el suelo que el pisa.Se atrevió a decirle que no sabía que le sucedía, que desde que la conoció no salía de su mente, y si la tenía cerca no podía quitarle los ojos de encima, realmente le gustaba mucho, inclusive la llego a comparar con un ángel por su inocencia.Yahira había quedado en estado de shock por las palabras de Elthon, evidentemente nunca se espero que un hombre como él siquiera la mire a ver, o le dedique unas cuantas palabras con referencia a ella. Por eso lo primero que se le ocurrió decirle a él, es que no era de las personas adecuadas a su estatus, pero era más que claro que lo que él estaba sintiendo
Mi nombre es Yahira Castro, soy de Colombia específicamente de Cali, mido 1.65 no soy tan alta, pero de las chaparras tampoco, de parte de mi mamá tengo descendencia extranjera, pues mis ojos azules dicen mucho, aunque claro tengo el swing latino como muchos dicen.Tengo 25 años de edad, en dos meses más cumpliré los 26 años, y pues quisiera poder llevar a cabo muchas de las metas que me había propuesto desde que tenía 15, pero por cosas de la vida no he podido, entre ellas están ser profesional en Marketing. Además, que me gustaría encontrar un mejor trabajo para ayudar económicamente a mis padres.Ahora mismo debemos salir de la mala racha en la que nos encontramos, hace un tiempo a mi papá le diagnosticaron cáncer, y pues los tratamientos no son nada económicos, además que ya él no puede ser el sustento de la familia, ya hora a mi mamá y a mi nos toca trabajar, en el caso de ella limpia casas y condominios, yo soy mesera en uno de los bares más concurridos de acá.Una de mis amigas
Me llamo Elthon Smith. Soy el segundo hijo del matrimonio Smith, y como tal me toca hacerme cargo de los negocios y empresas de mi padre, pues este ha tenido quebrantos en su salud, aunque ahora se encuentra de maravilla, pues anda paseando junto a mamá por américa latina. Ellos son de las personas que creen en el amor a primera vista, se conocieron de casualidad, se enamoraron y al poco tiempo ya venia yo en camino, algo rápido a mi parecer, pero se han mantenido con su bonita relación en pie, siempre apoyándose. Yo soy de los que realmente no cree en esas cursilerías, no voy a decir que no me gustan las mujeres, pues eso sería mentir, pues me encantan, y desde hace ya un tiempo, estoy con la idea en la cabeza de ser padre, pero no soy de los que piensa que para ser un buen padre se necesita estar en una relación, o casarse, por eso me he dado el trabajo de buscar una clínica de fertilidad, para poder cumplir mi objetivo. Claro como es de esperarse, cuando estuve sirviendo en las fu
La cifra que me dieron a conocer los abogados del señor Smith, (como se que es el apellido de la persona que me esta contratando para ser la madre de su hijo), es más que suficiente para lo que mi papá necesita en estos momentos. Una de las cosas que debo hacer es irme a vivir a la casa del señor contratante, esa fue una clausula especifica de él, pues desea estar involucrado en el proceso desde el inicio hasta su culminación o sea el parto, asumo que la esposa de él también está de acuerdo en eso, aunque a mi no me parece nada bonito que una pareja de extraños vea a mi niña. Me dieron la mitad del dinero acordado, lo restante me lo darían cuando dé a luz, algo que me parece correcto, pues de un trabajo se trata es la forma adecuada de llevar las cosas, por otra parte, tendría que estar en dos días en una reunión con él, para que nos den las indicaciones juntos, en la clínica, con el medico a cargo del caso. Lo bueno de todo es que nada de lo que tenga que ver con gastos médicos o d
Al llegar a la mansion Smith, mi boca casi se cae de lo abierta que me quedo, era prácticamente un lugar inmenso, algunos empleados se podían observar a lo lejos, se veía que el dueño de la casa era una persona perfeccionista, pues todo se veía en orden, pero el detalle aquí es que yo no conocía aun al señor con el que me tenia que dirigir pronto a la clínica para empezar con el procedimiento, Ian me había dicho maravillas de él “jefe”, pero realmente no sabía que mismo pensar, sino que me debía abstener de comentarios hasta no verlo y hablar con él. Cuando estábamos en la puerta de la mansión, nos saludaron dos personas muy amables, eran los padres de Ian, ellos eran los encargados de la casa, Ian me los presento muy gentilmente, ellos eran personas que se veían a simple vista muy amables y sobre todo amigables, yo necesitaría muchas personas de amigas, pues estaba en un proceso de temor aun por lo que acababa de decidir hacer. Me dieron la bienvenida, me dijeron que contara con ell
Elthon Me avisaron por medio de un mensaje que la señorita Castro ya se encontraba en casa, según el mensaje de Ian, era todo un monumento de mujer, que no parecía la edad que tenía, que sin duda alguna mi hijo o hija sería muy hermoso al combinar los genes, además me dijo que habla con facilidad el inglés, algo que realmente me viene bien, aunque en casa de mis padres es obligatorio hacerlo, en mi casa no. Llegue sin previo aviso, cuando lo primero que observe fue el jardín de la casa, quería hablar con mi nana que se encontraba regando las plantas, deseaba preguntarle sobre la señorita Castro, que le había parecido, cuando de pronto escucho a mis espaldas, que alguien habla en español, pero lo que me causó gracia fue lo que dijo “uy papasito, está como lo recomendó el doctor”, de inmediato me di la vuelta, ella me miro asustada, como si me hubiera reconocido o no sé, pero termino de ponerse roja cuando le conteste igual en perfecto español “gracias por lo de papasito, espero ser bu