Annethe sabía que aquella drástica invitación por parte de Bastian, era una trampa de ellos, querían hacerle la vida imposible, pero lo que no sabían era que tenía a los hermanos Ferrer en sus manos, hace tiempo pudieron con ella, después de todo, ella perdió su virginidad con Martín, fueron novios por una temporada pero al final del día terminó por aburrirse de él, la causa de su rompimiento era simple, se enteró de uno de sus mayores secretos, la engañó, le fue infiel, y le rompió el corazón, así que si ellos decían algo, su familia y todos terminarían por enterarse de ese enorme secreto.
Cuando los vio en la mansión y observó a Crys, lo supo, ella sabía toda la verdad, no era idiota, pero si no decía nada, ella tampoco
—¡Estás loca! —Chuck me grita mientras pasa una mano sobre su cabello.—Es... La única opción —intento acercarme a él con las fuerzas que me quedan, ya que debido a la droga y a la bebida, sentía mi mundo moverse a cada instante.—Una cosa es un beso, pero otra muy distinta lo que esos dos enfermos quieren que hagamos —Chuck a pesar de estar drogado, todavía se sostenía en pie, aunque los ojos los tenía vidriosos, y rojos, lo que me hizo cuestionarme si yo me vería igual— ¿qué no te das cuenta?, lo que quieren que hagamos es para que terminen por separarse tú y Bastian, no Crys, me niego a hacerlo.—Lo sé, así como también s&eacu
Siempre me porté como debía, siempre fui fiel en todas mis relaciones, yo amo solo a Bastian, yo... Siempre... Siempre... Siempre... Siempre le fallado a la gente que amo, y ahora estaba a punto de hacer algo que cambiaría para siempre mi relación con Bastian y con Chuck, pero tenía que hacer algo para detener a Annethe, tenía que... Salvarlo, aunque el precio fuera que me odiara por toda la vida.— ¡Olvídalo! —Chuck estaba como loco.—Tienes que hacerlo —le digo suplicante y dirigiéndome a la cama, mi cabeza explotaba, tenía tantas cosas en mente.— ¡No, es no!—Pues no pensabas lo mismo cuando accediste a masturbarme &mdash
Chuck no podía creer lo que estaba sucediendo, les habían pedido tomar y ¿después qué? No estaba seguro de poder comportarse a la altura, si tomaba, Crys corría peligro, ya que era capaz de hacerle el amor, la deseaba, desde que la vio con aquel vestido en la noche de la reunión, quería estar dentro de ella, quería...Aparta todos esos pensamientos de su cabeza, ahora estaban metidos en un enorme problema, Crys palideció cuando escuchó eso, se sentó en la cama, y a los pocos segundos comenzó a sentirse mal.— ¿Estás bien, Crys? —Chuck se acerca hasta ella.—No me siento bien...—Te daré agua.
Bastian estaba preocupado todo el tiempo por Crys, a pesar de estar rodeado de sus amigos, en el antro de su mejor amigo Erick, no podía evitar estar pensando en ella, estaba con Chuck, pero eso no le quitaba ninguna preocupación de encima, cuando Crys se fue, recordó que Annethe se le había acercado.—Extrañarás mucho a Crys, ¿cierto? —le pregunto ella con cara de desvelo y de cruda.Bastian no contestó, por el contrario, se dio la media vuelta y siguió su camino, pero Annethe era lista y se le acercó aún más.—Sé que prometí alejarme de ti, pero, ¿no podemos ser amigos dos días más?.Bastian se par
No podía creer lo que estaba pasando, ¿había escuchado bien?, cuando Martín me dijo eso, la sangre se me congeló, y el habla se me fue, ¿cómo era posible eso?Me había dejado convencer por él de que hablar en otro lugar era lo mejor, para no despertar a Chuck, cosa que hice, tomé la decisión y ahora estaba ahí, caminando detrás de él, no sabía exactamente a donde nos dirigimos, pero no cuestioné nada hasta llegar al fondo del asunto. Hasta que de pronto llegamos a una enorme puerta.— ¿En dónde estamos? —pregunto con cautela.—En mi habitación.Martín abre la enorme puerta y me q
Ver frente a mí a aquella chica que ha asesinado a personas, no solo ajenas, que incluso tuvo el atrevimiento de asesinar a su propia hermana, que intentó matar a Reachel, y a mis amigos, mi familia, incluso a mí, me hizo temblar y por un momento un miedo horrible recorrió cada una de mis venas.Annethe me veía fijamente, no estaba asustada, por el contrario, parecía emocionada y una sonrisa apareció en sus labios, la misma que hizo que me hizo tragar saliva.—No andaré con rodeos, sé muy bien que ya te has dado cuenta quién soy, y por qué hago todo lo posible por quitarte de mi camino —me dice cerrando la puerta con llave y colocándola en uno de sus bolsillos.— ¿Qué es
Ya habían pasado unas horas desde que nos encerraron a Chuck, y a mí, pero lo más irónico era que Martín fuera un prisionero en su propia casa, cuando Annethe me dijo lo de Chuck, no pude evitar ir al baño y vomitar, no por el hecho de su confesión, porque sabía que mentía con eso, él no podía estar enamorado de mí, de hecho, lo que me sacó de mis casillas y me provocó nauseas, fue saber que él se había acostado con ella, con mi enemiga, y todavía permití que él me...Estaba en el baño, sin salir, nos habían quitado los celulares y revisaron la habitación para que no hubiera algo que nos ayudara a escapar, no había querido salir, y ya era tarde, nos tendrían que sacar en algún momento, me dolía la cabeza y ne
Chuck soltó una enorme risotada, cosa a que le molestó considerablemente a Martín, yo no podía creer lo que estaba escuchando, ¿en realidad no era gay? ¿O solo era otro de sus juegos sucios y baratos? A estas alturas de mi vida, ya no sabía que pensar.—No le veo la gracia —dice Martín en tono serio.— ¡Claro que tiene gracia! —Habla Chuck calmando su risa— acabas de decir que no eres gay, cuando hace tiempo que se escucha el rumor de que eres bisexual, y bueno, Annethe ha confirmado que eres gay...—Pues es una mentira todo —afirma con seguridad Martín mientras toma asiento a mi lado, demasiado cerca de mí, para mi gusto— y si no me creen puedo comprobarlo, haci&