[SERENA]

Estoy saliendo de aquel pequeño cuarto donde se cumplió uno de esos momentos que imagine mil veces en mi cabeza cuando soñaba despierta, pero jamás creí que sucedería. Conocí a Iker Santos y no puedo creer lo mucho que valió la pena esta aventura de venirme a Miami sola a pesar de toda la preocupación que rondaba alrededor de mi salud, la cual al parecer ya ha mejorado considerablemente. Sé que soy una persona muy positiva y por eso me traje conmigo la portada de su último álbum y un rotulador. Tenía la esperanza de que Iker se acercara al público y pudiera conseguir su autógrafo, pero lo que acaba de suceder va mucho más allá de lo que podía esperar. No solo conocí a Iker en persona si no que me grabo un video y nos sacamos una selfie.

La producción nos pidió a las tres personas que estuvimos ahí que no dijéramos nada al resto del público para que no hubiera problemas, pero la verdad que va a ser muy difícil ocultar esta sonrisa. Nadia y Carla, las otras dos chicas que fueron sorprendidas estaban igual que yo y no podíamos parar de comentar lo que sucedió, aunque Nadia dice que a Iker le pasaba algo raro conmigo. La verdad que no le preste mucha atención a su comentario ya que todavía me encuentro en otro planeta. 

—Hola chicas, ¿Cómo les fue? — Nos pregunta Elisa y nuestras sonrisas nos delatan. 

– ¡Genial! — Le contestamos al unísono.

—Me alegro mucho, ahora por favor vuelvan a sus asientos que ya esta por entrar Iker, ¿Sí? — Nos pide amablemente y asentimos. Estoy caminando lentamente a mi asiento, y la verdad que cada paso que doy me cuesta mucho, mis piernas me tiemblan todavía a causa de la emoción de haberlo conocido. No puedo creer lo tonta que fui, lo único que le pude decir es que me moría. Quería preguntarle tantas cosas y no pude…

Ya estoy sentada en mi lugar y una vez que una escena del programa se termina de grabar, ahí empieza el equipo del programa a traer los instrumentos y a alistar el escenario para él. De a poco van terminando de armar la escenografía y empieza la grabación nuevamente. El presentador hace uno de sus chistes y luego le pasa la palabra al otro conductor para que presente a Iker. 

—Y con ustedes, ¡Iker Santos! — Exclama el presentador.

De esta manera empiezan a sonar los acordes de su tema, y justo en ese momento veo que él mira hacia donde estoy yo ya parada para cantar junto a él como el resto de público, y se me queda mirando fijamente, aunque en realidad no estoy muy segura ya que donde estoy yo también hay una cámara.

Que hermosa voz que tiene por Dios, es un ángel y esa canción es espectacular. Vi el videoclip tantas veces que ya conozco todos sus gestos y canto junto a él una de las frases más especiales de la canción, y  justo en esa frase mientras él señala a su corazón y hace ese gesto circular en su abdomen, y por si esto fuera poco, vuelve a mirarme fijamente. 

Si su intención es dejar a sus fans sin aliento sin dudas lo esta consiguiendo. Termina de cantar esta primera canción, y el presentador se acerca a él para saludarlo y presentar su ultimo álbum. Iker no deja de mirar a la cámara que se encuentra donde estoy yo sentada y la verdad que me estoy empezando a poner nerviosa, 《¿será que parecí tan idiota dentro de ese cuarto no sabiendo bien que decir, y por eso me mira tanto? O quizás to esto es simplemente imaginación mía… eso es lo más seguro.》 

El presentador termina la conversación con Iker y se aleja de él mientras empiezan a sonar los acordes de su próximo sencillo y una vez más nuestras miradas entran en contacto, pero como si todo esto fuera poco, en una de las frases llenas de picardía y que insinúan un cuento de hadas entre los labios de él y otra persona, guiña un ojo. No preste mucha atención a quien, o si era a la cámara, pero lo único que puedo hacer es bailar con su música y cantar esa canción junto a él. Están sonando las últimas notas y ya la tristeza comienza a hacerse presente porque no creo que cante otra canción.

—¡Un aplauso para Iker Santos! — Pide el conductor y de inmediato todo el publico se rinde a sus pies. Se acerca a Iker y empieza a preguntarle por su Sevilla querida. Iker tiene una sonrisa de oreja a oreja cada vez que habla de su tierra y eso me parece muy hermoso, pero así de repente el presentador le da las gracias por haber venido al programa y con esas palabras, Iker se retira del escenario. 

Mi razón de estar acá en el programa se termino así que le hago señas a Elisa para que se acerque. —Elisa, ya me tengo que ir. ¿Me puedo ir ya o espero a que ocupes mi asiento? — Le pregunto una vez que ella se acerca.

—Dame un momento ¿Sí? — Me pide y ella se va a buscar a alguien afuera y una vez que regresa, lo hace sentar en mi puesto.

—Ahora si Serena, muchas gracias por venir. — Me dice sonriente

—No, gracias a ti Elisa por todo. — Le respondo aun con esta felicidad que no me cabe en el cuerpo y empiezo a caminar hacia la salida. 

El camino hacia donde tengo el auto estacionado es bastante largo y entre los nervios, la emoción de haberlo conocido y de que estoy marcándole a mi madre para contarle todo lo que sucedió, ya que necesito contárselo a alguien urgentemente, me estoy tardando más de la cuenta en llegar a mi coche. 

En el camino se me cae mi bolso y como consecuencia todo lo que llevo dentro ya que tengo la mala costumbre de no cerrarlo. Estoy muy concentrada hablando con mi mamá contándole toda la historia y al mismo tiempo recogiendo todo lo que se cayó al piso. Cuando de repente escucho el ruido de una especie de motor, pero no suena como un auto, un poco confundida me doy vuelta y veo que es un carrito de golf con dos personas en el. Sin prestarle mucha atención sigo en mi tarea de recoger lo que se cayó.

—¡Qué suerte que aun no te has ido! — Escucho que dice alguien tomándome por absoluta sorpresa.

Rápidamente giro mi cabeza estando todavía agachada en el piso y cuando levanto la vista es él, es Iker…. 

—Ma, ahora te llamo ¿sí? — Balbuceo y cuelgo la llamada.