El miércoles me coloque una falda negra con una blusa blanca, alise mi cabello y me coloque algo de maquillaje, al menos quiere estar presentable, el problema fue que al llegar a la clínica me quede paralizada en la puerta porque ni siquiera he preguntado nada sobre el empleo y si tampoco Miriam sabe que vengo y piensa que le quitare el empleo.
Debí contestarle al menos uno de esos bobos mensajes a Derek.
Miles de pensamientos cruzaron por mi mente hasta que me calmé, ya estoy aquí y no puedo echarme para atrás, respiré profundo y me acerqué a Miriam para presentarme y aclararle que estoy para ayudarla.
–Buenos días Miriam –salude.
Ya tiene unos archivos encima del escritorio y unas personas están haciendo cola para ser atendidos,
Hola lectoras, espero que les guste la novela, no olviden agregarlo a lectura fácil, seguirme en mi perfil y dejar su comentario que me ayudan un montón.
Ha pasado una semana desde que empecé con mi nuevo trabajo, la universidad también está a punto de comenzar su nuevo semestre, no tengo muchos ánimos de inscribirme, pero seguro Marine le pasa el chisme a Denis y es capaz de llevarme arrastrada a ese lugar. Contrario a todo esto, me ha ido muy bien como apoyo de Miriam, después de unos días tomé mi propio ritmo y dividimos las responsabilidades.El trabajo es muy agradable y tengo que decir que me llevo muy bien con la mayoría del personal, no tardé en conocer al famoso doctor Jones y no precisamente famoso por sus habilidades médicas, en realidad porque todos conocían por no perder una oportunidad para coquetear o acercarse de forma inapropiada, también evitó ir a la oficina de Derek porque no desaprovecha una oportunidad para querer besarme, aunque se
Me levanté con dolor de cabeza y seguramente un poco hinchada por el llanto de anoche, además de tener mi mano hinchada por el golpe de ayer, eso me hizo recordar que no fue un maldito sueño y todo fue muy real, seguramente tendré que conseguir otro empleo. Salí directamente al baño a darme una ducha, no lo quería hacer, pero tengo que lucir lo más normal para Marine, a ella también le han pasado algunas cosas similares y siempre nos contamos todo, es desagradable cuando esto sucede. Al salir del baño, Marine tiene un vestido verde y su cabello rizado está recogido. –Hola dormilona –sonrió –. Ya voy de salida, espero que tú tampoco te quedes aquí. –Creo que no –mentí. En cuanto ella saliera po
Continuamos en la cama un largo tiempo, por momentos Derek comenzaba a besarme y sus manos recorrían mi cuerpo debajo de las sábanas, luego se detenía y empezaba a mencionar una tontería, hablamos, nos besamos, nos tocamos, volvíamos a hablar, de algo que estaba segura es que ninguno quería salir de la pequeña cama, creo que quería hacerlo otra vez, pero no habían más condones, yo lo hubiera hecho sin pensarlo con lo perdida que me sentía entre sus brazos, al menos había alguien razonable en la cama. Me abrazó cuando se escuchó el sonido de la puerta y unas risas, rodé los ojos al saber que es Marine con su novio, la puerta de su habitación se escuchó y luego un incómodo rechinido de su cama.–Mi compañera ya llegó –murmuré sonrojada por la situaci&o
El domingo el novio de Marine finalmente se fue, no la pude ver porque tenía turno temprano en el restaurante, se siente un poco extraño que ella se vaya a trabajar mientras yo me quedo en casa fui a hacer unas compras al supermercado para tener comida en el apartamento aunque la mayoría fueron golosinas. –Me agrada que tengas tiempo –sonrió Marine al ver todo en el refrigerador –. Me pasas la cuenta de lo que te debo por esto. –Está bien, creo que voy a recibir mi primer sueldo está semana. –Me invitarás a una pizza –sonrió. –Si me alcanza. –¿Cómo pudiste aceptar un empleo sin saber cuánto te pagarán? –Es que ya no me querían en el restaurante y me obligaron a tomarlo
Me tocó levantarme temprano, en sábado, me coloque unos jeans y una blusa roja, tomé mi maleta y salí del apartamento con un abrigo porque hace demasiado frío, cuando bajé Derek ya está esperándome en su auto.–Buenos días.Tiene una sonrisa genuina, ni siquiera sé cómo puede estar feliz siendo tan temprano.–Ni siquiera ha salido el sol –refunfuñe adormitada.–¿No te has arrepentido?–Tienes suerte de que haya salido de la cama, ¿a dónde vamos tan temprano?Me acomodé en el asiento del copiloto cerrando mis ojos.
Salimos de la habitación para reunirnos con el señor Hole.No conocía esta parte de Derek, en el trabajo es muy seguro, decisivo y estricto, pero hoy se ve nervioso y tenso, supongo que no lidiaba con estas personas seguido.–Te ves tan hermosa que todos te ven –susurró a mi oído.Comencé a sentirme nerviosa porque esa no era la razón por la que me veían, solo esperaba a que fuera mañana y que Derek no se enterara de la verdad por alguien más porque acabaría todo.Llegamos a unas mesas con una vista plena del Campo de Golf, en una esquina estaba sentado el señor Francis Hole es un hombre de piel bronceada, delgado y alto de cabello negro con perfil griego, vest&iac
Regrese con Derek y el señor Hole, tome mi lugar, pero observé que el señor Hole se está aburriendo porque Derek no para de hablar del proyecto lo cual es un desperdicio de tiempo, los adinerados eligen dónde invertir su dinero a través de las opiniones de sus consejeros que investigan el potencial del lugar; solo hacen estas reuniones para ver si la persona les agrada o no.Es decir, que el señor Hole está preparando para invertir en el ala de geriatría, pero tengo que decir que Derek no está causando la mejor impresión.–Es un hermoso lugar señor Hole –mencioné.Tomé la mano fría de Derek para que se calmará un poco, ni siquiera ha tocado su trago.
–¡Estuviste impresionante!Derek estaba muy emocionado, me sostuvo en sus brazos y beso mi mejilla, eso me hizo soltar una pequeña risita.–No fue nada, solo nos divertíamos –mencioné.–¡Qué no fue nada! Cuando ví que tiraste la pelota y no llegó, creí que todo estaba perdido y luego él dijo que sí.Hablaba demasiado rápido y emocionado, verlo así me hace muy feliz. Se detuvo cuando comenzamos a caminar de regreso a las habitaciones y me dio una mirada curiosa.–Hay un bar del otro lado, ¿quieres ir a celebrar?Sé dónde está ese bar, fu