Siempre fuiste tú. Capítulo 39.Ese día estaba resultando el más especial para Elisa, cada vez se sentía más unida a Luke, aquella felicidad que estaba experimentando, era como un bálsamo, algo difícil de creer, pues durante dos años le tocó vivir grandes tormentos a causa de su separación, y saber que ahora no sólo tenía junto a ella al hombre que amaba, sino que también tendrían un hermoso hijo que venía en camino y el que esperaban con tanta ilusión, definitivamente era algo que no tenía precio. Se encontraba junto a él, durmiendo en el camarote, pero ella se despertó de repente al escuchar el sonido de las notificaciones en el celular de Luke. Abrió los ojos poco a poco y se percató de qué él aún seguía durmiendo, no quiso molestarlo al ver el gesto plácido en su rostro, pero las notificaciones no paraban de llegar, y entonces eso se encendió un foco de alarma en los sentidos de Elisa, quien por curiosidad terminó acercándose para averiguar qué era ese asunto tan importante que no
Siempre fuiste tú.Capítulo 40.La tensión se respiraba en el ambiente, tanto Luke como Elisa estaban muy afectados por lo sucedido, él por su parte, sentía que Elisa no comprendía su afán de cuidar de ella y de su hijo, pensaba que a pesar de sus explicaciones, ella dudaba de su fidelidad y eso le dolía profundamente.Pero Luke estaba equivocado, Elisa no dudaba de su amor y mucho menos creía que él la hubiese engañado con Diana, lo que le dolía era que no le contara las cosas, que no hubiera aprendido la lección, ellos habían pasado por tantas cosas, que le resultaba inadmisible que pudiera guardar silencio ante una eventualidad como esa.Luke se quedó un buen rato en cubierta tratando de ordenar sus pensamientos, pero por más que trataba de tranquilizarse, no lograba hacerlo, sabía que el paseo que habían planeado no podría continuar, por lo que tomó la decisión de pedirle al capitán del yate que regresaran.–Regresemos capitán, ya no tiene caso ir a la isla.– Indicó.El capitán a
Siempre fuiste tú. Capítulo 41.La cercanía de Evan se intensificó, era un depredador acorralando a su presa y aún cuando Ana no era ninguna inocente chica, se sentía intimidada, él comenzó a besarla en los labios, en el cuello y a tocarla de manera sugerente, su respiración estaba agitada y se veía la chispa de deseo en sus ojos.–¿Qué te sucede?, ¿Acaso no te gusto?, Te estás comportando como una niñita boba.– Soltó de repente con un tono áspero en su voz.–Y tú te estás comportando como un patán, nunca imaginé que me tratarías así, así que quiero regresar, ¿Quién crees que soy? Una niña tonta que vende su cuerpo, no te equivoques conmigo, Evan, yo busco a alguien que me tome en serio– Mintió para salir bien librada .La realidad es que Ana tenía muy poco sentido de la decencia, y los principios para nada la importaban, pero ese sujeto tenía algo que la hacía sentir vulnerable, era como si él sólo tuviera intenciones de utilizarla, y eso además de qué no le gustaba, para nada le con
Siempre fuiste tú.Capítulo 42.Clarissa seguía sin contestar el teléfono de su habitación en el hotel y Ana ya estaba muy preocupada.El investigador trataba de tranquilizarla pero una fuerte crisis de pánico empezó a apoderarse de ella.–Mi mamá, esos malditos seguro le hicieron daño.– Gritaba ella aterrada.–No pienses esas cosas, ya la policía va rumbo el hotel, verás que llegan a tiempo.:–Contestó el joven investigador.Luke también estaba muy intranquilo porque sabía que lo sucedido le afectaría mucho a Elisa, pues a pesar de como su madre y su hermana se habían portado con ella, Elisa siempre se preocupado por su bienestar.Sabía que ella no le perdonaría si le ocultaba algo tan delicado como lo que estaba pasando, con lo que sucedió recientemente con la publicación del artículo en la revista, le había quedado claro que no podía volver a ocultarle las cosas, así que tomó la decisión de hacer lo correcto y decírselo.Elisa se dio cuenta enseguida al ver la expresión en el rostro
Siempre fuiste tú.Capítulo 43.La familia estaba viviendo momentos de angustia, las horas pasaban y los médicos todavía no permitían ver a Clarissa, Ana había despertado luego de que el efecto del tranquilizante terminara, Elisa estaba junto a ella y en cuanto Ana la vio rompió en un llanto desgarrador.–Es mi culpa Elisa, mamá se está muriendo, nunca debí salir con ese maldito.– Dijo.–No hay nada que podamos hacer, Ana, lo único que nos queda es orar para que todo salga bien con mamá.– –Seguro debes estar furiosa conmigo, muchas veces me advertiste que tanta ambición sería mi perdición, y como siempre, tenías razón.– Exclamó Ana.–No tiene caso recriminarte nada, ya bastante estás sufriendo con lo que está pasando.– Contestó Elisa.Ana se reincorporó y salieron de la habitación donde estaban, el doctor llegó para informarles sobre el panorama ante el que se encontraban, y por la expresión en su rostro se veía que no eran buenas noticias.–La señora Clarissa despertó y quiere ver a
Siempre fuiste tú. Capítulo 44.Las voces de todos se escuchaban lejanas, el doctor hablaba y las voces parecían diluirse, de pronto todo se oscureció y Elisa se descompensó, los brazos fuertes de Luke la sostuvieron evitando que cayera al piso.–Mi esposa está embarazada, necesita atención de inmediato. –Gritó Luke alzando la voz por encima de todos.El llanto desgarrador de Ana se escuchaba por todos lados, su dolor era tan profundo que en ese momento solamente quería morir, no deseando perpetuar su angustia, así que salió corriendo del hospital, estaba totalmente desquiciada, fuera de control, pasaba cerca de los coches sin que su vida le importara, lo único que quería era desaparecer de este plano para poder reunirse con su mamá y pedirle perdón por todo el daño que le había ocasionado al salir con ese hombre que sólo le trajo desgracia. Pensaba en cómo Clarissa le había aconsejado que conquistara a Evan, a pesar de todo lo que se decía de él, a ella le atrajo desde el principio l
Siempre fuiste tú. Capítulo 45.La hora de llevar a Clarissa al crematorio había llegado, Ana no aparecía por ningún lado, pero Elisa pensó que se trataba de una más de sus rabietas, o que incluso esa situación la había devastado tanto que prefería mejor no presenciar ese momento tan doloroso.–Tu hermana no aparece por ningún lado, ¿Quieres que la esperemos?– Preguntó Luke.–No cariño, es mejor así, y si ella quiere esto, entonces así será.– Dijo decidida.Pronto llegó el momento de despedirse de Clarissa, Elisa lloraba desconsoladamente, estaba dejando ir para siempre a la mujer a la que siempre consideró su madre, y eso no era nada sencillo, aún cuando el comportamiento de Clarissa había sido terrible. Dentro de un rato, la persona responsable les dijo que podían abandonar la sala, que las cenizas serían entregadas un poco después, pero que no era necesario esperar, le ofreció la oportunidad de despedirse de ella con un beso, por lo que abrieron el ataúd para que ella pudiera hacer
Siempre fuiste tú. Capítulo 46.Entre más leía, el dolor de Elisa aumentaba, no podía creer que toda su vida había sido una mentira, por una parte entendía las razones de su padre para guardar silencio, pero se le hacía injusto que le hubiesen ocultado algo tan importante para su existencia. Se limpió las lágrimas que empapaban sus mejillas, respiro profundamente tratando de llenar sus pulmones del mayor aire posible, ya que por minutos sentía que la respiración le faltaba debido al intenso dolor que estaba experimentando, tomó la carta entre sus manos y continúa con su lectura, para lo cual tuvo que llenarse de valor, pues sabía que lo que le esperaba sería algo muy grande que definitivamente le cambiaría la vida.–Hijita querida, a veces en nuestro afán de procurar el bienestar para nuestros hijos, incurrimos en terribles errores que después nos cuestan muy caros, en mi caso así fue, ya que mi vida junto a Clarissa fue un trance muy difícil como bien sabes, siento tener que decirte