Trago saliva y lo veo fijamente mientras que mis manos están a mis lados.

Él me ve fijamente, su mirada penetrante me pone algo nerviosa, debo aceptarlo y no puedo creer que diga esto pero… siento, no, no siento, quiero besar esos labios ¿Qué mierda estoy diciendo? Claro que debe ser el deseo y la atracción pero solo eso.

Cierro los ojos por un segundo después los abro y lo empujo.

—Deja de ser tonterías —trago saliva.

Él me toma de la mano y me devuelve hacia esa pared fría.

—¿A qué le tienes miedo? No dices que tú me dominas entonces demuéstrame que no sientes nada—posa su mano en mi cintura mientras me atrae hacia él.

—No se te hace que te encanta tocarme —toco una de sus manos para luego deslizar la mía sobre la de él.

Él sonríe de lado mientras ve eso.

—Puede ser—regresa su mirada hacia la mía.—Acéptalo —toma mi barbilla para acercarme más a él.

—¿Qué quieres que acepte? —trato de demostrar toda la seguridad que tengo.

—Qué te gusto, que me deseas —siento rozar sus labios en los