Pasamos el resto del día entrenando… él, midiendo mis habilidades; yo, corriendo de allá para acá, saltando, pateando… llevando mi destreza al límite. No dijo ni una sola palabra más con respecto a lo que hubiese sucedido en el lago, tampoco yo quería hacer referencia a nada de lo ocurrido allí, el ambiente era menos incómodo así. Llegando de vuelta a casa, él se adelantó y fue directamente a su oficina y se encerró. Yo llegué a la sala de estar y me senté en el sofá, agradeciendo su ausencia. Se sentó junto a mi Emil.
- Te ves muy mal – Emil bromeó – estás más horrible que ayer…- Cierra la boca – reí – … tu alfa es un demente… no sé como aguantaré la semana.- Tranquila… no todo es tan malo, ¿verdad? Antes solo podíamos vernos en el instituto…- ¿Donde están mamá y Jason?- Fueron a cenar… papá y yo ya terminamos nuestro turno de guardia.- Me alegra mucho ver a mamá feliz… postergó esto por años. Es bueno que disfrute y salga a divertirse con su pareja- ¿Y tu? – Emil me queda mirando – ¿No mereces disfrutar y divertirte un momento? – le sonreí – vamos… yo invito, salgamos a distraernos.- … - lo pensé por un momento – de acuerdo. Me hará bien distraerme y salir.Fui hasta mi habitación, tomé un vestido rojo ajustado y unos tacones, para ir a ducharme y vestirme en el toilette. Caminé por el corredor y entré al tocador. El agua tibia me supo de maravilla y recordé el momento en el lago, antes de que Lucien llegara. La sensación de libertad y plenitud en mi interior fue completa. Sentir a mi loba , sus sensaciones, lo que piensa y salir a la luz, es el sentimiento más gratificante que he experimentado. Ahora puedo entender a qué se referían todos cuando decían que era justo que yo pudiese vivir como lo que soy. Sin embargo todo lo que rodea a mi nueva identidad, me abruma sobremanera. Salí de la ducha y me puse el vestido, me agaché para ajustarme los tacones y sentí que abrían la puerta, era Lucien.- Estás muy arreglada para ir a dormir- Saldré con Emil.- Pensé que estarías exhausta.- Pues, pensaste mal. ¿Puedes esperar afuera?… en un momento saldré- ¿Cuándo conocerás tu lugar? Si no fueras tu, ya estarías muerta por tus insolencias – cerró la puerta con enojoDejé mi cabello suelto, hacia un lado y puse un brillo en mis labios. Cuando salí del toilette, Lucien ya se había ido. Bajé las escaleras y fui a la cocina, allí estaba Emil, muy guapo, con sus jeans y camiseta ajustados, y a su lado, Lucien, bebiendo una cerveza despreocupado.- ¿Ya estás lista? – Emil me habló muy animado- Sí… ya podemos irnos- Mañana el entrenamiento empieza a las cinco… no llegues tarde – Lucien habló algo molesto, sin dirigirme la mirada. No hice mayor caso.- Ya, vamos – le dije a Emil- Sí… - Emil miró a Lucien – ¿Seguro que está todo bien?- Claro que sí… - Lucien le respondió fingiendo que nada sucedía.Entramos a la camioneta y Emil condujo hasta un bar dentro de nuestro territorio. Entramos y nos sentamos en una mesa ubicada en un balconcito dentro del recinto.- ¿Tu gusta el lugar?- Muchísimo, es muy bonito. Gracias… siento que nunca hayamos hecho algo así…- También yo tengo responsabilidad… jamás te invité… ¿Qué tal estuvo el entrenamiento de hoy?- No preguntes… fue un desastre. Lucien estuvo enojado gran parte del día.- ALFA Lucien – recalcó – Ayla, eres parte de la manada ahora, debes tratar a tu Alfa con respeto.- Lo sé, lo siento… aun no me acostumbro a este sistema. Lo observo y solo veo… a un chico guapo malhumorado – me reí.- Lucien es muy joven… pero es nuestro Alfa. Él es muy respetado en nuestro mundo; es un Alfa muy fuerte y ha gobernado muy bien, trayendo solidez a nuestra manada. Gracias a él, hoy somos de las manadas más fuertes. Todos esperan que prontamente encuentre a su Luna… la manada está preocupada. Ya han pasado cinco años desde que es nuestro Alfa y estar solo vuelve salvajes a los lobos.- ¿Qué es una Luna? – pregunté recordando la conversación de la mañana- ¿Es en serio? La Luna es la pareja del Alfa. Hay que regresarte al pre escolar…- No seas idiota… llevo un día aquí y ya pretenden que entienda todo… tu eres mi mejor amigo, tienes el deber de explicarme todo ¿Cómo se escoge una pareja?- Los lobos cuando conocen a su pareja, se identifican inmediatamente. Es una conexión sobrenatural que nos ha dado la diosa de la Luna; ella escoge a las parejas. Al momento de unirse como uno, se marcan, el uno al otro, con una mordida en el cuello…- Dios… ¿Y eso no duele?- Yo asumo que sí debe doler un poco – bromea – pero, que importa, somos hombres lobo… será como recibir una inyección… duele un poco en el momento, pero los beneficios son mucho mayores.- ¿ Y tu pareja?- No lo sé… aun no la he encontrado… pero cuándo la encuentre, no lo pensaré dos veces… la marcaré de inmediato y la haré mía – me quedó mirando pensativo.Emil me contaba todo de un modo tan natural, sin embargo, me cuesta trabajo entender su forma de vida. ¿Acaso no podré escoger a mi pareja? ¿Estaré dispuesta a aceptar a alguien que me reclame como suya?... Mis pensamientos fueron interrumpidos por un chico, su tez era morena, sus ojos, verdes, cabello trigueño largo desenfadado; parecía salido de alguna antigua serie de surfistas…- Hola, amiga… ¿Quieres bailar?- Alfa Darius… que sorpresa… lo siento, está conmigo – Emil se levantó, intentando ser cordial, pero a la vez, muy posesivo.- Emil, el Beta bebé… - sonrió burlonamente y habló bajo, pero aun así lo escuché – Vaya, que presunción la tuya… ¿De verdad crees que la hija de una vurmita es tu pareja?- No estás en tu territorio, Alfa Darius… cuida tus palabras.- No te preocupes… solo venía a comprobar si los rumores eran ciertos – luego de eso se alejó tranquilamente.- Los Alfas son muy extraños… - bromeó Emil, algo preocupado- Ni que lo digas… - intenté ignorar lo acontecido.Llegamos de vuelta a casa a eso de las dos de la mañana… nos reímos, mucho durante esa noche, bailamos y logré distraerme bastante. Subí a mi habitación, recordando las palabras de ese Alfa Darius. Sin duda debía hablar con mi madre sobre ese asunto; sin embargo, la hora no era adecuada para llamar a su puerta. Necesitaba respuestas, por lo que, en vez de entrar a mi habitación, entré en la oficina de Lucien. Dentro de ella, el Alfa de la manada, disponía de una bella y gran biblioteca con todo tipo de literatura; también mucha información sobre hombres lobo, licántropos, brujas, vampiros y muchas cosas más… busqué información sobre los Vurmitas, sin embargo no hallé nada… el tiempo pasó muy rápido, buscando, leyendo, investigando… empecé a entender un poco mejor algunas cosas que no comprendía sobre nuestra especie. Nada me distrajo, ni el sueño se presentó, mientras me sumergía en aquellos libros. Nada excepto alguien que carraspeó desde la puerta…- ¡Lucien!... me asustaste… - dejé caer los libros. Me sentí algo avergonzada, nuevamente estaba traspasando mis límites – a… Alfa Lucién… lo siento, de verdadMe agaché a recoger los libros, él se acercó y observó lo que estaba leyendo.-Licantropos… el apareamiento de los hombres lobo… - leyó muy divertido por la lectura…-No… la página se cambió cuando cayeron los libros… ¿Hasta Crees…? – que difícil es hablarle como a un superior, cuando siento que tiene casi mi edad – Es… sólo estaba buscando información… aclarando mis dudas; investigando… Pido perdón por mi imprudencia, no debí entrar aquí sin permiso.-No… de hecho, no debiste – tomó los libros y los llevó al librero – esta es mi biblioteca personal, a demás de ser mi oficina privada. -De verdad lo siento… - agaché la cabeza-Sin embargo – no se volteó a mirarme – es muy grato ver a un ratón de biblioteca husmeando en mi oficina… hace mucho tiempo no veía a alguien que disfrutara tanto la lectura. -Amo la lectura…
Me acosté a dormir, logré conciliar el sueño hasta alrededor de las dos de la madrugada, cuando sentí ruidos.. me levanté, sigiloso, y fui abajo a ver si Ayla ya había llegado. La encontré en mi oficina, husmeando entre los libros como un ratón de biblioteca… Me pareció muy linda… cómo una joven que logra despertar mi instinto animal, es también asidua a la lectura… sentí un calor en mi corazón, pues me hizo recordar a mi amada madre… ese antes fue su despacho, en el que pasaba largas horas leyendo. De ella heredé el amor por la lectura. No quise molestarla y volví a la cama a dormir… alrededor de las cinco de la mañana me levanté y bajé a la habitación de Ayla, pero ella aun no estaba allí… tal fue mi sorpresa al darme cuenta que había pasado todas esas horas en el despacho sin dormir, leyendo. Abrí la puerta de la oficina, ella estaba sentada junto al escritorio leyendo un libro y luego contrastando lo que leía, con otro. Escuchó que entré en la oficina y se levantó rápidamente y
Me condujo por el bosque. Nuestros cuerpos de loba ayudaban mucho a mantener el paso rápido sin desfallecer, ya que el viaje fue bastante largo. Recorrimos el bosque y poco a poco el paisaje empezó a cambiar. Los arboles claros, se convirtieron en añosos robles oscuros, donde el sol casi no lograba pasar a través de la densa espesura de los macizos. Llegamos a una cabaña rústica muy antigua y destruida por el tiempo. Sentí que la loba de mi madre gemía con gran tristeza al entrar por la puerta.-Oí a Emil hablar con Jason esta mañana… dijo que alguien mencionó a las vurmitas.-Si, es verdad… aunque existe un enorme misterio alrededor de eso. Nadie ha querido explicarme nada… -… - respiró un segundo observando el viejo y destruido lugar – hace muchos años, tu bisabuela, Vinnia fue culpada de engañar a su pareja y desechada por su manada junto a sus tres cachorras. Fueron obligadas a convertirse en lobas errantes y confinadas a vivir en la ciénaga. Su espíritu nunca decayó y con
Bajé inmediatamente y corrí junto a Emil, llegamos a su vehículo y subimos.-¿Qué le ocurrió? Ayer estaba bien…-Hoy cuando despertó no se sentía bien. Jason y Lucien estuvieron con ella, pero no quisieron esperar más tiempo y la llevaron al hospital.-Por la diosa… ¿Qué pudo ser? Ella es muy sanaLlegamos al hospital de la manada, la recepcionista en seguida identificó a Emil y lo guio hasta la habitación donde se encontraba mi madre. Ella se encontraba recostada, junto a ella estaba Jason, tomando su mano y Lucien, en la ventana. Aleynor lucía de buen animo, aunque su rostro denotaba cansancio.-Mamá… ¿Estás bien?-Tranquila, cariño estoy bien… estoy un poco descompuesta, eso es todo… tal vez me hizo mal algo que comí… estos dos lobos son unos exagerados.-Te desmayaste – Jason se dirige a ella muy nervioso, y luego me mira a mi – hija, se desmayó… Jason le reprochaba muchas cosas, muy angustiado y Aleynor intentaba calmarlo con su dulzura de siempre. Me acerqué a Lucien
PUNTO DE VISTA DE LUCIEN Después de salir del hospital volví a la casa. Papeleo y más papeleo, quien diría que el trabajo de un Alfa es tan burocrático. Terminé de firmar solicitudes y las invitaciones para las manadas vecinas. Durante la tarde escuché a Jason llegar junto a Aleynor, se encerraron inmediatamente en su cuarto. Cuando el sol ya se estaba poniendo, me levanté del escritorio, estiré la espalda, observé un momento por la ventana. Recordé a mi madre recostada sobre el sofá, mientras mi padre realizaba su labor de oficina en el escritorio. Esa oficina no era su lugar de trabajo, sin embargo, siempre decía que su trabajo se hacía mucho menos pesado y aburrido si podía mirar de vez en cuando a su Luna tan ensimismada en su lectura, que incluso sentía deseos de saltar dentro de la página para lograr entrar en sus pensamientos. Sentí ruidos en la escalera y a alguien que entraba en el tocador. Supuse que Beth ya había llegado, por lo que di mi trabajo por terminado ese día y b
Se trataba de Jason y Aleynor que conversaban animadamente mientras preparaban algo para merendar. Quisimos continuar en lo que estábamos, pero la situación se enfrió…-Lo siento… - pasé mis manos por el rostro – es que tu madre… -Descuida… yo tampoco puedo continuar… Es algo incómodo que estén tan cerca y puedan oírnos… -De cualquier modo… me agrada mucho esto. -A mi también me agrada, Lucien… Alfa…-Lucien… en este contexto no soy tu alfa… no quiero que cedas si es por temor a mi posición.-En serio, ¿De verdad crees que yo lo haría? -No, para nada, tienes razón. – le di un beso en los labios. – te invito a cenar.-Dame cinco minutos, en seguida bajo.Ayla se levantó y fue a su habitación. Volví a ajustarme la camisa. Y arreglé mi cabello revuelto. Bajé para esperarla en la sala de estar, esperando que Aleynor y Jason estuvieran aun en la cocina; tal fue mi sorpresa cuando los vi sentados abrazados en la sala de estar viendo la televisión. Al bajar, los dos me mi
Entramos a la cabaña del Alfa; esta era simplemente maravillosa, los ventanales entregaban una vista completa al lago. Entre la sala de estar y el comedor, se encontraba una acogedora chimenea. Para mi sorpresa, ya estaba encendida.-¿Hay alguien más aquí?-No, solo mis guardias a unos cuantos kilómetros a la redonda. Di aviso que estaría aquí durante el fin de semana y ordené que estuviera todo preparado.-¿Sabías que aceptaría tu invitación?-Por favor, dime… ¿Quién se negaría a disfrutar esto? – me indicó la hermosa luna reflejada en el lago a través de la ventana.-Realmente es un lugar privilegiado… -Si puedo compartirlo, es mucho mejor… aquí siempre estoy solo. – se saca la camisa y estira la columna. Observo los marcados músculos de su espalda, mientras camina hacia la nevera – Tengo mucha hambre… ¿tu no?-La verdad, sí… muchísima… - me acerco a la isla de cocina, me siento y me acerca un pastelillo con fresas– Has estado muy relajado… desde que nos conocimos sólo
En un instante, percibo algo en el agua. Abro mis ojos y logro vislumbrar luces y movimiento en su interior, justo frente a mis ojos. Intento enfocar para ver hacia el fondo, para saber de qué se trata, pero, en la superficie, se transformó en una tarea imposible, por lo que decidí sumergirme e ir a lo profundo. Entré en el lago y nadé hasta su centro, guiado por aquella extraña luminosidad. Aquella iridiscencia se transformó pronto en una sutil bola de luz, suspendida en el fondo de aquellas aguas. Extendí mis manos y la toqué, sentí como la magia de mi interior empezó a fluir y me rodeó, para dar paso a una visión del pasado.Mi madre muy joven, encerrada en una mazmorra, y mi tía sujetando su mano desde fuera.-Violet, debes irte… pronto volverá-Ali, no te dejaré aquí… iré por ayuda. -¡Escúchame, por una sola vez por favor, hermana! No vengas por mi… hoy huiré, no volverás a verme.-Pero Ali, ¿De qué estas hablando? -Estoy embarazada. No repetiré la historia, Violet. An