Kass La sala ya estaba prácticamente llena cuando llegamos. Alex me comentó que allí estarían los integrantes del Consejo, miembros con altos cargos de las diferentes razas y nuestros amigos y familiares. Efectivamente en una mesa al fondo vi a Eli, Tyler, Gregory, Megan, Jack, Mérida, Jonas,su mujer y mi hermano. Logan y Matt habían preferido estar de incógnito en el palacio liderando el equipo de seguridad.Cuando llegamos a la altura de la primera mesa todos los invitados se levantaron y nos hicieron una reverencia. Mi cara debía ser un poema porque el moreno se acercó a hablarme al oído. —Tendrás que acostumbrarte porque a partir de mañana todo el mundo te saludará así — agarró mi mano y seguimos caminando hasta llegar a nuestra mesa que era la de nuestros amigos. Cuándo llegamos allí todos se sentaron quedando solo Alex de pie. —Miembros del Consejo y demás invitados, es un honor para mí que estén hoy aquí para compartir conmigo y con mi pareja un día histórico en nuestras v
AlexMe había quedado dormido en los brazos de Kassy. Ver las fotos de mi madre me removió los sentimientos y el dolor que por años traté de ocultar me explotó en la cara. Asombrosamente me sentía mejor, era como si me hubiera quitado un peso de encima. —Buenos días, dormilona— besé la cabeza de la castaña que estaba agarrada a mí como un pequeño koala. Era tan afortunado de tenerla. Ella empezó a estirarse y me miró con su preciosos ojos avellana. —¿Por qué eres tan madrugador?, siempre te levantantas temprano— se quejó. —Así aprovecho más el día ——Ya, ya——¿Quieres bajar a desayunar con el resto de la gente o pido que nos traigan el desayuno a la habitación y desayunamos solitos? — dije con una sonrisa.—¿Podemos hacer eso? ,quiero decir, ¿quedarnos aquí solos? — los ojos de la castaña brillaron. —Claro, podemos quedarnos aquí todo el día si quieres y bajar después para la ceremonia. Podemos hacer lo que desees, mi amor— me acerqué a ella y la besé. —Quiero tenerte para mí so
De un momento a otro todo se volvió un caos. La gente gritaba, otros iban de aquí para allá. De pronto ,Alex se subió a una mesa y empezó a dar órdenes. Era impresionante verlo dirigir a la gente con ese aura de poder y seguridad. El era el Rey Alfa y no cabía duda de que había nacido para ello. En unos segundos ya estaban todos organizados y se disponían a ir a la ciudad a luchar. —Yo voy contigo — dije poniéndome a su lado. —Ni de broma, te quedas aquí, el palacio tiene una barrera protectora, aquí estarás a salvo— habló serio mientras se quitaba la chaqueta y los zapatos. —Pero Alex puedo ser de ayuda, ya domino mis poderes—Él paró un momento y se giró a mirarme. —No puedo exponerte Kass, si te pasa algo yo— el moreno me abrazó fuerte y estrelló sus labios en los míos — Por favor, por una vez haz lo que te digo sin protestar. Necesito saber que estás a salvo para poder concentrarme en salvar la ciudad. ——De acuerdo— dije resignada. Volvió a besarme con necesidad y nos separam
EliEstaba arrancando las cabezas de los asquerosos bichos con mis colmillos y no se me daba nada mal. Ya llevaba un buen número cuando sentí un fuerte dolor en el pecho. Parecía que me estaban arrancando el corazón. El dolor era tan intenso que me obligó a transformarme en mi forma humana. Era un dolor terrible pero por alguna razón sabía que el dolor no provenía de mi cuerpo. Busqué a Tyler con la mirada entre los dos bandos que seguían luchando. Sabía que algo malo le había pasado y que mi dolor provenía de nuestro vínculo de pareja. Me concentré en seguir su olor. Dejé a Kass atrás y empecé a deambular por las calles mientras iba matando a esos asquerosos bichos alados con una vara de hierro que encontré tirada en la calle. La batalla se había extendido por casi toda la ciudad y los olores a sangre y vísceras de demonio se mezclaban con el aroma de mi pareja. Al llegar al final de la avenida principal de Siderium su aroma se hizo mucho más fuerte pero estaba mezclado con el olo
TylerMe pesaban los ojos pero poco a poco conseguí abrirlos. Me quité una máscara que tenía sobre la boca y la nariz y me envolvió el delicioso aroma a vainilla y peras de mi pareja. Eli estaba durmiendo acostada a mi lado, su cabeza descansaba en mi pecho y dejé un beso en su frente. Los recuerdos de lo que me había pasado llegaron a mi mente. Estábamos luchando con los demonios cuando vi a Odette salir huyendo y la perseguí hasta un callejón. Pensaba acabar con ella. Yo era el mejor guerrero de la guardia del rey y además poseía el sello real, que me hacía inmune a los hechizos de las brujas así que no le temía en absoluto. Me lancé sin miramientos hacia su cuello en mi forma de lobo. Notaba como mis colmillos desgarraban su garganta, estaba a punto de acabar con su miserable vida y entonces susurró unas palabras en un idioma desconocido y mi cuerpo se quedó paralizado. No esperaba que Odette poseyera una magia superior inmune al sello real . Su sádica risa mientras atravesaba m
AlexSabía que había miembros del Consejo afines a mi padre y a su forma de gobernar a la "antigua", que aprovecharían cualquier oportunidad para hundirme así que me preparé mentalmente para lo que pudiera pasar en la reunión. Sinceramente no me importaba mucho si me devolvían o no la corona. Para mi manada, los habitantes de Siderium, yo seguía siendo su Alfa y seguiría velando por ellos hasta el fin de mis días. Kass, Tyler y Eli decidieron acompañarme así que nos dirigimos en mi coche hacia el palacio, donde se estaban quedando los miembros del Consejo y donde tendría lugar dicha reunión. Cuando llegamos a los terrenos de palacio me dirigí al área habilitada para que las visitas pudieran aparcar. Ya no era el rey así que no tenía derecho a aparcar dentro. Nos bajamos y escuché mucha gente hablando pero pensé que con tantos invitados dentro era normal que se escuchara bullicio. Recorrimos los 300 metros que había hasta la entrada y cuando llegamos me sorprendió ver a un gran número
KassLenora y las demás miembros de su aquelarre me estaban ayudando muchísimo con mis dones. Desde que ella destruyó el supuesto amuleto que me había dado Odette, me sentía mucho más ligera y manejaba mis poderes con mucha más facilidad. Según nos explicó, el colgante era una especie de recipiente que absorbía mis dones .Cuanto más los usara con él puesto más los absorbía . Lenora estaba segura que Odette tendría pensado quitármelo en algún momento y quedarse con mis poderes. Afortunadamente, el anillo protector que me hizo Lenora había anulado parcialmente el poder del colgante.Jonas, junto con mi hermano, las zarinas y algunos miembros de su manada, se habían establecido en Siderium. Me asombró ver lo bien que las habían estado entrenando. La mayoría podría hacerle frente a un lobo en una lucha cuerpo a cuerpo. El tema de sus habilidades era otra cosa. Jonas no había encontrado mucho material sobre los dones de la zarinas con el que trabajar y estaba un poco perdido. El aquelarre
EliMiré el palito por cuarta vez. Dos rayas al igual que en los otros cinco que me había hecho y volví a leer por enésima vez las instrucciones. Mis manos temblaban inconscientemente. El resultado era positivo, no había duda. Recogí todo y lo tiré al cubo de la basura menos uno de los test, ese en el que ponía cinco - seis semanas. Después de que Tyler sufriera el ataque dejé de tomarme las pastillas anticonceptivas. Verlo al borde de la muerte me hizo darme cuenta de que quería todo con él y entre esas cosas estaba darle un hijo. El tema de la familia era algo delicado para Tay, él se había quedado solo cuando era todavía un niño y deseaba con todas sus fuerzas formar su propia familia. Yo, por mi parte, no estaba muy por la labor. Me había costado horrores asumir que una supuesta diosa a la que ni siquiera conocía había elegido por mí al que sería mi compañero de vida así que tener hijos y jugar a la familia feliz estaba fuera de mis posibilidades. Todos mis pensamientos se vinie