«¿Austin Collins? ¿Erick es realmente el socio de mi padre? »piensa Ashley viendo con sorpresa al alto rubio, pero al igual que él, prefirió actuar como si apenas lo estuviera conociendo.
—Mucho gusto, señor Austin, yo… soy Ashley Lewis —susurra la joven sintiéndose completamente avergonzada y apenada.
Brandon en ese momento estaba conteniendo la rabia que sentía por la bochornosa escena que su hija había acabado de protagonizar, es por eso que de inmediato se colocó delante de ella para quedar cara a cara con Austin diciéndole:
—Disculpa a mi hija, Austin. Es solo que está algo molesta porque decidí ponerle un guardaespaldas, es mi hija adorada y lo único que deseo es protegerla, me comprenderás cuando tengas hijos —dice Brandon para tratar de enmendar la inmadura forma de actuar de su hija.
Austin al escucharlo, lo que hace es sonreír mientras le da un par de palmaditas en sus hombros, justamente de la misma forma como Brandon lo había hech
Austin se encontraba sentada al lado de Ashley, es por eso que de vez en cuando se volteaba a verla pensando en la manera de llegar a ella sin que se viera forzado. Su plan consistía en que ella se enamorara perdidamente de él, sería fácil lograrlo porque cuando él se lo proponía y la situación lo ameritaba, Austin se comportaba de forma encantadora, y en este caso en específico era necesario que él desempeñara el rol del hombre perfecto, para robarle el corazón a la hija de Brandon y así, el daño sería peor cuando la destruyera junto a su padre. Entre mas alto la llevara para ver las estrellas, mas fuerte seria la caída. —¿Te gusta la cena? —pregunta Austin en susurros. Ashley se voltea para verlo respondiendo: —No esta nada mal. Aunque debo confesar que no soy fan de la carne asada —responde Ashley mientras picaba un pequeño trozo para comerlo. —Para la próxima, dime tus gustos y prepararé lo que desees—susurra el rubio en esta ocasión picando
Justamente como prometió, Austin se encargó de llevar a Ashley hasta la casa de Brandon. Durante todo el trayecto la joven iba en silencio porque sin que ella lo deseara, se sentía nerviosa por estar junto a ese hombre el cual de la noche a la mañana, comenzó a tratarla de una forma diferente a la que ella conoció desde el principio. Sin embargo, si se ponía a pensar con mayor detalle, la joven prácticamente no conocía a Austin, es por ese motivo que por el momento, él se merecía el beneficio de la duda en cuanto a su drástico cambio de personalidad.«Quizás esta es su verdadera forma de ser, y esa actitud hostil que mostró en esa ocasión en el hotel, no era realmente él. A simple vista luce como una buena persona »piensa Ashley, viendo a Austin conducir de forma serena en el camino.No obstante, la joven asiática no quería
Cuando Ashley salió del café con Austin, tuvo que soltarse de su mano porque el rubio ahora pretendía montarla en su auto. Es por eso que ella de inmediato lo impidió porque no iba a permitir que él hiciera lo que quisiera con ella. —¿Qué te pasa, Austin? ¡No puedes venir a mi trabajo y sacarme así!, además no me montaré en tu lujoso auto ¿Crees que porque eres el famoso billonario y no sé qué más, puedes hacer lo que desees conmigo? «Realmente si puedo hacer lo que desee contigo »piensa Austin, observando la pequeña escena que le estaba haciendo la joven frente a la cafetería. —Discúlpame si mi comportamiento te disgustó, Ashley. No fue mi intensión —se disculpa el rubio, con un fingido tono de voz arrepentido. La joven de cabello negro se cruza de brazos sintiendo que esas disculpas de aquel hombre no eran del todo honestas, pero a pesar de que no le creía, ella decidió aceptar sus palabras solo por el esfuer
—Yo escogeré el lugar donde quiero ir —dice Ashley con una pequeña sonrisa, mientras camina con Austin, pensando que utilizaría esta oportunidad para divertirse un poco. —Me parece bien ¿A dónde quieres ir? —A un parque de diversiones. Hay uno cerca por aquí, pero me da vergüenza ir sola. Pienso que es deprimente —comenta la pelinegra sintiéndose algo avergonzada. Austin se voltea a mirarla, viendo como la muchacha caminaba con su vista enfocada hacia el suelo. Aunque ciertamente no le interesaba en lo más mínimo lo que estuviera pensando, y estar a su lado lo encontraba una tortura, el rubio suspiró y sin más mostró interés preguntando: —¿Por qué vendrías sola? ¿Es que acaso no tienes amigos? Ashley al escuchar su pregunta niega con la cabeza, en esta ocasión Austin si se muestra algo sorprendido. —Solo he tenido un amigo, pero él se fue a estudiar a Inglaterra cuando yo era una adolescente, y desde entonces no he tenido mas con
“¿El guapísimo billonario Austin Collins tiene novia? En la tarde de este jueves se vio muy acaramelado con una joven…”“¿Cuento de cenicienta? Una simple trabajadora de un café está saliendo con el magnate automotriz y de inteligencia artificial Austin Collins. Sin importarle el que dirán el hombre iba tomado de la mano de la joven, besándola en público y ¡hasta incluso le compró varios peluches!”“¡ULTIMA HORA! La chica con quien estaba saliendo Austin Collins no es ninguna joven común y corriente, su nombre es Ashley Lewis heredera de Lewis Motors ¿Por qué trabaja en un café?”“¿Brandon Lewis es un tacaño? Según investigaciones se dice que el dueño de Lewis Motors no le da ni un centavo a su hija, la cual tuvo que recurrir a trabajos de baja categor&ia
Austin estaba en la entrada de la mansión de Brandon Lewis principalmente por Ashley, porque tenía que ponerla al tanto de lo que ocurriría en la rueda de prensa, que ya estaba planificada para mañana. En ese instante Brandon no se encontraba en su mansión, ni tampoco el resto de su familia, solamente Ashley y su servidumbre eran los que estaban allí. Es por eso que cuando él llegó, una mujer se encargó de guiarlo hasta la habitación de la pelinegra, alegando que la joven no había salido de ahí desde que todo el escándalo comenzó hace una semana. Lo primero que pasó por la mente de Austin, fue que estuvo mal el no haberse comunicado con ella durante todo ese tiempo, ahora debía buscarse una excusa para tratar de justificarse, porque lo más probable era que la joven debía estar odiándolo, por haber estado tan ausente cuando más ella lo necesitaba
Al día siguienteLos flashes de las cámaras no se detenían, la cantidad de reporteros y cámaras que se encontraban en aquella enorme habitación eran tantas, que en el fondo de su ser Austin no se esperó que sus declaraciones ante aquel escandalo les importara a tantas personas. Todos los medios de comunicación más importantes estaban presentes, mientras Austin sentado en una mesa larga era el único foco de atención. Entre tanto, su secretario y su equipo de publicidad se encontraban de pie al lado de él, como pilares viendo lo que su jefe haría a continuación. Una de las especialidades del rubio, era hablar con el público, su poder de convencimiento y desenvolvimiento ante las personas que le traían algún tipo de beneficio era nato, por lo cual él ni siquiera se molestó en preparar un di
Ashley estaba viendo la rueda de prensa desde su celular. Al principio todo iba bien incluso ella sonreía de la felicidad, al escuchar la forma como Austin la defendía ante toda la ola de odio que cayó sobre ella. Aunque no tenían demasiado tiempo conociéndose, al parecer el rubio fue lo suficientemente observador para darse cuenta de las razones del porque ella actuaba de esa forma; tanto así que la joven no podía evitar sonrojarse, porque era la primera vez que sentía que alguien comprendía sus acciones. Sin embargo, todo su agrado y admiración hacia Austin se vino abajo cuando él mintió a todo mundo diciendo que ellos tenían meses saliendo, y además que pronto se iban a casar. La conmoción que sintió Ashley fue tanta, que su celular se deslizó de sus manos mientras su boca estaba abierta de la impresión por escuchar semejantes mentiras.—&iexc