Capitulo 62: Inexplicable.
Un segundo que pasa, un minuto más.
El tiempo va transcurriendo y yo aquí en el sofá esperando a que mi cuñado salga de la habitación y me diga qué demonios está pasando con mi hermana, si mi sobrino está bien o si debo matarlo por lastimarla.
Necesito que salga y me diga que todo va a salir bien. Maldición, no conozco a Ernest desde hace mucho tiempo, pero he llegado a tenerle cierto grado de aprecio. La relación de mi hermana y mi cuñado se dio de una forma bastante extraña. Un revolcón en Vancouver terminó haciendo que mi hermana quedara embarazada. Y esta sin proponérselo, terminó trabajando en la misma empresa a la que Ernest era el director.
El resto es historia.
Ahora ambos están esperando un bebé y están todos emocionados
Capitulo 63: Ahora solo me observa. —Lo siento tanto. Lo que menos deseo es verte llorar. —Me dice mi cuñado de inmediato acercándose a mí en el sofá y pasándome un brazo por encima de mis hombros. Reconfortándome. Sin embargo, no hay nada que pueda hacerme sentir mejor con respecto a la situación que sucede con Timotheo.Maldición, el hecho de decirme que su primo también está enamorado de mí es aún más doloroso de lo que jamás imaginé.La verdad es que saber que él también siente algo por mí me duele más, pues la indiferencia, pensarme que él no sentía nada por mí me hacía sentir un poco más positiva.Sabía que la diferencia de edad era un hito en nuestros inconvenientes. Nuestra situación se circunscribía a qu
Capitulo 64: Huir. Me río de forma nerviosa por escucharle, me río porque no encuentro otra cosa que hacer. La sonrisa no me llegan los ojos, los sé, aún así, mi garganta reseca mis brazos en jarra y las manos o dándome, observó a mi cuñado como si estuviese perdido la cabeza y demonios debe de haberla perdido.¿Cómo es que me está diciendo que tengo que aceptar el compromiso que su hermano me ha ofrecido?¿Cómo demonios pretende que acepte comprometerme con un hombre que lo único que piensa que estoy con él por su dinero?Y más que nada. ¿En qué cabeza cabe que él quiera que yo acepte un compromiso que terminará en 3 semanas con una nueva posición en la inmobiliaria y su familia, pensando que ellos hoy la mujer con la cual él va a casarse y a formar una fami
Capitulo 65: Colapso. —No te atrevas a irte con él. —Me amenaza mi cuñado y esto solamente hace que el deseo de largarme de aquí se haga más fuerte.—No eres quien para decirme lo que debo o no hacer.—Nene. Sien algo te importa Timotheo, no te vayas con Floyd.—Amigo, ella ha dicho que se quiere ir conmigo. ¿Cuál es tu jodido problema?—Sabes muy bien cuál es el problema, Floyd, ella no va a irse contigo. —Mi cuñado tira de mi brazo hacia él y mi cuerpo choca con su pecho.—Suéltame ahora mismo, Ernest.El seguridad de la entrada del edificio de niños ricos entra de inmediato y observa la escena se acerca a Ernest y hablando bastante claro le pregunta si todo está bien.—Todo está bien. Malcom atiende a tu jodido trabajo. —Le respond
Capítulo 66: ¿Qué hice? —Dime por favor que con quien se ha ido Neny no ha sido el desgraciado de Floyd Lewis. —Un miedo atenazador me consume. Esto no puede estar pasando.He estado evitando que él se encuentre con ella en cualquier parte porque sé de lo que es capaz ese maldito degenerado.Por eso me enojé tanto el de las rosas, creo que precisamente por eso decidí invitarla a cenar a mi departamento, porque estaba celoso, porque necesitaba marcar. La comía maldición aún sin haber admitido en voz alta que ella me pertenecía, mi alma la reclama como suya desde hacía tiempo.La cena de mi madre obligatoria fue la que arruinó mi noche.De no haber sido porque lleve a nene hasta allá, probablemente estaríamos ahora mismo tomándonos una botella de vino.Aunque el diablo en mi cabeza me hace
Capítulo 67: Ella lo sabe. —Lo hablaremos después, Tim.—Que no me estás diciendo? —inquiero poniéndome más nervioso de lo que ya estaba.—¿Qué sucede? —Esta vez es Priscila la que se ha acercado a nosotros con los brazos en jarra y mira a mi hermano y a mí de uno al otro. —¿Qué pasa con Vicky?Ernest se queda en silencio y sube sus ojos azules hacia mí. Los dos somos prácticamente de la misma estatura y Priscila es una mujer alta y esbelta. Típico cuerpo de modelo. Y, al parecer no ha podido negar sus raíces y la altura del padre de Ernest.—O me dices qué sucede con Vicky, o yo misma voy a subir a tu apartamento y averiguar por mi cuenta. —Le amenaza Priscila.—Está bien, ya está. — Tomo el móvi
Capitulo 68: No sirve de nada si te pierdo. Después de darme una ducha caliente, me recuesto en la cama solamente con el pantalón de pijama puesto, Miro hacia el techo con el móvil sobre el pecho, esperando una señal, esperando que ella me llame. Confiando en todos los Ángeles para que ella haya llegado bien a casa. Vicky es mi única conexión con esa familia aparte de Neny.Quiero darle su espacio, quiero darle el tiempo para que asimile lo que le pedí y, más que nada, para que asimile cuanto lamento haberle ofendido.Fui por ella, fui a buscarla al apartamento de Ernest. Fui a disculparme para que comprendiera que jamás me intención fue ofenderla ni tampoco insinuar que lo único que ella quiere de mí es obtener un buen puesto en la empresa.Maldición. Al parecer todo lo que intento hacer con ella termina estando mal. Todo lo q
Capitulo 69: De igual forma moriré. —No quiero verte, lo que menos quiero es verte ahora. —Digo y cierro la llamada.Era medianoche ya. Lo más estúpido que había hecho en toda mi vida fue montarme en el carro de Floyd sabiendo que ese hombre había intentado aprovecharse de mí.Jamás pensé que mi soberbia llegaría hasta tal punto de poner en peligro mi vida con tal de que Timotheo se diera cuenta de que soy la mujer correcta para él, a pesar de nuestra diferencia de edad y a pesar de que aún nos falta vivir diferentes cosas por separado.Estoy consciente de lo que conlleva estar con un hombre que ya está realizado, que tiene un buen puesto en una empresa, que viene de una familia millonaria, que tiene un título universitario y maestrías. Sé muy bien lo que conlleva, el hecho de yo no haber terminado mi carrera
Capítulo 70: Miedo feroz. Pero me resulta tan extraño que me doy cuenta de inmediato que él no debe de estar en sus cinco cabales.Él no debe de estar en sus cinco sentidos y por eso me está diciendo estas cosas.—¿Estás tomando? —Pregunto con un nudo en la garganta. —¿Estás bebiendo?—Me he tomado un par de pastillas.—Unas pastillas. ¿Eras alérgico a ellas? ¿tienes sueño? Te escucho extraño.—Me duele la cabeza, al menos me dolía, ya no siento nada.—¿Entonces, por qué suenas como si estuvieses borracho? —Le pregunto, sin comprender por qué su voz me suena tan aterciopelada y a la vez tan ronca. Como si su lengua saborearse cada palabra antes de pronunciarla. Antes de dejarla salir.—Quizás lo estoy, no lo sé. Tal vez