Después de salir corriendo de mi casa intenté contactar con mi hermana y mi amigo, el segundo contestó mi mensaje con la dirección que le pedía a mi hermana. Conduje a través de la cuidad, espperando llegar rápidamente, sin embargo el tráfico se puso un poco más pesado después de iniciada la lluvia, por primera vez la cuidad parecía colapsar, todos los carros iban y veían de manera desenfrenada, Sofía no se escuchaba, solo la lluvia y sus sollozos cuando eso no fue suficiente la llamada se cortó.
Cinco calles antes de llegar sentí como mi corazón se detenía, llegué en 10 minutos, hasta que vi el teléfono público. Entré y la encontré tirada en el suelo arrodillada por co
Me desperté tarde, más de lo habitual, para mi sorpresa todo lo hice en tiempo récord, salí y me encontré a toda la familia de Jail reunida, solo faltaba Liam; él gracias a la zorra que lo mantiene ocupado. También, estaban mi padre y hermano, saludé a todos los presentes y me senté al lado de mi queridísima amiga. — ¿Qué pasa? — pregunté a Hall . —Tu mamá tiene algo que decir. — mi cerebro se recalentamiento y explotó cuando mi madre dijo las terrible palabras. —Familia, estoy embarazada, Jail y yo estamoss esperando un bebé. — No me lo esperaba. Me quemé por completo con el sorbo que estaba tomando de té el sorbo hirviendo de té que me metí en la boca y tuve que escupir, me acerqué por una servilleta a la mesa y limpié el reguero. — ¿ Sofi, estás bien? — Mamá…—me quedé sin palabras hasta que dije lo más común. —Felicidades. — La corneta del bus sonó y salí corriendo de mi casa. El colegio no es
Amo a alguien con todo mi corazónLuke........Me levanté y después de correr y sacar a Kuso fui directo la floristería, le envié un arreglo a Sofía, para demostrarle mi apoyo, el tennis siempre ha sido demasiado importante para ella, sobre todo, su pasión. El club estaba abarrotado, es la semana del deporte y todos los que reciben clases de algún deporte, música o baile reciben la oportunidad de presentarse ante sus familiares y amigos, parquear ahí pudo haber sido una tortura sino hubiese contestado la llamada de mi pequeña novia.—¡Hola campeona! Estoy parqueando, ya llego.—Gracias por las flores, están hermosas.—¿Quedé bien con el color?—Blanco, mi favorito. ¿En dónde parqueas?—¿
Luke se acercó con una sonrisa y besó mi rostro, luego preguntó: —¿Me das un beso?— No. Vamos tarde—le recordé antes de bajar del auto.Entré al aula y Luke no dudo en molestarme.— ¿Se te pegaron las cobijas?— ¿Y a usted, director?— Tenía que atender a unos padres — Negué con la cabeza. — Clase, vamos de paseo.— Tenemos compañero nuevo. —dijo unos de mis compañeros, Luke le miró y tragó duro.—Tú eres Hernán — Dijo mi novio con recelo, me observó y sonrió. — Él está en la otra sección. La secretaria se debió haber equivocado.— No, Sofía está aquí y es mi tutora por lo tanto estamos en la misma sección.—Hernán soy p&e
—Dios, más rápido.— Sofía que bien te sientes.—Agh... — Llegamos juntos al orgasmo.Realmente he escuchado a demasiadas personas decir que el sexo es algo grandioso y según mi teoría hay dos clases.La clase "A": sexo desenfrenado, salvaje, rico y candente; esa clase de sexo es el malo, sudas y lo sientes dentro de ti y a pesar de que estás sintiendo descargas recorrer tu cuerpo quieres que esté teniendo sexo con todo tu cuerpo no con tu vagina, al final te sientes como un perro cogido.La clase "B": es la que te hace sentir algo cómoda, pero de una forma u otra disfrutas, no entiendo como eso logra complacer.Hay algo que marca la diferencia, las ganas de hacerte sentir, vibrar que tenga tu pareja, que él quiera hacerlo contigo o por él hace una diferencia, eso te convierte en depósito de sexo o
Todos en la sala me veían asustados, pero, no conseguía formular palabra. Mi madre se acercó furiosa a mí gritó enojada:— ¡Qué patética eres! ¿Te das cuenta de que eres tan joven que tu bebé y el mío probablemente se críen juntos? — Observé a Hall en busca de una señal de ayuda y se dedicó a ignorarme, en ese momento te das cuenta de que perdonarla significó llegar al punto en que solo te utiliza, y es lo único que le importa, tu sudor, lágrimas y trabajo se fueron a la basura por y para alguien a quien no le importas. — ¿QUÉ VAS A HACER?—Sofía, déjale hablar. —Gritó Luke. —¿Es eso cierto, Sofí? —Se acercó a mí e hizo señas con las manos para sacarme de mi asombro. —Hey, Sofía.—Yo me voy a ir al
Decidí quedarme con mi padre. Me evitaba ver a un montón de personas que no eran de mi agrado, y sabía que él no les permitiría la entrada, a diferencia de mi madre y sus múltiples intervenciones. Además, todo es su culpa, ella se casó con ese hombre y eligió a su familia, no a mí. Es lo que más claro me ha quedado de esta lección y lo más difícil era tener que dejar de Lado a Luke, porque no quería estar cerca de su familia. Pasé la semana encerrada en mi habitación.—Hola — Me volteé y me encontré con Luke, traía rosas color rosado . —¿Quieres salir conmigo?— ¿Puedo ir a tu casa? —pregunté y él asintió. —Por unos días...— Sí.
Llevaba una semana observando desde lejos, al parecer todos estaban perfectamente bien, hoy sábado decidí presentarme a la fiesta del niño. Me puse vestido negro pegado al cuerpo tacones dorados y accesorios de oro, Luke me los había regalado antes de partir o al menos eso imagino porque no tenía colilla.— Buenas noches ¿la fiesta de los Caine?— Sofía. — Asentí.— Soy Pablo — Dijo con alegría.— Me alegra verte así con un puesto de bajo nivel para tu gusto.— Sof... —Le di una cachetada.— ¿En dónde es la fiesta? —corté todo intento de conversación para hacerle saber que no era grato para mí.— La tercera puerta, aquí, tu antifaz.Me fui sin agradecer y me acerqué a la puerta todos lucían amplios antifaces negros y el mío er
Sofía recién despertaba y decidió observar como Arturo se ponía la camisa y la abotonaba.— Buen día — Dijo Arturo.— Buen día — Se sentó sobre la cama y comenzó a arreglarse.— ¿Sofá, a dónde vas?—A mi casa, en realidad al hotel.— Deberías quedarte — Sofía negó inmediatamente. — El desayuno está en el sartén, apaga todo antes de irte y si no lo haces sería agradable.— Son las seis de la mañana. — refunfuñó y terminó de vestirse. — Déjame en casa de mis padres.El joven rodó sobre su cama y fue en busca de ropa y tomó una corta ducha mientras Sofía comía un poco de desayuno, era completamente difícil y le encantaba aquello para &eacut