NickEs justo lo que está haciendo ahora, quiere que me centre en Carol, en lo que pasamos juntos, así olvidaré un momento que estoy aquí metido por culpa de él y de Maximiliano.Por patético que parezca, puedo ver la esperanza en el rostro de Gregor, como si hubiéramos regresado en el tiempo y somos esos mismos chicos que jugaban y platicaban juntos, esos amigos que se apoyaban sin importar las circunstancias. No me afecta contarle esta anécdota, y como Gregor dijo, tampoco tiene algo que perder, aunque si este es un intento de redención, no le funcionará.—A Sharon le cae mal Carol desde que la conoció, en aquel entonces mi novia todavía no era tan conocida —sonrío de solo recordarlo—. No imaginas lo que hizo para asustar a Sharon.Se voltea a verme como si no se creyera que en verdad esté hablando con él, por un instante se queda sorprendido, pero cambia el semblante de inmediato y sigue con la conversación ayudándome a no pensar tanto en lo que pasa.—Por favor dime que la avergo
CarolYa han pasado varias semanas, siento como si todo este tiempo hubiera estado muerta en vida.Tocan la puerta, puedo imaginar quién es, desde que Nick desapareció parece que el edificio de la MOH se ha convertido en mi nuevo hogar.—Pase —le indico, cansada, arreglando un poco el escritorio.—Hola, Carol.Es Daniel, últimamente nuestra confianza ha crecido, saca una bola transparente que me permite ver el contenido. Es una bala, no entiendo cómo nos ayuda esto, seguro Nick intentó defenderse.—Es de un proveedor distinguido, investigamos al chico que las vende, adivina qué nos dijo.—Soy toda oídos.—Es distribuidor, pero solo va para hacer encargos a la mafia italiana, y a la mafia rusa.Parece que algo está haciendo click dentro de mi cerebro, los últimos meses resumidos a una velocidad impresionante.—Maximiliano Novikov, ese maldito es el responsable.—Tardaremos un día en llegar a Moscú, pero es entrar en terreno peligroso, Maximiliano sabrá que estamos ahí, acabará con noso
NickA más de un mes de haber «desaparecido» Estoy convencido de que hay una búsqueda, sé que Carol está haciendo todo lo posible por encontrarme.Los días aquí se han vuelto un verdadero infierno, cada día que pasa es uno en donde pienso que sería mejor rendirme, pedirle que tome la pistola, jale el gatillo y termine con esto de una buena vez.En mis momentos de debilidad la recuerdo, su voz, su sonrisa y la forma en que me hace sentir, también me recuerdo a mí mismo que soy Nick Lancaster, no hay nada que se me escape de las manos, no hay nada que no pueda hacer, y así me tome otro mes, saldré de aquí.Ahora que ha vuelto los golpes continúan.—¿Vienes por la segunda ronda de golpes? No me sorprende que te hayas cansado, siempre has sido débil.—Muy valiente considerando que tú estás atado y yo estoy libre para hacer esto.Suelta de nuevo un puñetazo que causa que más sangre salga de mi nariz, da otro y otro y no hay nada que pueda hacer, tiene razón, soy yo quién no está en condici
CarolA la mañana siguiente me dieron el alta, pero hubo un par de asuntos que tuve que arreglar antes de irme.—¿Muerta? —pregunté, confundida.—Lo siento, señorita Green, le aseguro que ha sido un error, una practicante debió mezclar la información.—Información bastante importante, me reportaron como muerta.—Sé que es algo delicado, pero ya está arreglado.Me quedo esperando sentada en la camilla, por suerte Mark entra, estoy a nada de irme de aquí y lo agradezco, en serio odio los hospitales. Cuando Mark entra le cuento los detalles, pero dice que él nunca vino a verme.Ambos intentamos pensar quién pudo ser. Mi expresión se suaviza cuando la primera teoría llega a mi mente con todo el sentido del mundo.—Esto tiene que ver con Novikov.—¿Qué?—No creo que haya sido él la persona que vino, no se arriesgaría a tanto, debió enviar a alguien para saber la gravedad del accidente, si alguien le informó lo que pasó a Nick entonces él debe pensar que estoy muerta —algo se ilumina en mi
CarolReúno las fuerzas para abrir la puerta y cuando lo hago me encuentro en un pasillo vacío, busco el primer lugar que encuentro, no me rindo, él podría estar cerca.Continúo caminando acercándome a escuchar en cada puerta en espera de una señal, repito el procedimiento con cada una de ellas. Escucho voces a lo lejos, me asomo por las escaleras para ver a guardias en el último piso riéndose ya que nada les afecta.Malditos.Estoy pendiente todo el tiempo de que no me miren y subo con cautela, pero estoy más al pendiente de ellos que no miro en donde piso y tropiezo haciendo mucho ruido, imposible pasar desapercibida, los guardias se apresuran a subir en cuanto escuchan el ruido, intento no entrar en pánico; ya que estoy cerca entro al primer cuarto que encuentro y para mi desgracia es un baño, por si fuera poco, hay un hombre duchándose, entro a la regadera con él y tapo su boca.—Busquen —escucho a uno decir.El hombre está tan sorprendido que ni siquiera se mueve, solo me mira co
Carol—Solo contemplo su belleza. En realidad, ustedes son la definición de amor ¿No? Mira todo lo que tuvo que hacer para estar hoy aquí, tendré que hacer pagar a Joshua por su gran error, me dijo que estaba muerta.—Menos mal que ya estoy aquí. Solo déjanos ir y consideraremos no torturarte demasiado.—Nick, admito que tu gusto en chicas ha ido mejorando, tienes a toda una mujer a tu lado.Carga el arma provocando que tantos los sentidos de alerta de Nick como los míos se activen.—Dame una buena razón para no acabar con tu chica como tú hiciste con mi esposa.—Dispárame a mí, pero déjala ir.—Qué curioso que me pidas eso cuando tú no tuviste piedad al jalar el gatillo y acabar con la vida de Kira. Si mato a Carol estaríamos a mano, ¿no?—Sí te atreves a ponerle una mano encima—¿Qué harás? —interrumpe —no estás en condiciones de amenazar, Nick.—Me quedaré en su lugar.—Nick, no.Intervengo, pero Novikov me indica que me mantenga callada.—Mira, el punto aquí es hacer sufrir a algu
CarolMi corazón amenaza con salirse de mi pecho como no le den una explicación más amplia que solo «te iba a asesinar»Yo era todo lo que Tamara amaba en este mundo, no existe algún motivo que la haya obligado a lastimarme, nunca lo hizo y estoy segura de que, si siguiera con vida, nunca lo haría.—¿De qué estás hablando? era mi tía, hablamos de Tamara, ella nunca me hubiera hecho daño.—Sé que tratas de convencerte de eso, pero en realidad lo iba a hacer.—¿Cómo lo sabes?Antes de que pueda responder la doctora entra.—Lo siento, tengo que llevarme al señor Lancaster para los estudios y volveremos con usted, señorita Green.—Creí que conmigo solo se tenía que revisar la herida y volver a coser.—Sé que la adrenalina del momento no le permitió darse cuenta, pero llegó con una herida grave en la pierna y una nueva herida cerca de las costillas.¿Qué? ¿Y cómo es que no noté esa herida? Nick sale de la habitación dejándome sola.Hay tantos recuerdos que llegan a mi mente que me es difíc
CarolAl salir regresamos al mismo sitio lleno de edificios y más autos en la carretera.—El primer lugar en donde buscarán será tu casa o la mía —hablo.—Podríamos quedarnos en un hotel.—¿En cualquiera?—No, para casos como estos la MOH tiene un lugar, el hotel está abierto en teoría para cualquier persona, aunque siempre hay habitaciones disponibles para nosotros y gran parte de las personas que se hospedan ahí son miembros de la organización, queda poco para llegar, no creo que Maximiliano nos busque ahí.No podremos regresar hasta que tengamos una estrategia definida, nos estarán esperando en la sede de la MOH, en la mansión de Nick, en mi casa, cualquier lugar en el que ya hayamos estado se vuelve un blanco fácil, un lugar en donde sus hombres esperarán por nosotros.Bajamos del auto, uno de los hombres se acerca para darnos una toalla.—Bienvenido señor y señora Lancaster.Vamos directo a nuestra habitación y lo primero que hago es buscar ropa, necesito quitarme la que traigo c