Apolo se dio la vuelta hacia la puerta principal, y con la mano le hizo señas a Merida para que lo siguiera, ella puso los ojos en blanco, le dio algunos sorbos más a su café ya frío, y tiró todo lo que quedaba en el fregadero, dejando la taza limpia en el escurridor, se dio la vuelta para seguir a Apolo.Saliendo de la casa se frenó al llegar al porche, observando la luz del día, desvío la vista para ver la punta de la cima entre los árboles desde ese punto bajo.La joven respiro hondo, cerrando los ojos un momento, incapaz de aburrirse del aroma a madera y pino, sintiendo como se le eriza la piel ante el aire fresco de la mañana, pero no le molestó, al contrario le encantaba la sensación.Visualizó que la casa estaba rodeada de árboles de gruesos troncos, y el bosque a los lejos, el suelo oscuro bajo las copas de los árboles. De repente le apetece mucho caminar, le gustaría recorrer aquel bosque durante horas, así evitaría tener que ver y oír a alguien más.La plataforma de madera q
Hola_ dijo Nikolas mirándola, parecía divertido, y ella se detuvo enderezandose_ No pares_ continuó él.La camiseta azul oscuro resaltaba el color de sus ojos, y el sombrero de vaquero retenía su rubio cabello. Sé parecía mucho a su hermano, excepto que el cabello de Apolo era oscuro. Pensó ella._ Puede enojar a un santo, lo sé_ dijo Nikolas_ Por qué crees que colgué el sacó de boxear aquí?_ Nikolas_ dijo Merida mientras ambos preparaban el desayuno_ Por qué no hay fotos de tu hermana en toda la casa?_ Apolo las recogió todas cuando supo que tenía que traerte aquí, el doctor así lo sugirió, dijo algo referente a que tú proceso debería ser lento o corrias con el riesgo de nunca recuperar la memoria_ dijo él encogiendo de hombros._ Por eso me odias tanto? _ Preguntó la joven._ No te odio a ti Merida, odiaba la idea de que fuiste la última en ver a Zoe con vida y no pudieras decirme qué pasó_ dijo Nikolas con los ojos humedecidos_ Pero Apolo me hizo recapacitar. Y lamento haberme co
El cuerpo de Apolo comenzó a calentarse, sosteniéndole la mirada un momento, y vio como ella humedecía sus rosados labios con la lengua, haciendo que la respiración de él se entrecortara, él entonces se levantó y se encaminó para continúar con su trabajo.Merida era su responsabilidad, no podía pensar en ella de otra manera que no fuera en familia. Pensó Apolo mientras se alejaba de ella.Después de preparar el desayuno Merida decidió excursionar un poco, y también se moría de ganas de probar la cámara que le había regalado Apolo, y estar sola.Antes de salir tomó unos de los rifles y su mochila. Siguió el sendero que recorrió con Apolo hacia el río, aliviada de no haberse perdido. Bajó las rocas hacia el pequeño pozo. Estaba vacío, sin gente, sin ruido. Perfecto. Pensó la joven.Con manos temblorosas sacó la cámara de su bolso, y por un momento no supo que hacer. Las lágrimas vinieron a sus ojos y sacudió la cabeza para alejarlas. Lo intento nuevamente, pero esta vez se tomó su tiemp
Entonces Merida ya no pudo contenerse, comenzó a llorar como tanta falta le hacía, pasó sus brazos por la cintura de Apolo, él la sostuvo como si de no hacerlo ella fuera a caerse, y luego sintió sus labios en la coronilla de su cabeza._ Lo siento_ dijo ella.La calidez del cuerpo de Apolo comenzaba a entrar en la piel de la joven, mientras sus lágrimas colgaban en sus pestañas, y repentinamente ella sintió una urgencia de aferrarse a él, saboreando su olor embriagador de las montañas, intentó alejarse de él, pero él la detuvo presionándola más contra su pecho, mientras cerraba los ojos con fuerza gimiendo como si sintiera dolor, y ella solo tuvo un momento para tomar un rápido aliento antes de que la boca de cubra la suya, soltando un gemido ante el dulce dolor de su corazón, hinchandose mientras él profundizaba el beso, el calor de su lengua se arremolinaba en su vientre, y su sabor comenzaba a llenarle todo el cuerpo, y luego de un momento ella subió la mano tímidamente hacia s
Merida:Llegamos al Restaurante del pueblo donde se suponía que nos íbamos a encontrar con el abogado que estaba interesado en contactar conmigo, Apolo no decía nada desde que hicimos el amor en su coche, para mí fue algo realmente liberador. Él me hace sentir viva de nuevo y que de pronto toda la mierda de mi pasado deje de importarme. Pero en el momento en que nuestros cuerpos fueron sancionados vi en sus ojos el arrepentimiento, sé que me tiene en su mente como su responsabilidad pero estoy igual de segura que me desea tanto como yo lo deseo a él. Y no me importa cuantas veces se arrepienta de estar conmigo, solo necesito seguir en sus brazos para no sentirme pérdida.Apolo se dirige hasta una mesa y nos sentamos frente a frente, una chica muy bonita con el cabello negro lo saluda, batiendo las pestañas de forma exagerada casi cómica para llamar su atención, pero él no se la presta, sigue mirando el menú, y luego se lo devuelve sin ni siquiera dedicarle una mirada._ Hola Apolo_ di
Para Merida Vicenzo "Urgente"Merida depósito el sobre en la cama y guardo la carpeta con los otros documentos que le había dado el abogado Kendall, se dirigió al baño para tomar una ducha, recordó la forma en la que Apolo le había hecho el amor y lo bien que se había sentido entre sus brazos, mientras el agua caía por su cuerpo, imaginaba las manos de aquel hombre con mirada azul sobre su cuerpo, pero luego la magia que hubo entre ellos paso de ser blanca a negra de un momento a otro. Como podia Apolo pensar que ella estuviera fingiendo su estado, y hasta llegar a sospechar de ella.Seguramente en estos momentos estaría pensando lo peor de ella, y yo como una tonta aún añorando su cuerpo y sus caricias. Pensó Merida furiosa y restregó su cuerpo como si quisiera borrar lo acontecido con Apolo.Ingreso a la habitación y termino de arreglarse se puso unos jeans y una camisa blanca que se le ceñía al cuerpo, no tenía intención de salir así que decidió quedarse descalza, permanecería el r
_ Señor Akakios _ dijo él médico _ La señorita Vicenzo pregunta por usted.Apolo se levantó rápidamente de la silla donde se encontraba en la sala de espera del hospital._ Cuando reaccionó doctor? Esta bien? Cuando podemos irnos? _ comenzó él desesperado._ Calma señor Akakios _ dijo él doctor haciéndole un gesto con la mano para que se tranquilizara _ La señorita está bien, está muy lúcida, lo que es buena señal, su mente estaba procesando todo la información que le había llegado precipitadamente y necesitaba un descanso. Comprende? Como si de una computadora se tratase necesitaba desconectarse para poder actualizarse. Nosé si me explico?_ Si doctor entiendo! ahora puedo verla? _ dijo él ignorando las palabras del doctor.Él médico asintió y Apolo salió como un torbellino hacia la habitación donde se encontraba Merida, apenas abrió la puerta, se encontró con los preciosos ojos violetas de la chica, y él se sintió aliviado al verla consciente nuevamente y sin pensarlo sin dirigió a
El sobre de papel blanco, que venía dentro, era una carta, en ella se podía leer lo siguiente:"Querida Merida espero que cuando esta carta llegue a tus manos, te pongas en contacto conmigo inmediatamente.No sé que conllevó a que tú y Zoe huyeran prácticamente de Busan, dejando todo tirado e incluso decepcionando la confianza que yo puse en ambas, y aunque sospecho que pudo ser me gustaría escucharlo de tu boca, he intentado de contactar a Zoe sin éxito alguno espero contigo tenga más suerte. Por favor ponte en contacto conmigo cuanto antes necesito saber qué estás bien. Lee Joon ha venido muchas veces a preguntar por ti, el pobre chico tuvo un accidente tratando de ubicarte y casi muere, ha sufrido mucho por tu partida, cree que tú lo abandonaste y te fuiste con otro hombre. Todo aquí está muy extraño y confuso. Por favor aparece pronto.P.D: Tengo tú cámara fotográfica en mi poder, es un equipo muy costoso y dudo que hayas querido dejarlo aquí propósitos.Billy Ferguson._ Lee Joon