Por la mañana escucho a mi princesa llorar y antes de levantarme Sam la trae en los brazos.
—Chaparra, alguien se despertó muy risueña hoy, parece que sabe que es un día especial porque por fin sus papas se casaran por la iglesia.
Me acerco a ellos y Caroline observa a su papá con curiosidad, él se acerca para darle un beso y ella lo agarra del pelo.
—Definitivamente es igualita a su madre.
Bajamos a desayunar muy risueños y mis padrinos nos esperan para desayunar muy emocionados.
—Hija no puedo creer que por fin hoy se van a casar, estoy tan feliz.
Sam toma de la mano a mi madrina y la besa.
—Gracias mamá por tenerme tanta paciencia, se que lo hice sufrir mucho con mi ausencia y me arrepiento tanto.
Mi madrina se limpia las lágrimas .
—No hijo no te preocupes, tú necesitabas tiempo y nosotros lo entendíamos perfect
5 años antes...—Por favor Emily, esperemos un poco más, debe estar a punto de llegar.—Camila, no entiendo para que quieres verlo, te estás haciendo mucho daño.—Son los últimos minutos de soltero que lo voy a ver, además en estos días me voy a la academía.—Bonito recuerdo te vas a llevar, sí lo vez el día de su boda.No puedo evitar suspirar, hoy se casa Sam Walker, el amor de mi vida, desde que tengo uso de razón estoy enamorada de él, aunque él ni si quiera voltea a verme, cuando cumplí mis 15 años, su madre, que es mi madrina, lo obligo a bailar conmigo y no dejo de hacerme mala cara toda noche, casi al final de la fiesta me dio un beso, mi primer beso, yo estaba tan feliz y él se burlo de mi, dijo que no tenía ninguna duda de que seguía siendo una niña inexperta, aún recuerdo como lloré, mi madrina no sabía como calmarme, la pobre pensó que no me había gustado la fiesta que me preparo con tanto cariño.<
—Sam ¿qué haces aquí?—Yo también quisiera saberlo.Se acerca a mí y me sorprende cuando empieza a besarme, aunque sé que está mal responderle porque esta recién casado, no puedo rechazarlo, he soñado tanto con este momento, me quita la pijama poco a poco y yo estoy temblando por lo que me hace sentir, se quita la camisa y me quedo sin respiración, siempre lo habia visto sin camisa, pero nunca me imaginé que algún día pudiera tenerlo tan cerca, empiezo a acariciar su cuerpo sintiendo el calor de su piel en mis manos, me siento tan ansiosa por seguirlo tocando y por besarlo que cuando menos espero, estamos completamente desnudos, no quiero pensar, porque se que estoy haciendo algo malo, y aunque mi mente me dice que lo detenga cuando se acomoda en medio de mis piernas, me pierdo por completo y lo acerco a mí para sentirlo más cerca; se desliza poco a poco dentro de mí y cuando estoy a punto de gritar me besa con desesperación, se queda quieto por un mome
Tiempo actual...Hoy me toca turno de tarde, así que me levanto muy temprano para desayunar con mis padrinos, desde que regresé de la academia trato de pasar todo el tiempo posible con ellos, los noto bastante tristes, aunque Sam les llama muy seguido, sé que no es lo mismo, hace 3 años que renunció al ejército, y se fue a Nevada a trabajar en un rancho, yo entiendo que es doloroso para él regresar, pero mis padrinos lo necesitan.—Madrina, buenos días y mi padrino ¿dónde está?—Buenos días hija, se fue temprano, al parecer hay un problema con un toro, parece que está enfermo y Trevor tiene miedo que contagie a los demás, ya podrás imaginarte a tú padrino esta muy preocupado.—Mi padrino ya debería descansar, últimamente lo noto muy cansado.—Si yo también, pero dice que no puede dejarle a Trevor y a los chicos todo el trabajo.Se queda pensativa por un momento.—Si tan sólo Sam regresara, no entiendo como esta ad
Cierro la llave del jacuzzi y me doy una ducha rápida, compro comida para llevar y tomo un taxi para el hospital.Cuando entro a la habitación, Sam se sorprende.—¿Qué haces aquí? Pensé que estarías con Victor.—Sam, vine a acompañarte y eso haré, Victor me llevo al hotel porque no encontraba la dirección, pero eso es todo.—¿Mucha amabilidad de su parte no?Cambio de tema para distraerlo.—Traje comida ¿quieres?—Si, tengo hambre, muy buen uso de la comida para distraerme.—Es que eres muy terco.—Un poco sí, aliméntame pues antes que me ponga más terco.Yo le sonrío y me siento a su lado, empezamos a comer mientras no dejo de pensar en que no ha cambiado nada su carácter, sigue igual de mandón y renegado que siempre.—¿Qué tanto piensas?—Pienso que sigues igual de renegado y mandón.El sonríe.—Bueno hay cosas que nunca cambian.—Por cierto, Victor me invitó a conocer Las Vegas e
—¿De verdad piensas casarte con Marson?—Creo que es lo mejor que puedo hacer.—¿Porqué?—No lo sé Sam, creo que me ama y podría hacerme feliz.—¿Lo amas?Si el supiera a quién le pertenece mi corazón.—No, pero creo que podría llegar a amarlo.El sonríe con amargura y se pasa los dedos por el cabello con frustración.—Camila tenemos que hablar, pero ahora no estoy de humor.Sale de la habitación echo una fiera, mientras yo termino de preparar mi maleta y me pongo la pijama, me siento tan triste que quisiera marcarle a mi madre para saludar a Mathew, pero es bastante tarde, así que mejor llegando a Jefferson la llamo.Sam aún no llega y ya pasa de la media noche, no sé en que momento me quedo dormida, despierto muy temprano y lo veo ahí sentado en el
Al llegar con mis padrinos se sorpenden mucho al ver a Wendy.—Buenas noches señores Walker, Sam muy amablemente me invitó a cenar con ustedes, espero que no les moleste.Mi madrina que es muy amable le sonríe, pero mi padrino que no disimula lo que siente, le tuerce la boca, él y Sam son tan parecidos, no pueden ocultar su mal carácter.—Hija ¿qué hacía Brad con las sirenas de la patrulla prendidas?—Ya sabes como es padrino, solo quería llamar la atención.—Por un momento me preocupe.Estamos por empezar a cenar cuando suena mi teléfono y es Brad, así que pido una disculpa y me levanto para ir a contestarle.—¿Qué pasa Brad?—Al parecer Robert tiene un largo historial, la policía de Chicago lo esta buscando por tráfico de armas.—¿Qué?<
—¿Marson qué haces aquí?—Pues venía a saludarte, pero veo que no es un buen momento.—No, no es eso, solo me sorprendiste.Me pongo de pie y le doy un abrazo para saludarlo.—Me da gusto verte.—A mi también, sigues igual de hermosa, ¿crees que podamos hablar por un momento?—Claro, Brad me recoges en la cafetería para la ronda por favor.—Si Cam, en un rato paso por ti.Salimos y me subo en su coche para ir a la cafetería, al llegar nos acomodamos en una mesa cerca de la puerta, yo pido una limonada y el pide una cerveza.—¿Porqué no me avisaste que vendrías?—La última vez que te llame, Sam me dejo muy claro que era tu esposo, así que preferí venir sin avisar, quería que habláramos en persona de tu matrimonio.—Respecto a e
Me voy a saludar a mis padrinos y los encuentro muy contentos platicando con Marson.—Hola buenos días, Marson que sorpresa encontrarte aquí.—La otra vez no pude pasar a saludar, así que como tengo unos dias libres aproveche para darme una vuelta.Se levanta y me da un abrazo, justo en ese momento viene entrando Sam que no puede disimular su sorpresa.—Sam hermano, espero que no te moleste, vine a pasar unos días con ustedes.Sam voltea a verme.—No Marson, me da gusto verte, sabes que siempre eres bienvenido.Escucho el claxón de la patrulla.—Bueno yo tengo que irme, nos vemos más tarde.Le doy un beso a Sam y me voy.—Hola Cam ¿porqué traes esa cara?—Marson acaba de llegar a pasar unos días.—¿Qué?—Si, como lo oyes.—Cam, eso me huele