Alexandra miró a Viktor dormir por un par de horas, se sentía como en un sueño, finalmente estaba en casa y si las cosas finalmente seguian un rumbo tranquilo, podría tener tranquilidad, pero lo que realmente la atormentaba en aquel momento, era la fecha, era el día en que su madre había muerto, y por más de dos años no había podido visitar su tumba, la ultima vez había sido en compañía de Nikolay, y despues de aquello las cosas simplemente se habían ido en picada, pero se sentía como si toda la tranquilidad a su alrededor no fuera merecida.
Como si en cualquier momento todo podría irse nuevamente a la mierda con una simple acción fuera de lugar, como si en cualquier momento su vida podría nuevamente mancharse de sangre.
acarició el rostro de Viktor mientras pensaba en las posibilidades, si él nunca hubiera aprecido en su vida...tantas co
Alexandra jadeó de sorpresa y placer al sentir la erección de Viktor contra su coño humedo, por un segundo, el pánico estuvo a punto de apoderarse de ella, los recuerdos de su secuestro hallanando su mente, pero la mirada tierna en los ojos de Viktor la mantuvieron firme en el encuentro, una vez que se deslizó por completo en su interior, no pudo evitar jadear, se sentía llena y dispuesta, aunque sabiendo que Viktor no podría hacer demasiado esfuerxo en esta ocasión, movió las caderas en busqueda del placer. - Oh por Dios - gruñó el hombre contra su oído, mientras depositaba suaves besos en su cuello - Muero por ti, dolcezza - aseguró este leantandose lo suficiente para besar su rostro con ternura - Te amo - susurró mirándola a los ojos, Alexandra se sentía al borde de las lagrimas, pero las sensaciones en su cuerpo no le permitieron concentrarse en las emociones Gimió a la vez que Viktor aceleró ligeramente el ritmo, justo antes de incorporarse y tomar sus piernas p
Después del desayuno, Viktor se sentía extrañamanete asustado, preferiría enfrentarse a hombres armados antes que a su futuro suegro y a una vida entera de estar en traje y negocios, especialmente teniendo en cuenta que no tenía ni idea de como sería tratar con el hombre, se sentía como un adolescente de nuevo, pero mierda, por Alexandra haría lo que fuera necesario.- Estuve pensando en su propuesta - dijo finalmente, el hombre lo miró con curiosidad y dejó su periodico a un lado de forma elegante, centrando su atención complentamente en él, Viktor tomó una respiración profunda - Quiero darle a su hija la mejor vida posible, y bueno... no solo quiero las acciones de mi padre- Bien, en ese caso, tendremos que ir de comparas - dice el hombre con una sonrisa - dile a Alexandra que nos acompañe, necesitarás un par de trajes, y...¿Qué tanto s
Embarazada, Alexandra estaba...embarazada.La noticia los tomó a todos por sorpresa, Viktor parecía a punto de desmayarse, pero la sonrisa en s rostro parecía genuina y eso era suficiente para Alexandra, que había sentido curiosidad al verse frente al espejo durante su llegada, si bien su periodo había estado llegando durante el ultimo mes, este había sido escaso y tendría que haber vuelto durante aquella semana, por lo que cuando se vio frente al espejo la noche de su llegada, no pudo evitar fruncir el ceño al verse a medio lado, era sutil, casi inperceptible, y ella lo había atribuido a la imflamación usual que sentía con el periodo, pero había algo diferente, tenía una...sensación diferente.Así que había pedido a una de las empleadas que consiguiera una prueba de embarazo y la había tomado, sintiendose ansiosa y pensando si debía o no contar
Viktor staba en shock, una vez que se había enterad del embarazo de Alexandra, estaba en las nubes, y mierda, no estaba seguro de si era algo bueno o algo malo, calro que estaba feliz, pero también aterrado como la mierda, sí, habían hablado de una familia, pero las cosas se estaban moviendo mucho más rapido de lo que el pensaba, nunca había considerado la paternidad tan seriamente, y ahora esta le había tocado las puertasDos sías después de la noticia, había id a hacerle los examenes correspondientes a Alexandra, y allí estaaba, en el monitor frente a él, su hijo- Bueno, parece que todo está en orden - aseguró la doctora mientras marcaba datos en el telado a su lado- ¿Aún no se puede ver si es niño o niña? -preguntó Alexandra con una sonrisa, Viktor miró a la doctora y tragó con fuerza, pero la mujer negó
Alexandra se miró en el espero por mimlesima vez en el día, habían pasado dos semana desde que se había enterado de su embarazo, y seguía sin poder creerlo, si bien su periodo había sido constante, el ultimo mes se había sorprendido por lo corto que había sido, pero el general, este nunca faltó, la doctora le había indicado que a algunas mujeres les pasaba y era completamente normal, por lo que se relajó, ahora, no dejaba de mirarse en el espejo, intentando encontrar esos cambios que se supone pronto aparecerían.De momento, su vientre seguía sin mostrar demasiadas señales de embarazo, en el peor de los casos, parecía inflamada, como siempre que veía su periodo, pero no mucho, mierda, si realmente tenía veinte semanas, ni siquiera había paso por la etapa de las nauseas y los malestares matutinos, aún le costaba creerlo,pero a medida que pa
Viktor observó a Alexandra mientras se paseaba desnuda frente al espejo, su vientre finalmente había empezado a notarse, y él estaba sudando frío mientras mil escenarios horribles empezaban a cruzar por su mente, no podía evitar sentirse asustado ante la idea de la paternidad, había estado leyendo sobre todo lo que implicaba el embarazo y por todo por lo que Alexandra tendría que pasar para dar a luz, él había visto cosas horribles, y había hecho incluso más, pero luego de encontrar un video de lo que sucedía durante el parto, había tenido un par de pesadillas al respecto.Pero en aquel momento, viendo la sonrisa radiante de Alexandra mientras sostenía su aún pequeño pero abultado vientre frente al espejo, no pudo evitar sentirse feliz, algo que no pensó que sentiría nunca en su vida, hasta que la había conocido a ella.- Oh, Viktor
Alexandra se levantó molesta y se dispuso a retirarse, se negaba a dejar cualquier cosa a cualquiera, era su madre, no le importaba si las habían intercambiado al nacer, no era su responsabilidad, al contrario, era la victima, y se negaba a entregar lo unico que tenía de su pasado.- Te dije que no colaboraría, pequeña zorra - se quejó Klaus en ruso, con un tono despectivo que consiguió irritarla, tomó su bolso y sin pensarlo demasiado, golpeó al hombre en la cabeza, duro, tomandolos a los tres por sorpresa.Klaus se levantó irancundo y la tomó por el brazo con fuerza,, los demás comensales del café gritaron asustados, Nikolay y Viktor tambien se pusieron de pie, listos para pelear- Sueltala - gruñó Viktor, en un movimiento casi instintivo Alexandra lo vio buscar un arma en su costado, pero sabía bien que ya no tenía una y parec&iac
Viktor entró al quirofano y de inmediato se acercó a Alexandra, que lloraba en silencio mientras intentaba mantener la compostura, pero al verlo, dejó escapar un quejido de alivio- Estoy aquí - aseguró, tomando su mano y besando su frente - todo va a estar bien - prometió, aunque sabía que era una mentira piadosa, no podía pormeterle que las cosas estarían bien en esta ocasiín, la situación no estaba bajo su control y sabía tan bien como ella que su hijo podría morir, un parto tam prematuro, er completamente sorpresivo y peligroso dadas las circunstancias.- Tengo miedo, Viktor - dijo Alexandra con voz rota, lo que consiguió romperle el corazón, se sentía completamente impotente y desesperado, la doctora ingresó completamente vestida y lanzó ordenes antes de sentarse a las piernas de la mesa, estaba separada de Alexandra por una tela azul que h