Llegué a casa y mi cara estaba destrozada, que podía hacer, cuatro basuras contra yo solo, pero logré romperles el culo, pero no pude salir ileso. Me dejé llevar por la ira y por lo que había dicho por ese maldito. Mi puño pudo saborear su rostro muy bien.
—Hermano, tenemos un problema —Llamé a mi hermano, ya estaba en mi casa curándome las heridas.
—¿Que le sucedió a Fresita? —preguntó mi hermano por su Audi rojo.
—Nada, a mí me pasó algo.
Escuché la risa de mi hermano, ya sabía de lo que estaba hablando.
—¿Cuándo será el día que puedas resistirte a las peleas?
Me puse el hielo en mi ojo derecho, mi labio seguía sangrando y toda mi cara estaba que ardía. Esos hijos de p**a sólo apuntaban a mi rostro.
—Pasa que era el ex de Rose y además la llamó perra, ¿Cómo no iba a golpearlos?
Me saque el hielo del ojo y dejé que descansará un poco.
—¿Espera, es Rose a la que harás tu novia? —preguntó.
—Sí ¿No te lo d
Holaa, cada vez más cerca del final. Gracias por leer.
El viaje fue entretenido ya que le conté como había golpeado a esos idiotas. Ella a cada que le decía que me golpeaban en tal parte, se tapaba la boca y hacia cara de dolor. Logré decirle que si ella iba a una de mis peleas como “Pantera negra” no soportaría verme. Se tapó la cara completa y dijo “Si llegó a ir, juro que trataría de entrar en el ring y ayudarte a golpear al idiota” yo como todo un baboso la miré y me comencé a reír. Era excelente, me sorprendía cada vez más, pensé que me diría “no te dejaré que pelees” eso me decepcionaría un poco ya que tendría que dejar por ella, pero como gano demasiado dinero en cada pelea me conviene seguir, además un par de golpes logran sanar. Estábamos llegando a la gran casa de mi hermano, ella miró emocionada todo el lugar, bajamos y nos recibió la empleada Sherry. Pasamos al interior de la casa y había algunas luces apagadas y otras encendidas que marcaban un camino, no sé en qué momento desapareció la e
La noche había avanzado tan bien, terminamos de cenar y llegó el momento de pedirle algo tan grande como que sea parte de mi vida, mi pareja y mi todo. Me pare y ella borró su sonrisa de su boca, la asusté. Me dirigí a su lado, le pedí su mano e hice que se levantará. Ella me obedeció tan callada, lo agradecí. Le tome sus dos manos y las tuve entrelazadas, estábamos bien cerca, su perfume se mezclaba con el mío, ella se veía tan hermosa, en mi pecho había un miedo increíble al rechazo, si ella lo hace no sé cómo me repondré. —Bueno Rose, hay algo muy importante que quisiera decirte —No habló y sólo se quedó mirándome—. Primero que nada es una pregunta —Hice una pausa—. ¿Quieres ser mi novia? —Vi como sus ojos se llenaban de agua y eso me dio más miedo—. Si no sabes que contestarme te dejaré que pienses los días que necesites. Y no hablaba para nada, entonces entré en pánico y solté sus manos. Una angustia me invadió y no me di cuenta que Rose estaba totalmente shocke
«Rose» El día que más recuerdo es el de ayer y el de hoy, me encontraba en mi casa acostada y pensando todo lo que sucedió en tan solo dos días. Esa maravillosa cita que tuve con Adler y al otro día como tonta, quise marcar a mi mamá y lo terminé llamando a él, por lo que horas después me había enterado que estaba en una reunión en la empresa de su padre y luego que corte la llamada con él, solo me recosté por la barra pensando en lo tonta que era. Luego de eso, horas más tarde Adler ya se encontraba en mi casa. Esto me iba a matar. «Flashback» Estaba bajando las escaleras totalmente desastrosa, escuché que mi hermano hablaba con alguien, pero si era uno de sus amigos no me importaba mi vestimenta ya que son hombres bastante grandes y no sé fijarían en mí, más por ser la hermana de Jasper y otra de las razones era que ya mis ojos estaban bien puestos en una persona; al bajar venía gritándole a Jasper que papá y
Cuando él estuvo a centímetros de mí, me pude dar cuenta que tenía un montón de golpes, me desesperé un momento. Levanté una mano para tocarlo, pero solo verlo me dolía rotundamente. —¿¡Adler, qué m****a te sucedió!? Él trató de sonreír, pero vi que le costó. Sentí la presencia de mis padres detrás de mí. Estos son palos en nuestra bicicleta, a lo mejor no sea tan malo como lo veo yo, pero en este momento me molestan un poco. Mi papá pensará mucho peor de Adler. Él saludó a mis padres, muy tranquilo. Me ignoró lo que me puso un poco molesta. Escuché la voz de papá saludando a Adler, eso era algo muy nuevo en esto que recién empezábamos, mi mamá se acercó a nosotros y la odié por completo. —¡Henry! ¿Qué te pasó? Fijé mis ojos en ella y le hablé muy seria. —Dile Adler, mamá. Y ella asintió. Después de tal interrogación de mi mamá y enterarme que tal nombre como el de“Hudson”estab
Me removí en la cama, no quería levantarme. Anoche nos quedamos hasta muy tarde en la comisaría, tuve que llamar a mis padres, ellos fueron y ¡Dios! Sólo miraban mal a Adler, bueno mi papá más que nada, pero le explicaron los oficiales que no nos sucedió nada, que ellos recibieron mi llamada y que por suerte nadie salió herido. Adler se disculpo con mis padres por este incidente, el hermano también pidió disculpas. Yo sólo renegaba, porque no deberían de pedir disculpas, soy bastante grande y ellos deben de agradecer que no sucediera absolutamente nada. Mi papá algunas veces era muy pesado con el tema de ser sobre protector. La noche fue maravillosa y agradezco al Dios que nos cuidó anoche. Adler tiene una deuda bastante grande con ese mafioso y sé que cuando salga de la cárcel, lo primero que hará es buscarlo. Su hermano estaba un poco borracho: tenía mezclado perfumes de mujeres con cigarrillos, era una fase que jamás creí descubrir de mi mejor profesor
Caminando íbamos a la casa de Adler, tomados de las manos, mientras conversábamos de cosas sin importancia; pasar cada segundo con él, me hace tan bien, verlo sonreí ¡Dios! ¡que me vuelvo loca! Sus facciones se notan perfectamente bien, sus labios rosados de tanto que se los muerde. Tiende a levantar levemente la ceja cuando dice algo serio, tiene unas pestañas muy largas, sus cejas tan negras hace que tiembles cuando él las frunce ni que hablar de su cuerpo, muy grande y bien trabajado. Lo que él habrá sido en secundaria, tiene fans por todos lados ni me imagino en la secundaria. El típico badboy, tan guapo y que ninguna pudo tener su corazón. —¿En qué piensas? —me preguntó. —En ti, en como eras en la secundaria, me lo imagino un chico muy perseguido por su grupo de fans. ¿Ninguna te conquistó? —En realidad, nadie me seguía al principio. Estaba tan enamorado, perdidamente y mi novia era la popular, no había chico que no
Todo lo que él me decía llenaba todo mi ser. Después de disfrutar del rico café y además acompañando de risas, nos sentamos en el sofá a ver unas películas; no sé porque, pero elegí “Yo antes de ti” por Dios, lo que me encantaba esa película, igual no era de mis favoritas, la que siempre lograba romperme en mil era la de “Now is God” con esa película lloraba hasta ahogarme. Es increíble que tenga 24 años y no sepa llorar, suelo ahogarme mucho si lloro mucho: se me va el aire y lloro desconsoladamente sin respirar. Soy una idiota y lo sabía. —¿Por qué elegiste esta película? No me digas por el protagonista, porque me sentiré muy inferior. Estábamos sentados y abrazados, una cobija nos cubría. Estaba prendida por él como garrapata. Él de vez en cuando acariciaba mi cabeza hasta mi espalda, me estaba por dormir en segundos. —¿¡Qué!? ¡Adler no me puedes decir que te sentirás inferior a Sam Caflin! —Lo miré expectante, puse pausa
Al día siguiente, me moví y mi trasero tocó algo muy duro. Me levanté y era Adler, que estaba muy dormido, no sé en qué momento se sacó la remera, tampoco sé, porque no estaba tapado. ¿Será que mi yo dormida lo violó? Traté de taparlo, pero las ganas de tocarlo era inmensas, me fascinaba por completo verlo así: tan sereno, tan tranquilo. Su pecho subía y bajaba lentamente, podía observar esas pecas y esos lunares, su cuerpo estaba totalmente tallado por dioses del Olimpo. Cuando lo estaba por tapar él me estiró y me acercó a él muy fuerte. —Por favor no te vayas Shannon —dijo y eso me molestó tanto que me separé bruscamente de él y me levanté de la cama—. Solo te estaba molestando. Se levantó rápidamente y me abrazó. —No es gracioso para mí Adler. —Me mirabas con tanta hambre, además toda la noche tu trasero rozó a mi amigo ¿y qué crees? No pude dormir siquiera una hora, pero tú si hablaste dormida y lo nombraste. Su cara cambió notor