Izel—Izel despierta.—No quiero— murmuró aun con la cara sobre la almohada.—Despierta— agua fría cae sobre sobre cara haciéndome sobresaltar— por fin.Parpadeó varias veces tratando de aconstumbrame a la luz del sol. Cuando lo hago veo una mujer vestida de blanco y con destellos dorados en su ropa, no puedo verle el rostro pero se perfectamente quien es.—Oh mierda — veo que lo que creía una almohada no era nada más que una oveja.Bufo.—¿Qué quieren?— me levanto del suelo , ella hace lo mismo— ¿Por qué no puedo verlas?—Eres impura Izel, tanta oscuridad dentro de ti apenas y te deja entrar a nuestro santuario.—Como si quisiera estar aquí.—Si lo deseas, este es tu hogar donde deberías estar y no en la tierra— se queja la líder de las trix.—No tengo un hogar y no quiero estar aquí, déjame despertar.—Oh hermana mía, nunca debimos dejarte ir a la tierra— aparece otra de ella, de nuevo son solo una luz resplandeciente.—¿De qué hablas? —Deberías volver con nosotras, pero aun debes
Laila–No deberíamos estar aquí– ignoró las súplicas de Dani mientras sigo ingresando al castillo a escondidas con ellas detrás de mí. Si papá nos ve será un total interrogatorio y yo no sé mentirle, tampoco quiero darle preocupaciones de cabeza.–Si te callas nadie se dará cuenta–le reclamó arrastrándolas conmigo al jardín– victoria– chillo cuando llegamos a la puerta trasera.Entramos a hurtadillas y corremos a mí habitación, Dani, Cora y Lana entran conmigo cerrando la puerta detrás de nosotras.–Bien, hay que pensar qué le diremos al rey cuando nos pregunte por Amara y Aziel. –No nos vamos a dejar ver– los nervios empiezan a apoderarse de mí mientras me muevo de un lado a otro. –Laila, los chicos no volverán hasta el domingo en la tarde, hoy es viernes. ¿En serio crees que tú padre no se dará cuenta?– Cora tiene razón.–Ay, qué hacemos.–No debimos venir acá primero que nada.–Sería peor, enviaría a toda la guardia del reino a buscarnos.–Esto se está complicando mucho–Chilla D
Bajo la cabeza ante la mirada despectiva que me da papá al sentarme frente a él, parece realmente cansado y su aspecto no es favorable. La barba canosa que ha crecido en su barbilla junto a sus ojeras y pelo despeinado me da a entender que no ha tenido ni un día ni buena noche.En mis dieciocho años de vida solo he visto a papá así en dos ocasiones y cuando sucede es porque algo realmente malo pasa.Trago grueso alzando la mirada, él solo me mira sin decir nada al igual que las dos chicas a mi lado. Hago una mueca y un puchero inocente se forma en mis labios.–Realmente me decepciona que mi propia familia no sea capaz de confiar en mí– mis ojos comienzan a llenarse de lágrimas.–Papa…–¿Cómo es posible que sigues de pie después de lo que le pasó a Hunter Amara?– niego, las lágrimas comenzaron a rodar por mis mejillas.–¿Qué le sucedió?– Soy incapaz de dejar de llorar y me siento realmente estúpida por preguntarle eso a papá cuando se supone que la pareja destinada de Hunter soy yo o
IzelDecido acercarme al grupo donde están los demás y quitar la salchicha que tiene Tristán en la mano, estoy tensa ante el hecho de que Casiel no me quite la mirada.Me siento entre Tristán e Isaac Miranda fijamente a Amara que parece decirle a Aziel que le duele algo. Trato de ignorar lo que dice pero mi instinto me dice que la escuche atentamente.–Izel ¿quieres jugar voleibol? Ya vamos a empezar– detrás de mí están dos chicos y una chica de mi grado. Me levanto y sin despedirme me voy con ellos.–¿En serio cómo es posible que puedes estar cerca de todo ellos sin desmayarte?–Ninguno es mi tipo. Chicos buenos, guapos, ricos y sexys pero a mi me gusta algo más peculiar.–A Izel le gustan los chicos malos, que la acorralen contra la pared y…–Yo también quiero jugar- Casiel quita la pelota de la mano de la chica guiñandole un ojo, un sabor agrio se forma en mi boca al verlo caminar sin camisa ganándose la mirada de todas las chicas y algunos chicos. Definitivamente él estaba para co
LailaMe siento en el sofá viendo como Dani sonríe animadamente y Jayson está a su lado dándole de comer. Sonrió, enserio les tengo envidia, pero de la buena. Ellos se ven perfectos juntos, el uno para el otro.–En serio me alegra que estén bien, estaba muy asustada– Dani sonríe.–Estamos bien qué es lo importante.–Si, con una recuperación raramente desconocida pero gracias a la Diosa Luna bien– sonrió tomando su mano, la puerta se abre y entra Lana, ella ha estado muy callada y parecía nerviosa.Parece que no cree que guardare su secreto, realmente no quiero que le hagan daño o que le pase algo.–¿Qué sucede Lan, por qué traes esa cara?– le pregunta Jayson mirándola con el ceño fruncido.–Los chicos están en problemas– ellas nos mira a todos inquietantes, parece querer decir algo pero el miedo no la deja.–¿qué sucede?–El rey ha ido por ellos– responde después de unos minutos.–Ya lo sabemos ¿Segura que no es algo más?– le pregunta Jayson– sabes que puedes confiar en nosotros– Lan
LanaCuando me di cuenta de que Laila me estaba siguiendo tuve que tomar medidas desesperadas, ella no podía saber lo que hice y muchos menos que mi madre quiere que la siga ayudando. Tenía que esconderme de ella, tenía que huir de todos.Pero nada salió como quería, ahora estaba subiendo las escaleras a la carrera hasta llegar a la habitación de Dani, ella se levantaba con ayuda de Jayson, el último tampoco tiene muy buen aspecto.Laila y yo éramos quien podíamos defendernos.–¿Qué Está sucediendo allá afuera?– Jayson me mira preocupado.–Nos están atacando– Laila mira por la ventana– papá ya alertó a su hombres pero él está muy lejos, tardará en volver. Debemos ir al refugió.–Ve y lleva a Dani y Lana contigo, yo tengo que luchar, debo defender a nuestra gente– niego rápidamente.–No, no puedes, estás débil, Dani depende de ti y si algo te pasa allá afuera ella morirá. Tu vendrás con nosotras al refugió– le amenaza dejándolo sin habla.Salimos de la habitación, detrás de nosotros s
Izel–¿Tu quien eres?– miró con fastidio al rubio delante de mí, una enorme cicatriz se extiende desde su ojo hasta su quijada. Sus ojos rojos brillan. Sus alas son enormes.Tiene una sonrisa maliciosa mientras mira de los chicos que me perseguían a mi.–Estefan tenía razón, hueles delicioso– el impacto se siente cuando aterriza e intenta acercarse a mi.–No des un paso más– Julián se pone frente a mí, a su lado el lobo de Tristán intentan protegere.–No te metas en esto hechicero, no estás a mi nivel– el chico mueve su manos haciendo que comiencen a levitar a mi lado– que hermosa eres– toma mi quijada haciendo que lo mire directamente, escupir su cara ante el asco que me genera su sonrisa recibiendo inmediatamente su puño contra mi rostro.Repito ¡¿Alguien más quiere golpear a Izel?!Su golpe me manda lejos haciéndome caer de espalda, me quejo ante el dolor. Mis heridas no sanan y ahora tengo unas nuevas, genial.–!No te atrevas!– el grito de Julián resuena por todo el lugar cuando e
Amara–Estoy asustada– murmuró con la cabeza gacha. Casiel me mira con el ceño fruncido e Isaac niega.–No te asustes– lo miró mal encogiendome en mi lugar.–¿Qué te sucede?– Casiel se levanta de su lugar y me mira con la misma expresión de siempre. Ninguna.–La luna se está tornando roja– trago grueso, Casiel e Isaac van inmediatamente a la ventana y mira lo que les informe– ya pasó más de una hora y ninguno de ellos ha vuelto.Ahora sí empiezo a ver una ligera preocupación en el rostro de los chicos. Me levanto y empiezo a caminar de un lado a otro, mi corazón late con fuerza y siento como si mi mundo se viniera abajo.–Estoy mareada– siento que voy a caer cuando Casiel me sujeta. Comienzo a vomitar y todo comienza a volverse borroso.–Siéntate aquí– me ordena Isaac.Me siento en el suelo encima de una almohada mientras comienzan a echarme aire.–Agua, necesito agua– pido entre jadeos.¿Aziel está bien? ¿Por qué me siento así?–Iré por agua para ella – Isaac sale del lugar dejándome