Capítulo 32 Todo esto lo hago por nuestra felicidadLuis se encerró en su habitación y camino de un lado al otro pensativo. Nada salió como pensó. Tenía todo planeado, incluso podía dejarla embarazada y así tendrían que casarse. No había resultado nada fácil, tendría que planear otra cosa.Presentía que Diego seguía sintiendo algo por Manuela, él no se separó de ella el día del evento, así que su manera perfecta de vengarse sería arrebatarle a Manuela. Ese matrimonio se llevaría a cabo y tarde o temprano todo su dinero pasaría a sus manos. Nunca imagino la suerte que tendría al fijarse en ella. Para obtener su recompensa necesitaba aplicar medidas drásticas. Así sería. Debía dar el siguiente paso. Ella solo se asustó, la calmaría y dentro de muy poco tiempo la tendría en sus brazos y ese cuerpo tan deseable sería de él.Saboreo el dulce momento en que estuviera hundido dentro del cuerpo de ella. ¡Cuanto había deseado ese momento! Tuvo que fingir como un pendejo, conformarse con bes
Capítulo 33 ¡Oblígame si eres capaz!Manuela condujo a Luis al despacho de su padre. Llamo a la puerta y se escuchó una respuesta indicando pasar adelante. Ella abrió la puerta y lo dejo pasar. Un aire sombrío se respiraba en el lugar a pesar del lujo imperante. La decoración era muy sobria. Los colores utilizados eran fundamentalmente el blanco y el negro.Luis contempló al hombre que estaba de pie detrás del escritorio con ambas manos colocadas en el escritorio, la mirada fija y sin inmutarse. Él no vaciló y fue hasta él, con paso firme. Tenía mucho que perder si flaqueaba o lo notaban nervioso. De esta oficina saldría victorioso, y con la aprobación de este viejo ridículo, que quería impresionarlo con esa expresión arrogante.—Suegro, encantado de conocerlo— Luis le tendió la mano a Elías, amigablemente, su familia dependía de que diera los pasos que fuesen necesariosElías lo contemplo fijamente, y resopló de pura frustración. —Usted no es, y espero que nunca llegue a ser mi yerno
Capítulo 34 ¡Sal de allí de inmediato! ¿Qué hace Diego aquí en tu casa? Lo que es más importante, ¿qué estabas dejando que él te hiciera? Luis sentía que desde que llego a esta casa había sido vilmente menospreciado y no había algo que lo sacara de sus casillas que ser objeto de desprecios. Ya habían llegado al salón cuando Manuela se soltó de su agarre.— ¿Qué te pasa Luis? ¡Suéltame!Ella comenzó a darse masajes en su muñeca adolorida —Eso quiero saber yo Manuela! ¿Qué es lo que pasa? ¡Explícate! ¿Qué hace ese hombre aquí en esta casa? Manuela bajo la mirada y musito— ¡Él está viviendo aquí! — ¿Cómo dices? ¿Vive aquí contigo en la misma casa? — La mirada de Luis ardía de ira al saber que su oponente estaba tan cerca de Manuela, y que está descarada, lo admitía a su lado —Manuela, ¿cuándo te volviste tan depravada? ¿Cómo puedes vivir en la misma casa que tu exesposo?—le señaló con altanería El rostro de Manuela se puso cada vez más pálido. En el tiempo en que se conocían Luis n
Capítulo 35 Tu dinero es lo único que a él le interesa. Luis tuvo que salir corriendo de la casa de Manuela, tenía que Lizeth fuera hasta allí a formar un escándalo y confesara lo que él escondía de ella. Al llegar a la entrada la encontró de pie frente al portón de entrada y se la llevó a rastras hacia su vehículo. ¡Vete a casa y espérame allí! ¡Voy detrás de ti!Llegaron a la residencia de Lizeth casi simultáneamente él y ella. La mujer estaba enardecida con su rechazo constante. Él no respondía a sus llamadas. No regreso a verla. No la atendió en el hotel. Por esa razón, sumado a una llamada de Sabrina, no tuvo más opción que seguirlo hasta la mansión de Los Sánchez. El muy maldito estuvo un buen rato allí con esa mujer.La llamada de Sabrina fue para insultarla y decirle que debía quedarse tranquila, mientras Luis trataba de solucionar el problema de su empresa, que todos debían apoyarlo, ya que en este momento él estaba tratando de sacar adelante el negocio de su familia. Lo qu
Capítulo 36 ¡Aquí hay una mujer que dice ser tu esposa!—Es mi esposo. —le dijo sacudiéndose del agarre del personal de seguridad— ¿Qué se puede esperar de un marido y su mujer?Manuela estaba hirviendo de rabia. Por otro lado, un gran pesar sacudió su corazón, su alma. De pronto su mundo se vino abajo. Es que todas las personas que conocían tenían que engañarla ¿Qué había hecho para que esto fuese así? ¿A quién le hizo mal? — reacciono de inmediato tenía que escuchar primero a LuisSaco su teléfono del bolsillo de su pantalón, mientras veía como la mujer quería soltarse de las manos del personal y estos la retenían. Envuelta en una gran pena por la desconfianza que de pronto se anidó en su alma, marco su número de teléfono, al instante él le atendió. Con la voz quebrada, tuvo que preguntarle, sentía que debía darle el beneficio de la duda.—Luis… Hay una mujer aquí que dice ser tu esposa ¿Qué significa eso?—hubo un momento de silencio del otro ladoLuis se quedó helado, no imaginó q
Capítulo 37 ¡Me darás otra oportunidad!Luis había vuelto a salir de casa de Manuela con Lizeth, eso pensó, él se estaba haciendo una costumbre. Esta era la segunda vez que lo hacía. Solo que ahora lo consumía una rabia asesina. estaba viendo como esta maldita mujer frustraba sus planes — ¿Qué hiciste inconsciente? ¿Tienes la menor idea de lo que acabas de hacer?—la reprendió con severidad— ¡No me importa nada! ¡Solo me importas tú! ¡No te quiero perder y ella lo hará, te arrebatará de mi lado! ¡No me quedará otra opción que morir!—le dijo desafiante— ¡Entonces muere! ¡Hazlo ya! ¡Acaba con este acoso que me obligas a vivir! ¡Termina de comprender que se acabó! ¡No te quiero a mi lado! ¡Mi futuro es Manuela Sánchez! ¡No volveré contigo nunca más! ¿Lo entiendes? ¡Hagas lo que hagas, no lo haré!—le dijo con irritación y algo desesperado—¡Luis recapacita!—Lizeth tenía que tranquilizarlo, exponerle sus inquietudes, hacer que la entendiera— ¿Quién te entenderá como yo lo hago? ¡Dime! ¿Q
Capítulo 38 ¡No puedo tener hijos! — ¡Debes creerme Manuela! ¡Jamás te traicionaría! ¡Me sucedió como a ti misma! ¡Ambos hemos sido desafortunados en nuestro primer matrimonio! ¡Me casé muy joven con Lizeth, en contra de mi familia! ¡Estábamos estudiando los dos! ¡Demonios! Me siento fatal con todo esto!Ninguno de los dos ni siquiera habían tocado la taza de café que estaba en la mesa frente a ellos.— Creo que lo hice porque ellos no la querían a mi lado y deseaba rebelarme de su dominio. Las cosas no marcharon bien con ella y mis padres no me dieron más dinero, además sus actitudes comenzaron a ser… anormales. — ¿Anormales? ¿A qué te refieres? —Manuela lo miro inquisitiva, deseaba creerle, en verdad quería que alguien en que confiaba no le fallara— ¡ya lo has visto en tu casa! Su conducta con el tiempo es lo más parecido a una atracción fatal. Con los años he tratado de que me deje en paz, le he dado dinero, lujos, comodidades, la envié a un centro médico en el extranjero par
Capítulo 39 ¡Vaya suerte que tienes Manuela! —Seguiremos hablando otro día, ahora lo importante es el financiamiento al decir esto último miro la hora en el teléfono y se levantó. Luis, al ver que se levantaba dejando la mesa, se acercó sujetándola con firmeza, tratando de rodearla con sus brazos —Para mí lo más relevante somos tú y yo y nuestro amor—le intento afirmar— Entiéndelo amor, nada es más relevante para mí que recuperar tu fe y tu confianza—Luis presentía que algo pasaba, las cosas no estaban saliendo como pensó, Manuela estaba rara, menos dócil, menos cariñosa. Si bien es cierto que entre ellos nunca había existido una pasión desbordante, también es cierto que ella siempre lo trató con amabilidad, nunca con la misma indiferencia como ahora. Ella debería estar empeñada en aclarar las cosas, no obstante parecía que aún no le perdonaba lo de Lizeth. —Escucha Luis o nos vamos enseguida o tendrás que resolver tú solo la discrepancia en el proyecto. Con el escándalo de tu exesp