Edwan miró a Harry, ahora entendía porque Jakob había llegado, él también sabía que esta noche la loba que vivía en Rosalin surgiría.El grito de dolor de Rosalin lo hizo mirarla, aunque había presenciado el nacimiento de otros lobos, la intensidad de dolor que mostraba ella, era algo que nunca había visto.Corrió hacia ella cuando cayó al suelo, quería acogerla en sus brazos y susurrarle que todo iba estar bien, que lo tenía a su lado, cuando estaba por tocarla la luz de la luna se intensifico, como una barrera que no permitió que nadie pasara.—No Edwan, en este momento nadie puede tocarla —grito Diana sin mostrarse —sé que sufres con ella, pero necesita pasar de humana a loba sola…—Pero no soportó sus gritos, ¿Por qué padece tanto?...—Tú lo sabes, cuando la luz desaparezca ella no será humana sino loba…Rosalin podía escuchar a Edwan, pero le parecía que estaba muy lejos de ella, intento extender su mano hacía él para pedirle que la abrazara, pues lo necesitaba, sin embargo, una
Los dos lobos corrieron por todo el bosque, no dejaron ni un lugar por recorrer, jugando como dos lobos, disfrutando de su transformación, las nuevas sensaciones que estaba experimentando. Jadeando cansados terminaron su carrera cerca del riachuelo, Edwan camino aun en sus patas sobre una gran piedra, de la cual se impulsó para dar un gran salto y caer en la orilla del arroyo, dejó atrás a él lobo gris para volver a ser hombre.—Hazlo mismo amor —le dijo a Rosalin que lo miraba de pies a cabeza con sus ojos grandes verdes.Rosalin lo imito de la misma manera, a mitad del camino su pelaje desapareció y cayendo en los brazos de Edwan, que la esperaban con alegría y euforia, dio varias vueltas con ella, mientras las risas rompían con el silencio del lugar.—No puedo creer, se siente tan maravilloso correr, me sentí libre, es asombroso, mi oído se agudizo, mi olfato se perfecciono y mi vista es maravillosa, no sé qué digo, no haya palabras para describir todo lo que siento —dijo Rosalin a
Edwan abrió los ojos al escuchar la declaración de Rosalin, como era posible que ella supiera lo que paso con su esposa si él se había negado a decírselo, miró sus ojos llorosos que le partieron el corazón.A pesar que no quería perder su contacto, no podía estar más unida a ella, no cuando ella podría despreciarlo, odiar amarlo. Se aparto, dejándola desprotegida de su cuerpo y calor, le dio la espalda y bajo la cabeza.—¿Cómo es que dices saber lo que hice con mi esposa, si yo no he querido que tú lo supieras? —ella se levanto de la alfombra de hierva se abrazo a él con fuerza, beso su hombro, podía sentir muy fuerte su dolor.—No te había dicho, pero desde que me marcaste he tenido algunas visiones —Rosalin llevo su mano a la mejilla de Edwan y lo hizo que volteara su rostro para que la viera a los ojos —no sabía que era, por eso no te dije nada, pero hoy que me volviste a morder en la marca todo fue tan claro, vi a tu esposa tirada en el suelo, tú tenías a un pequeño en brazos. ¿Qu
Edwan después de mucho tiempo se sentía ligero, aquella carga pesada que había oprimido sus hombros desapareció al momento que revelo su secreto y ella, la mujer que iba a su lado no lo rechazo, ni siquiera lo miró con despreció, en su lugar ella lo veía con más amor, sus brazos fueron su consuelo, y su voz su bálsamo de paz, atrás estaba quedando el dolor y el miedo que por años vivieron en él, ahora solo vivía el amor que guardaba para ellos, Jane y Luan, ellos eran parte de su pasado uno que no iba a olvidar, sin embargo, desde ese día solo vería hacía el futuro, donde Rosalin era su vida, con quien viviría feliz.Cuando regresaron a casa casi al amanecer se dieron una ducha juntos, frotándose mutuamente, tomando cada uno una toalla para secar uno al otro, y fueron a la cama a descansar, el convertirse en loba por primera vez había dejado a Rosalin un poco agotada.Edwan despertó cuando el reloj marcaba la una de la tarde, la cabeza de Rosalin descansaba en su pecho, sus brazos la
Rosalin miró a Edwan, temía que lo que iba a decirle a su papá fuera no muy agradable para ella, tomo su mano con fuerza, su intuición le decía que lo iba a necesitar.Al llegar a la sala Harry tomó asiento en su sofá, mientras Rosalin se sentó junto con Edwan en el diván largo, las dos miradas se clavaron en él, por lo que soltó de nuevo el aire y comenzó a sudar frio.—Papá puedo sentir tu nerviosismo, si es algo desagradable para ti, no me digas nada —dijo Rosalin tratando de liberar a su padre de la presión que tenía, él negó con la cabeza, tarde o temprano ella se enteraría y era mejor que él fuera quien le dijera la verdad de la historia.—No, esto que tiene que saber lo debes escuchar de mi —Harry tomó sus manos, y la miró directamente a los ojos —sabes que tu mamá no era de Quebec, sino que llegó junto con tu abuela a vivir ahí— Rosalin afirmó con la cabeza —cuando llegó ya era una joven adulta, era la mujer más hermosa que en mi vida había visto, se robaba la mirada de todos
Rosalin no sabía porque estaba contando esa historia, si ella no era la mujer de la leyenda porque no luchar contra todos por ese amor, que lo impedía, Harry tomo de nuevo sus manos para que la viera a los ojos. —Ella sacrifico su amor, para salvar una parte de su corazón —apuntó Harry como si hubiera escuchado sus pensamientos —ella le mintió, diciéndole que su corazón me pertenecía, y rompió el vínculo con él…—Pero ella lo amaba ¿Cómo pudo romperlo?—Con magia, hay un hechizo que solo las brujas conocen, con él ninguno de los dos muere, disimulan el hilo de la luna…—¿Y que hizo ese hombre, se quedó tranquilo con eso? —Harry negó con la cabeza. —Claro que no insistió una y otra vez, por lo que tú mamá con todo el dolor de su corazón se alejó de Quebec, debía poner tierra de por medio y nos casamos lejos —Harry comenzó a llorar —yo le dije que podíamos solo vivir juntos, fingir que éramos pareja, que no se uniera a mí, pero ella sabía que mientras ese hombre supiera que era libre
Todos se pusieron de pie, volteando a ver al intruso que acaba de irrumpir inesperadamente en la sala. Jakob centro su vista en Rosalin, sus ojos que eran inexpresivos, en esa ocasión eran amorosos, protectores, era como si solo existiera ella.Rosalin por su parte escuchaba el latir irregular de su corazón, estaba totalmente sobre saltada, confundida mirando esa figura imponente que daba un paso a ella, movida por un instinto, retrocedió encontrándose refugiada en la solidez del pecho y brazos de Edwan.Solo él en ese momento calmaba el alboroto de emociones que había en su interior y la mantenía firme mientras el mundo parecía girar a su alrededor.—No se acerque —dijo levantado los brazos, impidiendo que avanzará más —no se acerque —sintió el ligero apretón sobre sus brazos, volteo el rostro para encontrarse con la amorosa mirada de Edwan—usted no es mi padre, al único que reconozco como padre es Harry Green.Podía sentir como se encontraba atrapada entre la mentira que había vivid
—No, no me gusto que me rechazara de nuevo, pero yo no la mandé a matar —su voz era tan segura que no podía creer que estuviera mintiendo —como podría hacer algo así, si mi mayor deseo era volver con ella, por eso le dije Fiona que todo había terminado, que iba a romper el vínculo que nos unía —explicó Jakob mirando a Rosalin, esperando que ella si viera la verdad en sus ojos —lo único que quería era volver, vivir contigo y disfrutar de mi hija, mi pequeña cachorra, enseñarle a pelear, tener a mi familia conmigo…—sus ojos comenzaron a llorar con dolor…—¿Y porque no estuviste cuando tus hombres cometieron ese crimen? —preguntó con furia Harry, el no podía creer ni una de sus palabras, Killari había sido clara, debía alejarla de Jakob, y solo era porque él era culpable de sus heridas mortales.—No estuve todo ese día porque había ido a una reunión, pero cuando regresé lo primero que hice fue ir a ver a Killari, sin importarme que tú pudieras estar, hablaría con ella para supiera mi dec