–Eran demasiados los escombros que flotan en el mar, lo que quedó del buque aún arde en llamas. –¡Ricardo! ¿Ricardo en dónde estás?. Rayo buscaba a su amigo, ya se ha sumergido varias veces y no encontraba a Ricardo, su amigo saltó con él y en cuanto el buque explotó se hundió y no lo vio salir. Rayo teme que lo haya golpeado algún fragmento del barco. En su desesperación, se sumergió una vez más y lo vio debajo de un gran trozo de metal. –¡Ricardo! Se dijo aguantando la respiración, y no le quedó mas opción que pasarle un poco de su aire para que su amigo aguantara más. –¡No morirás aquí! Pensaba al intentar quitar el gran trozo de metal. Por su cabeza pasaron tantos momentos vividos con su amigo, este hombre ha sido quien más lo ha salvado y quién más se ha expuesto al peligro por él. –¡No te dejaré! Aplicando mucha fuerza logró soltar la pierna de Ricardo, luego lo sujetó de la camisa y lo condujo hacia la superficie. Ricardo estaba inconsciente, y tuvo que llevarlo a uno de los
Padre, te hicimos caso y pateamos muchos traseros, le daremos su merecido a todos esos malhechores. Afirmó Douglas con gran orgullo.–¡Esto apenas es una pincelada de lo que viene, quiero que continúen como hasta ahora, aprovechen este momento de paz, vayan a comer algo y si pueden descansen un poco. En Canadá, la familia Beach llegó a una gran casa, los niños llegaron dormidos, fue un viaje largo y agotador. –¡July, ayúdame a distribuir las habitaciones! Sugirió Rose, mirando a Jordan, aun es joven y Ricardo no le permitió participar en la guerra. –¡No quiero dormir! El joven estaba molesto con sus padres, y ni siquiera Noa lo ha hecho calmar su rabia. –¡Jordan! Susana tiró del brazo de su hijo y dijo. –¡Rayo y Ricardo te encomendaron una misión, la más importante de todas, debes protegernos, es lo mismo que están haciendo ellos!. –¡“No es lo mismo”, madre tengo un mal presentimiento, cuando veníamos en el avión, mi corazón casi se detuvo, y pensé en mi padre y mi hermano. Quiz
Asintiendo, Rayo le señaló el camino y añadió. –¡Quiero ver tu campamento, necesitamos saber cuántas pérdidas tuvieron y si necesitan algo. –¡Cómo guste señor! Dylan también los siguió, mientras los escuchaba decir. –¡Nosotros no sufrimos pérdidas, pero sí sería bueno que nos envíen más municiones. Mis hombres defendieron muy bien la frontera, les enseñé una estrategia que no nos falló. –Ante la declaración del general, los hombres que hacían la inspección se miraron entre sí. –¡Deberías decirnos tu estrategia, quizás sea de ayuda para otros campamentos! Agregó Richard, el jefe de gabinete. –¡Por supuesto, todo sea por mantener a los hombres a salvo!. Ese joven demostró tener mucha habilidad y logró sorprender a Rayo. Pero Justo antes de llegar al campamento, un soldado llegó jadeando. —Señores, me enviaron a decirles que acaba de llegar el avión que trae al equipo especializado, fueron muchos los doctores y enfermeros que se ofrecieron de voluntarios. –Perfecto, que monten las
¡Oye, ¿qué son esos privilegios? Diego mantenía el ceño fruncido y en un impulso intentó quitarle la hamburguesa a Douglas. –¡Ni te atrevas! No son privilegios, yo envié por ella, para eso tengo dinero e influencias, ya sabes, pides por teléfono y te traen la orden en dónde quieras que estés, actualiza tu vida hermanito. El joven apartaba a su hermano y al darle un mordisco a la hamburguesa le guiño el ojo, luego sacó de la bolsa una porción de papas fritas, evidentemente, le estaba fastidiando el rato. ¡Douglas, por favor dame de eso! Diego goteaba la baba, su plato contenía lentejas con pollo, los soldados necesitan hierro, vitaminas y calcio, y esa comida contiene todo eso. –No… tú nunca has comido esto, siempre has cuidado tu corazoncito, ¿Lo recuerdas? –Es cierto… pero Catalina me obligó a comer estás cosas, y sí, lo admito son deliciosas, solo con ella las he comido. Al escucharlo Douglas le dio la espalda y refutó con indiferencia. –Entonces ve con ella, yo soy tu alma gem
El hombre logró levantarse en Indonesia y alguien lo ayudó para que llegara a ser uno de los guardias reales. Con el paso del tiempo, este hombre fue adquiriendo poder, ahora es quien alienta a Stanley para que no se rinda. Así es, Tania no está sola; aparte de Hans, Lord Enrique, la ayuda, no fue casualidad que se encontraran con el buque en el que viajaba Nicole y su hija. —Envíen a los kamikazes, ellos ya saben cuál es el objetivo, hay que cubrirlos hasta que ellos cumplan el cometido. Stanley tenía un plan en mente: si no ganaba, al menos golpearía el corazón de Estados Unidos. Enseguida, los indonesios despegaron las avionetas negras. Por otro lado, los marinos intentaban derribar a los enemigos. —¡Padre, nos quedamos sin municiones! Gritó Kenneth, su lanzador ya no tenía más misiles. —¡Hijo, no desesperes! Ricardo llegó y cargó el artefacto. —¡No te rindas, saldremos de esta! En ese momento, las avionetas negras volaron sobre sus cabezas. ¡Oh no! Ricardo tuvo un mal presentimi
Stanley, para ti no hay vuelta atrás, desde ahora considérame un enemigo más, y para que empieces a odiarme por algo que yo sí hice, te diré que en este momento… Rayo guardó silencio y enseguida miró su reloj e hizo una cuenta regresiva.—Cinco, cuatro, tres, dos, uno…—¡Buuum! La gran explosión que se escuchó también sacudió la embarcación de Stanley. En ese instante el Rey de Indonesia se alarmó y gritó. –¡Guardias! Stanley pensó que era él quien se encontraba en aprietos.Mientras que Rayo se despojó de la máscara y la sostuvo en su mano. —Stanley, no te desgastes, nadie va a venir, solamente esta embarcación quedó en pie, tus hombres fueron abordados por los míos. La acción de Rayo y sus hombres fue única, algo que pasará a la historia. Un plan muy bien elaborado, claro, fue planeado con prisa, pero el golpe fue certero y preciso. Y por supuesto que Rayo no perdió la oportunidad de jactarse.—¡Me creerías si te digo que logré manipular a todos los hombres de la marina, nada más i
Pese a todo eso, Rayo tuvo que llegar a un acuerdo con el presidente, pues no puede hacer nada durante el tiempo que dure todo este proceso. No podrá mover un dedo sin avisar a sus superiores. Ese día, Thiago se arrepintió de ser el gobernador, pero era su cabeza la que estaba en riesgo. Por tal motivo, aceptó la propuesta de sus superiores, aunque no piensa dejar de ser Rayo. Nunca lo hizo ni por Nicole, y no lo hará solamente porque se lo impongan. Sea como sea, Rayo se propuso encontrar a este impostor. Una misión que por ahora será algo imposible para él. Hans ha dejado el país y lo hizo con una identificación falsificada, y junto a su novia Tania. Cerca de la costa, Stanley ha permanecido en su embarcación, no se ha movido ni hace ningún mate raro, así pasó casi seis meses, hasta el día en que el aeropuerto sufrió un atentado. Así sucedió también en una estación de tren y en uno de los muelles. Todos estos sucesos sucedieron el mismo día y a la misma hora. El perpetrador de es
Ambas mujeres lucen más delgadas, en ese lugar a veces no les da hambre y no comen por depresión. Pero ese día ambas terminaron todo lo de la bandeja, y no tardaron nada en perder el conocimiento.—¡Ingenuas! Dijo Helen, al comprobar que ninguna reaccionaba, luego salió a hurtadillas y fue en busca de un guardia. Este la ayudó a sacarlas y las metieron en un contenedor de ropa sucia y fue así como lograron sacarlas del castillo.Helen no levantó sospecha, tenía sus métodos y podía comprar a los guardias del lugar.Dos horas después, Nicole sintió que la brisa fresca le dio en el rostro y frunció el ceño al sentir la claridad del día.—¿Qué es eso? Ella también podía escuchar el canto de las aves, y cerca de donde se encontraban ellas, pasaba un riachuelo.¡Ese sonido! Nicole se sentó de golpe y vio a su hija que tenía la cabeza recostada en sus piernas.—¡Victoria, abre los ojos, mira a tu alrededor! Nicole no lo podía creer, hacía tiempo que no se sentía tan libre como ese día.Por s