—Todo lo que te contaré, Ryan lo sabe— la voz de la anciana sonó áspera y llena de pena. Sus facciones estaban demacradas y sus arrugas eran muy notables, sus ojos estaban oscuros.
Tragué saliva tratando de masticar y digerir lo que me estaba diciendo, ¿Ryan sabía todo? ¿pero qué era lo qué sabía? No entendía una mierda y sentía que mi cabeza iba a explotar en cualquier momento, pero algo dentro de mí quería romperse, esas simples palabras Ryan lo sabe, me hacía saber que algo andaba mal. Mis labios temblaban y mi corazón latía desesperado por el miedo.
—No entiendo... — mi voz salió quebrada y triste. — ¿Usted no estaba muerta?— inquirí hacia la anciana cuando Ron rió
—Ella tiene magia, ¿qué esperabas de la bruja más fue
¿Dije que iba a atacar a Ryan? Pues no. De hecho, ataqué a todos, sin excepción. Desde la anciana con magia poderosa hasta la persona a la que amaba. Me dolía. Estaba furiosa. Lo que pude hacer fue atacar a todos, gritar, usar mis manos y manejar la magia, aún no era perfecta haciéndolo pero me lograba defender, era capaz de hacerlo, y dejé que toda la ira me invadiera. Fue como si una fuerza invisible saliera de mi ser y los golpeara a todos causando que choquen a la pared, destruyéndola con sus cuerpos.—¡Raquel! ¡Para!— gritó alguien, creo que fue Ryan pero yo estaba cegada por la ira y el coraje de ser engañada. No le hice caso.Los hombres de Ron sangraban mientras seguían en el suelo, estaban conscientes aún pero no podían moverse, ¿su líder? había salido corriendo como una gallina, maldito cobarde, ya iría por &eacu
Muerte.Dejar de existir.Eran palabras demasiado fuertes, había pensado en ellas muchas veces en mi vida y sabía que iba a morir en algún momento, pero nunca creí que sería de esta manera y tan pronto, tenía apenas 19 años y sentía que no había vivido lo suficiente.Muerte.Seis letras que significaban mucho.Muerte.Aquella palabra rondaba mi mente desde que me metí en esto a causa de la magia, pero siempre había estado en segundo plano hasta ahora, hasta este momento, hasta que esas palabras salieron suavemente de los labios de Ryan, que la tomaba tan en serio. Pensar en qué mi corazón dejaría de latir por razones sobrenaturales me aterraba, pensar que mis pulmones dejarían de recibir oxígeno era espeluznante, ¿iba a morir? ¿sin importar si cumplía mi propósito a medias, completo o no? &iq
VICTORIA LEVINEMe dolía el pecho como si estuviera a punto de tener un paro cardíaco, algo me avisaba que las cosas no estaban yendo bien, Raquel había salido hace bastante tiempo y Ryan igual, ambos no regresaban y me estaba preocupando, empecé a caminar por toda la habitación en busca de consuelo pero no era capaz de hacerlo, estaba inquieta y asustada. Mis manos sudaban, y volví a tomar mi teléfono y busqué el número de mi mejor amiga, y la llamé, pero como era de esperarse, no lo tomó, y me mandó a buzón de voz, sabía que iba a hacer Raquel, ¿debía avisarles a los d
VICTORIA LEVINEMe dolía el pecho. Sentía una opresión fuerte.—Victoria, ¿qué pasó exactamente?— preguntó alguien, pero su voz sonaba lejana.—¿A dónde fue Isaac?— esta vez escuché otra voz, pero yo estaba pérdida, mirando a un punto fijo con la mirada ida, ¿qué se suponía qué debía hacer?—¡Victoria! respondeDe repente, sentí unas manos heladas sobre mis mejillas, logrando que regresara a la realidad y observando los ojos grises de Gianluca, su expresión me demostraba que estaba preocupado, posé mi vista al rededor y muchos pares de ojos me miraban como si fuera una rata de laboratorio lo que me hizo sentir insegura y extraña, de seguro pensaban que estaba loca.—Hey, hey— dijo Gianluca, tomando mi rostro entre sus manos y enfocándo
Mi cabeza dolía porque sentía unas pequeñas punzadas en la zona occipital, tragué saliva y noté que mi garganta estaba rasposa y seca, intenté mover mis extremidades pero sentí todos mis músculos entumecidos, entonces, con dificultad abrí mis ojos y una pequeña luz provocó que los volviera a cerrar, ¿en dónde mierda estaba?, sentí mi cuerpo pegajoso por el sudor y en donde quiera que estaba, había poco oxígeno porque sentía que me ahogaba. Volví a abrir los ojos y lo primero que noté fue una luz blanca, ¿acaso así era mi camino hacia el más allá?Carraspeé y miré todo después de parpadear varias veces.Estaba en una habitación, las paredes estaban sin pintura y sucias, el suelo era de madera y tenía unas manchas que parecían ser de sangre, solté una mueca d
RYAN MILLERDejar sola a Raquel, no me parecía buena idea pero si quería salvarla, debía buscar la forma de hacerlo, de una manera rápida, por lo tanto tenía que moverme solo. Esperaba que la anciana la ayude a quitar esas cuerdas, pero sabía que ella no podía quitar la magia del cuerpo de Raquel, había hablado con ella ya, y a pesar de mi interés y desesperación, la anciana me había asegurado que quitar eso no era posible, a pesar de la conexión que teníamos los dos, eso no era suficiente, la magia era demasiado poderosa para el cuerpo de mi niña, ¿cómo podía salvarla? no tenía ni la más mínima idea.Me encontraba mal, pero no podía demostrarlo, Raquel tenía que vivir, yo juré protegerla y lo haría aunque me cueste la vida. Por lo tanto, debía buscar algo que me ayude en lo
FLEUR AXGolpes, gritos, cosas destruyéndose, más golpes, más gritos, un fuerte olor a sangre por todo el lugar, sonidos de cadenas, corazones latiendo y otros rompiéndose, todo eso podía escucharlo, olerlo y percibirlo desde la terraza mientras fumaba un cigarro.Sabía que todos se estaban matando, ¿me importaba? en absoluto. Suspiré dando una calada a mi cigarrillo, y mirando el cielo, estaba hermoso. De pequeña me encantaba verlo, parecía que allá no habían problemas y dolor, pero me era imposible saberlo, era un jodido ser inmortal, ¿qué mas daba?—No— escuché una voz a lo lejos con mi oído agudizado. Me encogí de hombros terminando mi cigarro, después de esto, sería libre y podría irme de viaje, a la playa, y conocer nuevos humanos con sangre deliciosa. Me incorporé, lista para
VICTORIA LEVINEEstaba asustada, nunca había visto una pelea tan de cerca. No sabía como ayudar porque ellos eran aún más veloces y fuertes que Matías y yo, nosotros éramos inservibles en estos momentos.Cuando Tyler se transformó y abalanzó hacia a nosotros, Gianluca se interpuso y nos pidió que corriéramos, lo cual hicimos pero no sabíamos como colaborar, mi mejor amigo y yo estábamos en el primer piso de la mansión, en la cocina, ambos no sabíamos que hacer, si Raquel estuviera aquí de seguro habría tomado algo para defenderse, por si acaso, pero yo no sabía que hacer, mi cerebro no quería pensar ni funcionar en este momento.—Vic-Victoria, es-estoy muy asustado— habló Matías a mis espaldas, me tenía sujetada de la cintura por lo tanto podía sentir como su mano temblaba a t