Fernando se estaba volviendo loco. Caminaba sin parar por la cocina queriendo golpear a alguien. No salía de una para entrar en otra. Acaso no podía tener un solo momento de paz? - calmate, por favor fer! Me estás poniendo nerviosa- habló sam desde el otro extremo. - como quieres que me calme?! Un imbécil te envía tu helado favorito y tu estás tan campal como si eso fuese algo normal. Disculpa si eso, no eso no me emociona- dijo disgustado el - estoy furiosa y precupada fer! Solo no lo exteriorizo. Pensaste acaso como sabe que me gusta el helado de uva?- lo miró fijamente, esperando que se de cuenta de la magnitud de sus palabras. - por supuesto que si! Te conoce muy bien. Eso es obvio. - tu no entiendes...- dijo ella, frotandose las sienes. -qué no entiendo? Ese maldito quiere estar contigo. La nota decia "volveremos…" quiere decir que ya estuvo contigo en algún momento. - No. El helado de uva me empezó a gustar, recien con el embarazo. No antes ! Y nadie sabe que de mi antojo
Fernando entró a su despacho silbando, lo que sorprendió a lila, su secretaria. - vaya! Te despertaste del lado bueno de la cama?- habló curiosa ella -vaya? Que pasa Lila? Un hombre no puede comenzar su día contento? Agradecido con la vida por todo lo que esta le ha dado? -de cualquier hombre lo creería, pero tu? Vienes cada día con una cara que da ganas de salir corriendo. Hasta tus colegas me preguntaron si el disparo que habías recibido te dañó el humor o algo -de verdad he sido tan borde? - dijo medio avergonzado. -si, al principio creí que era una secuela de tu... accidente. Pero luego tu hermano me contó lo que estaba sucediendo. Todo este tiempo estuve intentando sonsacarte información pero tu? Ni las luces. Pero hoy has venido muy contentito... asi que ... cuéntame... qué pasó en la boda de Ale? Desapareciste pronto. - como eres Lila! Sam y yo estamos juntos. Nos reconciliamos- dijo pletórico - era hora! Por Dios! quería encerrarlos en una habitación. Tu la mirabas cuan
Samantha hizo lo que creyó mejor, dado el caso; se quitó el cinturón de seguridad y abrió la puerta. Respiró hondo tratando de infundirse valor y se tiró del coche tratando de proteger su cabeza.Al no haber alcanzado gran velocidad, no rodó lejos. Vió como el coche se estampó con la pared y se quedó un momento acostada, asustada por lo sucedido.Luego de que le bajó un poco adrenalina y se tranquilizó, llamó a fernando, tratando de sonar calmada. Él atendió al primer timbrazo.-Hola mi amor, ya te pusieron alguna multa?- dijo risueño-no en realidad, en este instante están llevando tu coche a un taller.- como? Qué sucedió?- la escuchó respirar profundo y se preocupó.- tu coche no tenía frenos. Ahora mismo me voy a la clínica, me van a revisar por las dudas.Fer... observé tu coche y me parece que cortaron los frenos... - pero tú estás bien? A donde irás?Sam le dió la dirección y el prometió llegar lo más rápido posible.>>>>>>>>Cuando fernando llegó a la clínica pregunto por sam
ALGUNAS HORAS ANTESFernando estaba muy preocupado por Sam. Aunque el doctor le había dicho que el peligro había pasado, que ya podían llevar una vida normal, la veía cansada, estresada y asustada. Por eso mismo decidió darle una sorpresa. Habló con su jefe que la conocía mejor que nadie. -bueno, bueno… que te trae por acá? Sam está de licencia y se que ya está en su casa… todo bien?- preguntó extrañado el hombre. -si, si, tu conoces bien a Sam… estos días… ella ha estado bajo mucha presión y quiero que pasemos un tiempo solos, alejados de todo esto. El accidente que sufrió fue provocado, el hombre que le manda esos anónimos… averigüé algunas cosas, contraté a un detective. Vamos muy lento en cuanto a saber quien está realmente detrás de ella. Se que no deja de pensar en todo eso. Por eso mismo quiero llevarla a un lugar en el que ella disfrute, tu eres muy importante para ella, sam me contó que eres como un segundo padre para ella. Solo vengo para avisarte que me la llevo un
Rápidamente Fernando se acercó a ella y le abrazó fuerte, acariciando su espalda. - tranquila mi amor.- desconectó el teléfono y la miró a los ojos.- shhh. - ojala no hubiesemos vuelto! Debemos cambiar de número. No soportaré este tipo de llamadas. - si. Lo que tu quieras. Llamaré a nuestros padres y les avisaré que hemos vuelto. Primero te haré un té si? - yo... claro. Fernando la sento en el sofá y el fue a buscar su celular en el buró donde lo había dejado antes de marcharse. Los llamó y se enteró que su hermano ya habia vuelto. Cuando volvió a la sala ella seguía en la misma posición, con la mirada perdida y acariciando su vientre - ya los llamé. Quieres ir a almorzar mañana a la casa de mis padres? También estarán los tuyos. - claro - y tambien habrá una sorpresa - y eso?- Dijo ella extrañada -mmm ya lo verás... quieres hablar de la llamada? No te lo guardes para ti, mi vida. - creo... que tal vez... solo tal vez ...- dijo mientras se levantaba e iba hacia el cuarto-
Pasó una semana y la pareja estaba feliz, ya todos sabían que tendrían una niña. Al final se iban a casar a fin de mes, e irían a la luna de miel una vez naciera Charlotte. Sin embargo, un día cuando dejó su coche sobre la calle, ya que solo había ido a la oficina a buscar unos papeles, al regresar, encontró sobre el parabrisas, la foto de su ecografía y detrás de ella una nota escrita a mano, que decía: "Podría haber sido nuestra" Al verla algo se removió en ella. Ella conocía esa letra. Pero… ¿cómo? No, no podía ser… Era igual a la de Dan. Aunque… él estaba muerto. ¿qué clase de juego estaban orquestando? Sam no lo entendía.Fue hasta donde estaba su jefe y entró sin siquiera llamar.-tengo que hablar contigo de Dan. – dijo ella sin rodeos.-claro- dijo sorprendido- por aquí todavía lo extrañamos.-no me refiero a eso. Qué posibilidades hay de que esté vivo?-Dan vivo? Por qué dices eso?- la miraba como si estuviese loca-Mira…- le mostró la nota.-es… es la letra de Daniel. Pero
Samantha estaba en su casa, no podía concentrarse, por su cabeza pasaban muchas ideas y ninguna agradable- podrá ser Dan alguien tan vengativo? Ya habíamos terminado nuestra relación hace tiempo, no tiene sentido que aparezca ahora.Él era una persona muy buena, siempre apoyándola y cuidando sus espaldas. Había montado todo el circo de su muerte… por qué? Y a dónde fue? Con quién? Qué provocó que se convirtiera en un ser tan malvado? Lo único que le quedaba claro es que había llevado el amor que un día le tuvo a una obsesión enfermiza. Su cabeza era un tumulto de pensamientos y decidió salir a despejarse, iría a ver a su hermana. Ya se había reincorporado en la empresa así que iría a charlar con ella.Fue hasta su nueva camioneta, ya que se la había comprado luego de haberse estropeado su coche anterior. Condujo hasta el edificio de su hermana y subió a su piso. Allí encontró a Jody, la secretaria de Ana charlando con otras chicas, aparentemente le harían un Baby shower a Ana. Pero se
Samantha miró furiosa a la mujer. Incrédula agarró las fotos y las fue pasando de una en una. En eso se dio cuenta de un detalle que obviamente Debra pasó por alto; pero no lo exteriorizó.-ven aquí, te contaré todo- dijo Debra guiándola hacia una mesa dentro.Samantha se hizo la tonta, era mejor dejarle creer que ganó la batalla. Con la mejor mirada dolida que pudo hacer y con los ojos llorosos se enfrentó a ella.-no te creo, Fernando no me traicionaría.-pues entonces estás mas ciega de lo que pensé dulzura. Tu mírate, cómo crees que Fernando te preferiría a ti por encima de mi?- dijo con altanería.-hablaré con el, me debe explicaciones- dijo entre hipidos falsos.-perderás tu tiempo, pero allá tu. Es hombre, y por supuesto que lo negará. Solo te cuento esto porque me parece despreciable me estuviera dando largas a mi y al mismo tiempo este jugando a las casitas contigo. Pero no te preocupes, conocerás a un hombre mejor.-gracias, no puedo creer que me haya engañado tanto tiempo.