Abigail Miller
Ya nos encontramos hospedadas en el hotel, desde la ventana aprecio la belleza de esta ciudad, me encuentro muy feliz de estar aquí, y todo gracias a Vadim que me sorprendió con el pasaje.
—¿Entonces ya no es malo y ahora es bueno? ¿El santo, Vadim? — pregunta con sarcasmo mi amiga Bonnie.
—No seas dura, él está poniendo de su parte para hacer el bien con Abi, y el darle más libertad es algo bueno ¿Cierto?
—¿Te parece eso bueno? ¡Oh, que bien se escucha decir que ya le da libertad! ¿Acaso es una mascota? ¿Una detenida? Es un ser humano, y todos los seremos humanos somos libres, excepto los que comenten crímenes, y hasta donde sé, ella no ha cometido ni uno — eleva ceja y cruza sus brazos.
—Lo sé, no te quito la razón, nunca debió privarla, pero los hombres muchas veces son brutos. Y
Vadim Ivanov Abi regresa hoy de su viaje, por lo cual he mandado a qué preparen un almuerzo en la casa y que decoren para darle la bienvenida, quizás estoy exagerando con su llegada, se fue por una semana y lo estoy tomando como si no la fuese visto en meses. Yo me encuentro ya en el aeropuerto esperando a que ella haga presencia, me encuentro entusiasmado y feliz por verla, mis manos sudan ansiosos de que salga por esa puerta con esa sonrisa hermosa que tanto me gusta, ya quiero tocarla y besar sus dulces labios. Espero inquieto en mi mismo lugar, hasta que de repente la veo a ella caminar al lado de sus amigas, viene sonriendo y muy alegre por su viaje, coloco el ramo de flores en frente y al fin ella se da cuenta de que estoy aquí, nuestras miradas se conectan y gritan muchas cosas, deseo, felicidad y ansiedad. Abi llega a mí y le entrego con nervios las flores, ella las sostiene para luego besarme ante todos, correspondo a su beso con encanto y fascinación, desde
Abigail MillerCubro mi boca al encontrarme con la sorpresa en casa, Corwin trae en sus manos mi pastel favorito y en su rostro esa sonrisa de felicidad que me indica su mejoría de salud, les doy un abrazo al personal de la casa y limpio esas lágrimas que se me han escapado sin permiso, no me esperaba algo así, solo me fui por una semana, pero veo que aquí todos me habían extrañado como yo a ellos. Me da gusto estar de vuelta en casa con todos.—Bienvenida, señorita, quizás creerá que exageramos, pero esto es una muestra de que nos hizo falta, y que su regresó después de una semana sin verla merecía una sorpresa, que gusto tenerla aquí otra vez — le voy un abrazo delicado a Corwin, sostengo el pastel y pruebo la deliciosa crema de limón. Le doy un abrazo a cada uno y les digo que traje obsequios para ellos, la noticia les alegro el corazón.&mdash
Suspiro, al terminar de vestirme, iré a la habitación de Vadim a pedir disculpas por mi compartimiento de esta tarde, fui grosera con él cuando no había hecho nada, estuve tan enfadada por el hecho de que todos me dicen lo mismo, que culpé a Vadim de ellos tener razón, aunque de cierta forma él ha ocasionado todo esto, pero no era la forma de hacérselo saber. No puedo dejar que mi mente sienta confusión, mi mucho menos dudas cuando yo he sido testigo de lo mucho que él está mejorando, este Vadim no es el mismo.Toco la puerta de su habitación y me abre, eleva su ceja y toma es expresión soberbia como cuando antes de su cambio, le doy un abrazo y él no corresponde, sé que lo hice enojar, pero ya he venido a pedir disculpas.—Siento el cómo te hablé o te hice sentir — me distancia.—Me dejaste muy claro que dudas de mí, te
Vadim IvanovMiro el agua de la piscina mientras bebo Whisky y me fumo un puro, suspiro a cada instante sin tener idea de lo que haré ahora para hacerla volver, Abi se marchó de la casa hace aproximadamente dos horas y no halle manera de hacer que se quedara conmigo. He cometido muchos errores de los cuales ahora estoy pagando, acepte mi amor por ella y ahora soy quien sufre por el daño que le he hecho, y también porque se ha ido sin esperanzas de volver.No puedo regresar al tiempo y cambiar lo que hice, es muy tarde para remediar mis errores, he intentado hacer el bien en el presente y tampoco ha servido de mucho porque he venido arrastrando mentiras del pasado, papá, mamá ¿Qué se supone que haré? Ella se ha ido, me dejó por mis mentiras, me convertí en un hombre malo y no sé que hacer para que Abi me perdone.Estoy decepcionado de mi mismo, decepcione a mis padres, deben estar
Abigail MillerAl fin me han otorgado mi doctorado, estoy tan feliz, tan llena de vida nuevamente que no sé no como festejar la emoción que tengo dentro de mí por mi maravilloso y trabajado logro, he llorado a moco suelto de tantas emociones, estoy feliz, triste y molesta a vez, pero no permitiré que nada de esos sentimientos negativos invadan mi grandiosa Felicidad, trabajé mucho y soporte tanto para cumplir mis sueños, con mi doctorado en manos todo será más fácil para mí, aunque en realidad estoy trabajando en un buffet de abogados, y ella me han asignado un caso, me pusieron a prueba y escucharon mi opinión referente a lo que sucedía en el caso, así que les gustó cómo deduje todo y me lo asignaron para que yo sea la defensora.—¡Corwin! — grito fuerte cuando entro al apartamento.—¡¿Ya?! — asiento y corro a los brazos de él.—¡Si! Estoy tan feliz — empiezo a llorar y él a consolarme.—Felicidades, mi niña hermosa, has esperado tanto para lograrlo, eres un orgullo, por eso te he pr
Vadim Ivanov —Señor Vadim — despierto con mi mano en la cabeza al escuchar que Irish me llama. Bajo de la cama y abro la puerta para ver qué quiere —Se le está haciendo tarde — me muestra la hora, parpadeo y vuelvo a sostener mi cabeza debido al dolor.—¡Maldición! — expreso.—Tenga, un café bien negro para que termine de quitarle la borrachera — lo tomo en mi mano.—Bajo en un momento — lo bebo, dejo la taza a un lado y caminó tambaleándome de un lado a otro, entro al vestidor y tomó lo primero que veo, hoy ella debería ir a la empresa a ocupar su puesto, pero sé que no asistirá, fue bien clara cuando dijo que renunciaba todo, a todo lo que tuviera que ver conmigo, y no lo hará por orgullo, sino porque en cierta parte no desea verme ni un segundo. La entiendo, puedo entenderla muy bien.No sé cómo explicarle a los demás que ella no formará parte de la empresa, lo tomarán como abandono a su cargo y repartirán sus acciones entre todos como si fuese un pastel, no veo justo que ella des
Vadim Ivanov Ya estamos todos en la sala de juntas, al ser yo quien la conozca, me levanto de mi asiento y carraspeo para que todos se centren en mí y no en ella, bebo agua y procuro mantener mis manos secas, es muy complicado que la mujer que amas se encuentre aquí, en el mismo lugar que tú y solo te dirija la palabra para ciertos temas, no sé cómo ella pudo amarme en silencio, cómo pudo soportar verme todos los días y que yo la hiriera, yo estoy desesperado por qué esta reunión acabé para hablarle, para saludarle al menos como es debido, fueron dos largos meses que no había sabido de ella, y ahora que está aquí no quiero dejar que se marche sin que hablemos un minuto aunque sea.—¿Vadim? — pronuncian mi nombre al yo no hablar.—Bien, ella es Abigail Miller, formará parte de nuestra mesa de trabajo, ocupará el puesto que solía ocupar yo cuando antes de la muerte de mi padre, Abi tomará decisiones igual que nosotros, opinara y dará su punto de vista en todos los temas que toquemos cu
Abigail Miller Entro en el apartamento y quito mis zapatos para luego lanzarme sobre el sofá, mi día fue bastante ajetreado debido a que estoy aprendiendo sobre mi área de trabajo, aparte el hecho de que pase casi todo el día junto con Vadim quien me estaba enseñando todo lo que debía hacer, el aprendizaje fue exitoso, pero me costó lograrlo mucho, su presencia me desconcentraba y pensaba en ese poco tiempo que compartir con él. Limpio mis lágrimas y suspiro, ya dejando atrás mis sentimientos, tengo que encontrar la forma de superarlo de una vez por todas, es aburrido seguir con el mismo tema cuando no llego a ninguna solución, es hora de dejarlo ir, de ya sacarlo de mi corazón y entender que no estamos hechos el uno para el otro. Me levanto luego de un rato y camino a la cocina en busca de Corwin para contarle todo lo que aprendí hoy y de cómo fue mi día, mi sorpresa, es no hallarlo aquí cuando se ha vuelto uno de sus lugares favoritos, salgo y subo hasta su habitación, cuando abro