Cap. 7

Después de desayunar, efectivamente Harold nos llevó a una tienda pequeña para escoger una prenda de vestir cada una, con la mirada penetrante de la vendedora dando asco como nos encontrábamos; me dieron ganas de golpearla, pero le debía gratitud a nuestro salvador entonces me controlo. Al final, decidí ponerme un vestido rojo más abajo de las rodillas con unas zapatillas y un saco de lana, por el lado de Angie se colocó un pantalón negro con una blusa amarilla, un saco y unos tenis. Ambas le agradecimos a Harold por su hospitalidad y creíamos que hasta aquí deberíamos de estar juntos; sin embargo, nos equivocamos porque quería seguir cuidando de nosotras. Al principio nos vimos directamente a los ojos, no sabíamos hasta qué punto podíamos confiar en aquel hombre; aunque sabíamos que al inicio era necesario para poder sobrevivir entonces aceptamos.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo