Iker pasó una mala velada junto a sus amigos y a Bianca, la potencial conquista que acabó sin quererlo volver a ver. Monique fue dura con él, pero necesitaba de alguien que le dijera la verdad sin ningún tipo de anestesia. Apolo hubiese tenido más filtro al momento de hablarle, pero estaba de acuerdo con la actitud tomada por su esposa. Los siguientes días, él pensaba en todo lo que había pasado en su vida los últimos años. Él se había acostumbrado a tener a Audrey pendiente de los pasos que daba. Ella era una verdadera dulzura que lo miraba totalmente enamorada a cada minuto. Le encantaba tener su atención, pero lo mataba la culpa de lo que podría sentir su madre al enterarse de la chica en la que había puesto sus ojos. Llegado el domingo, el fue a la casa de sus padres. Necesitaba hablar con su madre y contarle lo que le sucedía, aquella verdad que ella tantas veces había querido saber. -Papá necesito hablar con mamá, a solas- Así fue como saludó a su padre, quien sin dudar tomó
Audrey se sentía presionada y halagada a partes iguales por Salvador. El en verdad sin ser el padre de su niña, había estado en cada momento por mínimo que fuera. -¿De verdad quieres darle tu apellido?- Preguntó con dudas. Esa decisión no era una de la que pudiese retractarse fácilmente -No mentiría con algo así. Estuve en todo momento, cuando te enteraste yo estaba a tu lado, en cada control médico. Si tú no deseas que le dé mi apellido lo entenderé- Ella solo lo besó y guardó silencio. Necesitaba pensarlo, aunque lo más probable era que acabara aceptando -¿Estarás conmigo cuando de a luz?- Salvador sonrió-No me perdería ese momento por nada del mundo. Estaré contigo, no te dejaré sola jamás- La besó y eso la hizo sentir como su corazón latía aún más fuerte que nunca Era imposible para Audrey no enamorarse de Salvador. Cuando estuvo enamorada de Iker, lo hizo de un espejismo, de como ella lo idealizaba; Salvador le había brindado una experiencia real. Ella sin haber esperado nad
Audrey estaba experimentando demasiado dolor y no comprendía por qué Salvador le preguntaba algo como su pérdida de la virginidad. -Le daré mi apellido- El le dijo emocionado, pero ella no notó eso-Serás su padre igual- El siempre la había acompañado, ¿No era eso lo que hacía un padre?-Soy su padre- Dijo, pero ella no lo escuchóSalvador estaba realmente emocionado al saber que sería padre de la niña. El había sentido celos de si mismo todo ese tiempo. La mujer con la que había pasado una noche inolvidable siempre había estado a su lado. *Alondra se encontraba dudando de todo, completamente insegura. Ella quería olvidar a Iker para siempre y sentía que su amor por el había disminuido, pero no amaba a Luca por más que el intentaba ser dulce y atento con ella. El había cumplido su palabra de respetarla y no apresurar sus tiempos, pero no sabía cómo sería él cuando su hijo naciera. Iker había averiguado dónde vivía su ex esposa y había ido a verla. El sentía que no le había pedido
Audrey veía a su hija y buscaba parecidos con alguien, pero la niña era su retrato. Comparar una imagen de ella siendo tan pequeña y una de su hija no mostraba diferencias. Salvador había intentado abordar el tema de la concepción de su hija, pero siempre que lo intentaba era interrumpido. El siempre decía que era el padre de la pequeña y Audrey sonreía con amor porque creía que la quería como su propia hija. El único temor de Audrey era que apareciera el desconocido padre de su hija y golpeara su puerta reclamando sus derechos. Afrodita se sentía devastada al creer que tal vez Iker era el padre de la hija de su mejor amiga. Sabía que él era Poseidón, al menos uno de ellos...*Afrodita llegó a Tentaciones. Necesitaba hablar con Apolo sobre algunos socios y también sobre Tentaciones Tres. -Me di a la tarea de investigar a los deudores de estas membresías y descubrí que no volverán a venir- Apolo se sorprendió-¿Por qué? -Fallecieron. Daré de baja estas membresías ahora, solo desea
Afrodita había asistido a una nueva cita con Christian Rosco. Él se veía tan atractivo en esa velada y ella esperaba haberse vestido de una forma agradable para él. Ella había escogido un vestido celeste tan claro como los ojos de quién tanto le gustaba. Christian la observó embelesado. Su belleza era deslumbrante y su cuerpo tenía unas curvas preciosas que ese vestido resaltaba con sensualidad y elegancia. Después de la cena y del postre, el la besó a la salida del restaurante sin poder soportar un segundo más sin probar el sabor de sus labios rojos y ella le correspondió con dulzura y timidez. Esa misma noche, Christian le pidió ser su novia y ella aceptó sin siquiera la necesidad de pensarlo un minuto. Habían varias cosas que le preocupaban a Afrodita, pero confiaba en que con Christian hallaría las respuestas a todas sus dudas, así como también la calma a sus inquietudes. Ella había decidido dejar de ir a Tentaciones varias noches porque no sentía que era correcto hacerlo esta
Alondra estaba lista para tener la conversación que debía con su ex esposo Iker. Él tenía derecho de saber sobre la existencia de su hijo. Ella buscó la parte superior del disfraz que había usado esa noche junto al cartelito que mostraba su nombre. El pequeño Ignacio se había quedado con Jimena, su amiga oficial de policía. Luca estaba trabajando, pero aún así se mantendría pendiente de su teléfono por si ella lo necesitaba. Alondra se había vestido sencillamente, usando un jean y zapatos bajos junto a una blusa gris muy sencilla. Su cabello se veía hermoso como siempre y su rostro con muy poco maquillaje. Ella había cambiado. En el tiempo que estuvo casada se desvivió por su esposo y buscó incansablemente que el la mirara. Ella se maquillaba a diario y buscaba verse perfecta con la esperanza de que su esposo la mirara, pero cuando su relación con Luca comenzó todo fue diferente. Luca la había visto en sus peores momentos. Él la había acompañado cuando sentía que apenas tenía energ
Iker sentía que todo se había derrumbado en su vida. Él recordaba como era Alondra antes de haber estado juntos y también como fue estar con ella aquella noche que rechazó a Audrey. Alondra no merecía nada de eso. Ella no tuvo una buena primera experiencia, el fue más que nada egoísta esa noche y luego de terminar se quedó profundamente dormido por la borrachera que tenía. Recordó todos los desprecios que Alondra recibió y se sintió peor que una basura. La vez en que ella intentó que el la tocara antes de la boda llegó a su mente. Se resistió tanto tiempo y al final acabó descubriendo que con ella tuvo una noche ardiente en Tentaciones. Alondra era la mujer perfecta, pero solo sintió su ausencia cuando ella había tomado la decisión de dejarlo. Notó su cansancio cuando debió hacer todo solo y ella no quiso ni compartir la mesa con él. Jacob, el padre de Iker, se enteró por su esposa lo que había pasado y pensó que su hijo era el más estúpido de los hombres. Por un momento recordó s
AFRODITA Venir a Tentaciones cada día se vuelve más complicado y he intentado no tener que hacerlo. Es frustrante siempre llegar y ver a quienes me hacen sentir tan incómoda. Se que soy buena intentando evitarlos, pero sobre todo Zaira parece no interesarse por eso porque no deja de acercarse ni a Christian ni a mi. Hoy llegué y me dirigí a mi oficina sin ver ni saludar a nadie. Pocos minutos después entró Audrey para saber que me había ocurrido. -¿Que pasa contigo? Te hablé cuando llegaste- Reclamó preocupada. Ella es incapaz de molestarse conmigo y sabe que este tipo de actitud en mi es demasiado extraña -No los soporto. Vengo aquí solo por ayudarle a Apolo y también a Iker. Zayn me cae mal, pero su novia cien veces peor- Respondí frustrada. Esto lo hago por la amistad y el cariño que siento por los chicos, porque sino no caminaría ni a una calle de aquí -Se que Zayn no te agrada, pero ¿Que te hizo su novia?- Yo no le había contado nada y no evitaría la conversaciónCerré la pu