Leandro decidió hablar con su padre sobre lo que sentía por Nicole.
—Hay una chica en la que estoy interesado, sabes que hasta ahora no he tomado a nadie en serio, ni siquiera a Shelsy, la que por cierto ya me ha cansado, esta chica es diferente, solo que ahora es la esposa de Bruno Leone.—Vaya, hijo si en verdad te interesa solo tienes que conquistarla, si lo logras, tu tendrás a tu chica y yo la satisfacción de ver a uno de los Leone derrotado.—Nunca has querido contarme el porqué de tu odio hacia ellos. —Era algo sobre lo que su padre nunca hablaba.—No tiene caso contarte, solo debes saber que quiero destruirlos. —Sergio sabia muy bien sus motivos, pero no le convenía que su hijo se enterara de sus verdaderos motivos, podría resultar contraproducente porque se podría enterar de cosas que prefería siguieran ocultas.En la mansión Leone, Nicole se encontraba feliz, su madre había llevado a su nana a vivir con ella, sabía que Bruno se molestaría, pero no pudo negarse ante la insistencia de su madre, la nana sospechaba que algo no iba bien, se lo había dicho durante la reunión en casa de sus padres, la notaba muy desmejorada, si vivía con ella podría atenderla como era debido, ella estaría a su lado mientras la necesitará.Tenía una semana que la nana había llegado, Jack no pudo hacer nada para evitar que se quedara, aunque lo intentó, fue una imposición de los padres de Nicole, ella se alegraba que lo hubieran hecho, así se sentía mucho mejor en aquel lugar tan frío.Se encontraba arreglándose en su habitación, cuando llamaron a su puerta, era la chica rubia del servicio, quien se acercó a ella, e hizo un mohín de disgusto antes de comenzar a hablar.—El señor Leone está por regresar, ha ordenado que todas las cosas de usted se lleven a la que fue su habitación.—Mira Alondra, creo que así es como te llamas, de aquí no mueves nada, que sea él mismo quién me lo pida.—¿En verdad necesitas que repita una orden que ya he dado?.Nicole se sorprendió al escuchar su voz.—¡Bruno! Has vuelto. —Por un momento sintió alegría al escucharlo.Al voltear lo vio, estaba recargado sobre el marco de la puerta, tenía los brazos cruzados sobre su pecho, pensó que se veía muy guapo, llevaba puestos unos jeans y una camisa blanca, se le quedó viendo fijamente, Nicole había olvidado la profundidad de su mirada.Avanzó hacía él con los brazos abiertos, él la detuvo de inmediato al ver que intentaba abrazarlo, que manera tan fría de saludarla.—Te he extrañado, ni siquiera has llamado, estaba preocupada. —Dijo haciendo un puchero.De pronto escuchó una voz de mujer que lo llamaba ¿acaso escuchó que dijo amor?, se quedó estupefacta cuando vio unas manos que lo rodeaban por la espalda, no podía creer lo que estaba viendo, esa voz chillona era inconfundible.—¿Escuche bien? ¿lo has llamado amor? —Preguntó estupefacta.—Hola hermanita, escuchaste bien, tengo mucho que contarte, sobre todo lo bien que la pase con Bruno en Italia, ni sabes todo lo que me ha comprado, por cierto todo lo nuevo de las mejores marcas. —Sondra asomo su cara por un lado de su espalda mientras continuaba abrazándolo mientras sonreía burlonamente.Nicole sintió la tierra abrirse a sus pies, se había formado castillos en el aire que se derrumbaron en un segundo, se veía que su hermana estaba disfrutando humillarla de aquella manera.—Imagino que ahora sí me darás mi libertad. —Dijo mientras sentía que un dolor agudo se clavaba en su pecho.—Ni lo sueñes, desde ahora Sondra será la señora de la casa, se quedará conmigo en esta habitación, mañana llegarán dos personas más a hacerse cargo del servicio, ya no harás tus propias cosas, no quiero tener después aquí a tu familia reclamandome, se que tu padre trajo a tu nana e insistió en que se quede para acompañarte, permitiré que se quede, no sea que vengan a fastidiarme si no lo hago.Sondra se le pegaba como sanguijuela resbalosa, no dejaba de tocarlo, Nicole se dió cuenta de que esos dos se habían aliado para fastidiarla, tenía que planear rápido como escapar de ahí, aunque sabía que si lo hacía sus padres le darían la espalda.—Amor, que las chicas del servicio saquen la ropa de Nicole del vestidor para colocar la mía junto a la tuya. —Pidió en un tono que a Nicole le pareció fastidioso.—Alondra, haz lo que la señora te ha pedido, desde ahora en adelante, ella da las órdenes en esta casa. —Ordenó enseguida.Alondra hizo rápidamente lo que le ordenaban, estaba disfrutando verla humillada de esa manera, Nicole salió de la habitación y bajó a la sala buscando a su nana, la encontró en la cocina.—Nanny, desde ahora te quedarás en la habitación junto a la mía. —Las lágrimas amenazaban con salir, respiro profundamente para contenerlas.La nana ya sabía que era lo que ocurría, las chicas de limpieza solían ser muy comunicativas.—Hija ¿qué está pasando? Llamaré a tu padre, por mucho que consienta a tu hermana, esto no lo pasará por alto, ¿quién se ha creído que es para enredarse con tu marido?No tiene ni ina pizca de vergüenza, así no la han educado.—No nanny, sabes que desde que a papá le dió el infarto, no debe de recibir noticias que lo alteren, esto en realidad a mi no me importa ni me afecta. —Intentó mantenerse fuerte ante su nana.Para Bruno había sido difícil estar tan lejos de Nicole, consideraba que lo que hizo era lo mejor, no quería caer en sus redes como lo tenía planeado, Sondra lo había visitado en su oficina para contarle que Nicole había planeado hace tiempo quedarse con la fortuna de Noah y también la suya, se ofreció a ayudarlo para hacerla pagar y él aceptó sin dudarlo.La llevó con él a Italia, la mantuvo hospedada en un hotel, pero en la mansión se quedaría con él, así mantendría lejos a Nicole, no había tocado a Sondra ni lo haría, no le interesaba de esa manera, al fondo de su habitación había una pequeña oficina, tenía un sofá cama, ahí se quedaría, lo que no soportaba era que esa mujer lo quisiera estar tocando, tendría que advertirle, su paciencia se estaba agotando.En la mansión Williams, Noah buscaba de qué manera hablar con Emma, Rina había regresado y podría hacerles daño, Nicole no podía enterarse de quién era en realidad.—Te he notado algo extraño y distante ¿sucede algo? —Preguntó preocupada.—El día de la reunión, cuando salía con Nicole para llevarla a casa, apareció Rina, después de tantos años se atreve a venir.—Eso no puede ser, debemos mantenerla alejada de mi hija, ella la abandonó cuando era muy pequeña, no pretenderá recuperarla ahora. —Dijo apuntó de llorar.—Lo sé, debemos poner vigilancia sin que Nicole se entere, debemos impedir a toda costa que se acerque a nuestra hija.Esa noche Leandro invito a Shelsy a cenar, sería una gran oportunidad para terminar con ella, le pondría claras las cosas, después de todo ella no lo amaba, seguía enamorada de Bruno, sabía que si se lo pedía lo ayudaría a separarlo de Nicole, era una mujer hueca y vacía, ya no la soportaba a su lado, pasó por ella, en cuanto se subió al auto empezó a hablar sin parar como siempre lo hacía.—Hola Leandro, ni te imaginas, la próxima semana es la semana de la moda en París, desfilare para una marca muy importante y quiero que tu me lleves.Leandro no dijo nada, espero llegar al restaurante para hablar con ella, había reservado una mesa apartada, ahí nadie los podría escuchar, pidió una botella de un buen vino, antes que ella empezara a parlotear se decidió a hablar.—Shelsy, debemos hablar. —No sabía cómo la mujer iba a tomar lo que estaba a punto de decirle.—Dime corazón, soy todo oídos. —Pensó que le daría algún regalo o la llevaría a algún viaje.—Debemos terminar lo nuestro, no te amo y lo sabes, estoy enamorado de Nicole desde hace tiempo y tu de Bruno, debemos trazar un plan para separarlos.—Me parece perfecto lo de trazar un plan, pero no entiendo lo de separarnos, podemos llevarlo a cabo y seguir disfrutando nuestros cuerpos.—No me interesa, además Nicole se habrá hecho una idea equivocada sobre nosotros, nos reuniremos tan solo para hablar de nuestros planes.—Eres un imbécil, a mi nadie me rechaza. —Exclamó furiosa.—Mira niña tonta, será mejor que lo aceptes, así que te me vas de una vez déjame cenar tranquilo. —Leandro le habló de esa manera porque sabía que de otra no entendería.Shelsy pensó que nadie la había humillado de esa forma, no desde que Dante la echó de la fiesta de compromiso, tomó aire para tranquilizarse, decidió aceptar lo que Leandro le proponía pues era lo que convenía a sus intereses.—Está bien, reunámonos sólo cuando tengamos que hablar de nuestros planes. —Leandro la volteó a ver extrañado, que bipolar era esa chica.Nicole se instaló en su antigua habitación, no pudo evitar llorar toda la tarde, su nana le llevó un té para calmar los nervios.—Gracias nanny, pero esto que siento en el corazón no se calma con nada.—Hija, bajemos a cenar, tienes que alimentarte, basta ya de llorar, demuestrales que a pesar de todo estás bien, anda ponte hermosa y demuéstrale a ese hombre que tu eres mucho más bonita.—Te quiero tanto nanny, tienes razón lo haré.Se esmero en su arreglo, se puso un corto vestido rojo que delineaba su figura, además de que resaltaba el color de su piel y el n***o de su pelo, maquillo sus ojos de manera que su color parecía más encendido.Al bajar al comedor, Sondra y Bruno ya se encontraban ahí, él la escaneo con la mirada, Nicole los ignoro haciendo como que no pasaba nada, su actitud despreocupada molesto a Bruno.—Aquí hay un horario para los alimentos, no es cuando te dé la gana. —Le reclamo, lo que quería es que se fuera, se veía demasiado provocativa, no quería se diera cuenta como lo ponía.—Una disculpa señor, cenaré con nanny en la cocina, compermiso. —Se alejó intentando caminar lo más sexy posible, podía sentir su mirada sobre ella.Entró en la cocina y su nana le sirvió una deliciosa crema, sabía que era su favorita, de esa manera intentaba levantarle el ánimo, con ella ahí se sentía más fuerte.Cuando terminó de cenar, paso por el comedor para poder subir a su recámara, Bruno se le quedó viendo.—Necesito hablar contigo Nicole, con tu padre hice un acuerdo, que cuando terminarás la carrera, vendrías a trabajar a mi compañía, así que desde mañana a primera hora el chofer te llevará, saliendo regresarás a casas enseguida, yo llevaré a Sondra a la compañía de tu padre todas las mañanas, nos veremos en la oficina.—¿Tengo otra opción? No lo creo, así que mañana me presentaré en tu oficina tal y como lo estás pidiendo, perdón, ahora recuerdo que tu no pides, tu ordenas tal y como lo dijiste, así que lo haré tal y como lo estás ordenando. —Bruno la observaba con atención, parecía una muñeca, se sentía molesto por la forma tan sarcástica en la que se dirigía hacia él.Noto que a Sondra por la cara que puso, no le agrado lo que dijo Bruno, imagino que ya había aprendido a conocerlo porque no se atrevió a decir nada, siguió comiendo en silencio.Nicole se levantó muy temprano en la mañana, se dio un baño, ese día se esmeró aún más en su arreglo, se puso un capri color vino , un top n***o y un blazer al color del pantalón, usó unos stilettos n***os para resaltar su figura, se maquilló ligeramente y se dejó el pelo suelto con algunas ondas, se puso su perfume favorito, se paró frente al espejo y se sintió satisfecha con el resultado.Al bajar Jack ya la esperaba para llevarla a la oficina.—Buenos días Jack.El hombre le respondió con un gesto que intentaba ser sonrisa.Al llegar al edificio, no tenía idea de donde se encontraba la oficina de Bruno, al preguntar a la recepcionista, está la guío hasta el último piso.—El señor Leone me ordenó que la acompañara hasta su oficina.Al estar frente a su oficina, noto que la secretaría no estaba, se acercó a la puerta después de dudar unos segundos tocó suavemente la puerta, entró en cuánto le ordenó que pasara, la oficina de Bruno era amplia, con enormes ventanales que mostraban una
Nicole sintió arder su cara, el calor se fue extendiendo a todo su cuerpo, la beso de manera apasionada como si la necesitará, la alzó y la sentó sobre la isla de la cocina, abrió sus piernas y se colocó en medio mientras seguía besándola, ella sintió que su delicioso aroma despertaba sus sentidos, hizo un esfuerzo logrando reaccionar, lo empujó y se alejó de él.—¿Qué es lo que te pasa, piensas tenerlos a las dos a tu disposición? Eres un cínico.—No sentí que te disgustara tanto, correspondiste a mis besos y a mis caricias, eso te demuestra que eres y serás por siempre mía, mía en el momento que yo lo decida. —Dijo mientras la observaba y una sonrisa burlona se dibujaba en su rostro.Nicole dio la vuelta para alejarse de ahí, otra vez como idiota se había dejado llevar por sus instintos.Bruno crispó los puños mientras la veía desaparecer por el pasillo, ni el mismo sabía por qué su cuerpo reaccionaba de esa manera cuando estaba cerca de ella.Al otro día Nicole se despertó muy temp
Dante no permitió que Bruno amargara la reunión de Nicole, así que lo llevó al despacho,él accedió más a fuerza que de ganas, tomaron algunas copas, tenía tiempo que no se reunían a conversar como hermanos, las veces que se veían en la oficina era tan solo para hablar de negocios.Más tarde Dante se despidió cuando noto que los amigos de Nicole ya se iban, Bruno subió de inmediato a su habitación, estaba molesto y no quería ver a Nicole, Sondra había subido en cuanto vio que era ignorada por Nicole y sus amigos, ni siquiera Dante la saludo, Bruno agradeció que ya estaba dormida cuando él entró.Por la madrugada, su mente no podía parar, eso le impedía dormir, pensaba en que parecía mentira que Nicole fuera así, pero las pruebas en su contra eran muy claras, se levantó y se dirigió hacía su habitación, estaba dispuesto a hacerla sufrir, ella tenía que pagar, eso no le impediría disfrutar de su cuerpo, estuvo tocando a su puerta, pero no recibió respuesta, penso que quizá estaría muy c
Nicole reaccionó furiosamente al atrevimiento de Bruno, ya estaba cansada de sus juegos y de que se sintiera su dueño, ella estaba pagando por algo que no fue su culpa y no estaba dispuesta a seguir tolerando más.—Eres un imbécil, un patán, no te me vuelvas a acercar nunca, si me dieras el divorcio y no volviera a verte jamás, sería la mujer más feliz de esta tierra.—Vaya, tienes agallas gatita, no se te ocurra volver a hacer lo que hiciste o voy a olvidar que soy un caballero, te informo que el próximo sábado asistiremos a la gala benéfica que ofrecen tus padres, el chofer te llevará después de la oficina a elegir el vestido que usarás esa noche, ya hable con madam Sutie, te estará esperando, está noche espérame en tu habitación, no pongas llave o soy capaz de tirar la puerta.Nicole no podía creer el descaro y atrevimiento de ese hombre, fingió aceptar su orden para no continuar con esa discusión.—No tengo ánimo de discutir, será como usted ordene, amo y señor.Salió furiosa de l
Nicole estaba extrañada por la actitud de esa extraña mujer, se le quedó viendo fijamente, en ese momento recordó, que ya la había visto al salir de casa de sus padres.—Ahora recuerdo, usted es la mujer que se acercó a mi padre el otro día. —¿Acaso era su amante? Qué cinismo tan grande tenía al atreverse acercarse a ella, si mencionaba a su madre, la pondría en su lugar.—Así es, tu padre no ha querido hablar conmigo, ha puesto vigilancia para alejarme de ti. —Nicole la miraba asombrada, ¿qué demonios pretendía esa mujer? ¿Porqué querría acercarse a ella?—¿Usted tiene algo que ver con mi padre? ¿Es su amante? —Necesitaba saber la verdad, se sentía demasiado inquieta.—Fui su esposa hace veinte años. —Aquello era lo último que Nicole pensaba escuchar.—No puede ser ¿Era usted su esposa cuando mi madre estaba embarazada de mí? —Preguntó confundida, definitivamente esa conversación no era por nada bueno.—No, es más complicado que eso.—Entonces explíqueme por qué no
Nicole estaba completamente furiosa, para ella en ese momento, Bruno era un completo idiota, fue a su oficina porque estaba decidida a intentar una relación con él a pesar de todo, cuando le dijo que entre ellos no había nada, aun cuando por la noche le hizo creer lo contrario, sintió que lo merecía por no tener dignidad ni amor propio, trato de mantenerse tranquila y no mostrarle lo que estaba sintiendo, pero cuando le dijo que sería suya cuando le plazca, se sintió furiosa —¿A qué demonios estaba jugando?Sabía que debía alejarse pronto, por un momento pensó que las cosas entre ellos podrían mejorar, quería intentarlo por su hijo, pensó en darle la noticia de que sería padre, pero después de lo ocurrido sería mejor que no se enterara.El chofer la llevaba de regreso a la mansión, Jack no había ido en esta ocasión, era el momento perfecto para escapar, decidió enviarle un mensaje a Rina, necesitaba su ayuda, sabía que no se la iba a negar, le diría al chofer que la llevara a la plaz
Por un momento, Nicole pensó que Gío y Rina se habían molestado con la noticia que les había dado, después de un incómodo silencio por fin hablaron.—Estoy profundamente emocionado con esta maravillosa noticia, hace poco tiempo pensaba que estaba completamente solo en este mundo y ahora tengo una hija y pronto seré abuelo, la vida me está recompensando grandemente —veía a su hija con infinita ternura, las lágrimas amenazaban con empezar a salir.—Estoy sin palabras, para mí es una de las mejores noticias que he recibido en mucho tiempo. —Rina estaba muy emocionada con la noticia.Nicole no pudo evitar llorar, esas dos personas que apenas conocía, le estaban dando el apoyo que necesitaba desde hace tiempo.—Me gustaría comentárselo al médico, me da temor que al hacer la prueba de ADN pueda resultar dañado.—No lo creo, pero es mejor que el médico resuelva tus dudas.—Contestó Gío para tranquilizarla.Salieron hacia la clínica, Nicole había buscado una por internet, la eligió al azar, a
Nicole se encontraba feliz con la llegada de Sara, al verla, no pudo evitar correr hacia ella, la nanna la abrazo feliz, Gío y Rina pudieron ver el gran amor que se tenían, al estar ya en la villa, Nicole mostró a Sara su habitación, justo enfrente de la suya.—Nanny, simplemente estoy feliz de que estés aquí conmigo, imagino que estás cansada, te dejaré para que descanses y luego bajaremos para que comas algo.—No te preocupes por eso, dormí durante casi todo el vuelo, me han alimentado muy bien. —Sara observó su abultado vientre, sonrió al pensar que faltaba muy poco para que Nicole se convirtiera en mamá.—Que bien! Entonces cuéntame como están las cosas en Estados Unidos.—Tenía una gran curiosidad por saber cómo lo había tomado Bruno.—Hay hija, no te gustara lo que voy a contarte, las cosas están muy mal, Sondra se ha encargado de envenenarle el alma a todos, les ha hecho creer que has escapado con otro hombre, según con un ex novio tuyo, yo no me creí ese cuento.—Imagino que B