Nikolay
Miro a la dulce mujer que tengo en mis brazos, el olor que proviene de ella es simplemente encantador, pero lo que más me gusta es la furia en su mirada. Sus dedos se clavan en mi brazo, traga hondo antes de intentar alejarme de su cuerpo. Vuelvo a colocarla en línea recta sobre el suelo, bajo mis manos descaradamente hasta la curva deliciosa de su trasero y antes de que me dé cuenta estoy siendo abofeteado por esta mujer.— Mne nravitsya, net mne temy (me gusta, no me temes )— susurro pegándola más a mi cuerpo — , me enciendes.Murmuro cerca de su mejilla, ella intenta apartarme golpeando mi pecho, pero es demasiado débil o pequeña para hacerme algún daño, suspiro antes de tomarla en brazos a pesar de sus negaciones. Me encuentro con Irina en la sala sentada esperando alguna orden.—Cocina algo ligero, pero consistente — le pido — , déjalo en la puerta de la habitación.—¡Bájame, maldito! — chilla la mujer que tengo en brazos— : no me toques, ¡Suéltame!Ignaro sus quejas, Irina camina hasta la cocina mientras yo subo las escaleras y dejó a la mujer que ha golpeado constantemente mi pecho sobre la cama. Tomo una de sus piernas con rapidez. Ella intenta alejarla, pero soy mucho más fuerte y cuando nota el clic de la cadena alrededor de su tobillo la furia solo aumenta.—¡Tu maldito! — jadea — , qué derecho tienes a hacerme esto — niega — : porque yo, porque a mí.Su voz muere, su respiración se quiebra y la veo gemir antes de comenzar a llorar en silencio, las ganas de correr a su lado para abrazarla se mueven bajo mi pecho, pero no lo hago. Saco mi chaqueta para tirarla sobre el tocador. La mujer que gime en la cama me mira con el ceño fruncido de un momento a otro.—¿Qué estás haciendo?Ella sorbe por la nariz, rodeo la cama dejándome caer a su lado sobre el colchón, e intento no reaccionar a la forma en que se encoge sobre las mantas para apartarse todavía más.—Voy a dormir un rato — respondo — ; probablemente deba irme a mitad de la noche, pero quería estar aquí, contigo, zvezda.—Yo no quiero estar contigo — respondo — lárgate — sorbe por la nariz — , no quiero ver tu fea cara.—Lo siento por eso — saco mis botas húmedas por la nieve — pero es lo único que verás todas las mañanas por el resto de tu vida, zvezda.—No pienso quedarme aquí — me advierte — no pienso vivir con un monstruo que ni siquiera me dice por qué me secuestro.—Te estoy protegiendo — respondo alzando las mantas para meterme en ellas — : mejor conmigo que con tu ex esposo.Ella traga al escuchar la mención de mi hermano, se aleja de la cama hasta salir de la misma y se deja caer sobre el suelo haciéndome sentir más despreciado de lo que pude haberlo hecho jamás, Maldigo para mí mismo antes de salir de la cama. Ella trata de correr hasta el baño, pero se lo impido.La obligo a meterse una vez más a la cama, cubro la mitad inferior de su cuerpo con una manta y luego me meto una vez más en la cama. Sujeto su brazo impidiéndole alejarse. Ella forcejea conmigo, así que me canso de esta lucha y la rodeo pegando su cabeza a mi pecho.—Estoy cansado Zvezda — cierro mis ojos — podemos discutir mañana, ahora solo quédate quieta.Ella me maldice, se mueve en mis brazos y la aprisiono más contra mi pecho. Mi cabeza se hunde en la mata de cabello oscuro que huele a algún tipo de fruta tropical, provocando el deleite más absoluto para mi estresado cuerpo.Fue una mañana difícil, fue una tarde molesta y la incesante espera de que mi móvil suene para darme la noticia que todos esperan solo me hace querer matar a alguien más. Debería haberme quedado en la casa del Vor, la mayoría de mis hombres están ahí, pero quería tener algo de calma, quería estar con mi pequeño conejillo.Un conejillo inquieto que me está robando el sueño, pero que sin duda calma mi estresante existencia. Nunca pensé que podría tenerla así, cuando la vi aquella vez, parecía una de esas obras de arte que mi tío colecciona. Perfecta e inalcanzable para un simple bastardo como yo.Los recuerdos de esa noche pueblan mi mente y mientras disfruto de la mujer ahora calmada que envuelvo en mis brazos me permito regresar una vez más a ese momento años atrás.—No vayas lejos Mikail — el vor, me señala con un dedo — no creo que pueda tardar mucho con esta delikates — la chica a su lado sonríe — debemos asistir a la cena en unas horas — , golpea en el trasero a la chica — así que debo darme prisa.—Si Vor.Respondo antes de salir de la habitación, miro a mi alrededor sin mucho que hacer realmente y me decido ir a fumar hacia la calle, camino entre los edificios hasta el callejón adyacente. Prendo mi cigarrillo agobiado un poco por los desagradables recuerdos que me traen estas calles y dejo que la nicotina amaine mis pensamientos.La voz dulce y emocionada de una chica me hace mirar hacia la otra acera, la chica de cabello rubio con un vestido blanco que llega hasta sus rodillas continúa su conversación ajena a mi existencia,sin embargo,yo no puedo dejar de mirarla.Algo se apodera de mi.Ella parece un ángel en medio de toda esta multitud. Ella da dos pequeños pasos sobre sus zapatos de color blanco distraída en su llamada,de repente ancio tener el poder de tomarla y llevarla conmigo,pero solo soy un simple vori de la Bratva.Ademas una mujer como ella jamás estaría conmigo,no pertenece a mi mundo.Sus ojos verdes miran hacia mi dirección, sonríe de una forma tan hermosa que el cigarrillo en mis manos cae al suelo y siento mi corazón detenerse cuando extiende su mano para hacer un gesto de saludo.Me separo de la pared incrédulo de que me esté saludando, la luz del semáforo cambia a verde y antes de que pueda moverme un poco más,una mujer se acerca a ella. Besa dulcemente su mejilla antes de que ambas caminen hacia la izquierda sobre la acera.Ni siquiera me doy cuenta de que estoy siguiéndola hasta que termino frente a una tienda de ropa para chicas. Entro en ella sintiéndome extraño entre tantas prendas delicadas, e intento aparentar normalidad cuando una empleada se acerca. Su rostro palidece cuando ve mi cicatriz.—Necesita algo señor — puedo ver el miedo en su rostro — ¿Busca alguna prenda en específico?—Eso — señalo lo primero que veo — quiero eso.La chica de la tienda mira el maniquí, toma el pañuelo que cuelga de su cuello antes de correr hasta la caja para envolverlo. La risa del dulce ángel se vuelve entonces más cercana. Un delicado aroma floral entra en mis sentidos y mis dedos hormiguean cuando su cabello está a centímetros de mí.—Su compra, señor.…..El sonido de mi móvil me hace abrir los ojos, la oscuridad que me rodea me hace sentir ligeramente desorientado, pero el cálido cuerpo junto al mío me recuerda rápidamente donde estoy. Me desprendo de la dulce chica en mis brazos. Contesto el móvil tratando de hablar en voz baja.—¿Murió?—Sí, Vor, el señor Vasili ha muerto.Mi pecho duele ante la noticia, miro a la mujer a mi lado un segundo antes de tomar mis cosas para marcharme. Saludo al guardia que descansa del otro lado de la puerta y subo al Jeep que use para llegar aquí hace unas horas.Me recuerdo que no tengo tiempo para sentimentalismo mientras lo prendo, ella está aquí para algo más, ni siquiera debería haber venido aquí en primer lugar. Le hice una promesa a mi tío y dejarme llevar solo hará más difícil las cosas.Mikhail Puedo ver a todas las personas de la organización aquí, aliados y amigos, socios, todos los que alguna vez tuvieron relación con el Vor. Me corrijo, mi tío. Tomo un trago de mi vaso, pero no puedo evitar notar el pesado anillo que ahora llevo en mi dedo. Nunca quise ser el Vor. Ni siquiera cuando me convertí en consejero, porque esto lleva demasiada responsabilidad, responsabilidades que no estuve jamás dispuesto a tomar en mis manos. Las cosas cambiaron ahora, necesito de todo esto para cumplir la última voluntad del hombre que me salvó, tener este poder es la única manera de vengar a mi madre. Trato de encontrar algún recuerdo, algo dentro de mi mente, pero no soy capaz, no hay nada en mi cabeza más allá de las calles, las peleas y mi cicatriz. No recuerdo como la hicieron, pero si recuerdo el dolor, la sutura que me dieron en alguna casa de acogida de la que probablemente hui, pero eso no importa ahora. Me muevo entre las personas, todos se inclinan ante mí haciendo que
ReginaMe despierto sola en la habitación, parpadeo varias veces acostumbrándome a la luz que entra por la ventana y realmente agradezco que esté sola. Bajo de la cama para ir al baño. Mi vejiga está a punto de explotar como parece hacerlo desde hace unos meses y suspiro del gusto después de dejarlo ir.Tomo una ducha después de hacer pis, el calor del agua relaja un poco mis tenciones. Supongo que si tuviera que evaluar mi situación diría que estoy mucho mejor ahora. Salgo del baño media hora después. Me encuentro con la chica Irina tendiendo mi cama.—¿Estás bien? — cuestiona — : el vor dejó ropa para usted — me sonríe — , no la subí antes porque no quería molestarte.—Gracias…Murmuro realmente antes de bajar de mirar las bolsas, realmente no me estoy resignando, es solo que tengo dos opciones y definitivamente quedarme desnuda es lo último que deseo ahora mismo. Me meto al baño con un juego de ropa una vez más. Realmente no es algo excesivamente llamativo, un suéter de lana a jueg
ReginaVeo por la ventana como el hombre que me ha besado hace un segundo, agradezco que se marche porque esa puerta definitivamente no iba a detenerlo. Observo como su auto se marcha lejos de la cabaña. Mi pecho palpita de esa forma tan extraña que provoca, la sensación que aún mantiene mi piel extrañamente cálida no la comprendo.Trago grueso llevando una mano a mis labios. El calor de su cuerpo sigue sobre mi ropa, la forma en que su boca tomó la mía atasca mi respiración mientras el recuerdo hace hormiguear mis labios. Un escalofrío recorre mi espalda, las mariposas en mi estómago se mueven inquietas sin que pueda hacer alguna otra cosa.Me alejo de la ventana para caminar hasta la cama, me dejo caer sobre el colchón, miro el barnizado techo de este lugar y acaricio mi vientre preguntándome como podré salir de todo esto. La mirada en sus ojos me aterró más de lo que pudo alguna vez hacerlo Ramsey, la frialdad de mis palabras se clavó directamente en mi pecho.Es absurdo que me sie
NikolayMe levanto de la cama donde he pasado las últimas horas, miro a la mujer desnuda ahí y siento disgusto conmigo mismo, pero no quiero portarme demasiado cruel con mi dulce ángel, pero ella sobrepasó todos los límites al golpearme. Demonios, nadie nunca me golpeo en las bolas o me amenazó como ella lo hizo y definitivamente eso me enfureció, pero también hizo que me gustara un poco más.A pesar de todo lo que ese idiota le hizo, ella no se deja dominar por su miedo, puedo verlo ahí en sus ojos a pesar de que sigue tratando de ocultarlo y es algo formidable que no se deje intimidar por mí. Miro a la silueta dormida de Nelly, ni siquiera debí venir aquí, lo único que hice fue pensar en Regina. Me pongo en pie cuando no puedo seguir en la cama.Me doy una ducha para quitar su olor de mi cuerpo, pues de alguna manera ahora no me resulta nada agradable. No me despido de ella antes de salir de su departamento. Subo a la moto que pedí traer a uno de mis hombros y conduzco directamente
Regina Mi pecho late incontrolable, mientras el hombre completamente desnudo que me tiene sujeta de la cintura sigue durmiendo plácidamente. No sé exactamente en que momento me quede dormida, pero estar sobre el masculino pecho de mi captor mientras él me rodea con sus brazos es simplemente insoportable. No quiero despertarlo, no quiero moverme y esa es la única razón de que siga escuchando los calmados latidos de su corazón. Trato de no mirar hacia abajo, así que mis ojos se encuentran con el rostro relajado del hombre que me mantiene cautiva, viéndolo ahora luce menos aterrador de lo que me gustaría, la mandíbula masculina y los carnosos, pero firmes labios le dan un toque demasiado sensual. Respiro hondo engañándome a mí misma por estar pensando este tipo de cosas cuando estoy aquí en contra de mi voluntad. Ramsey nunca durmió en mi cama o me sostuvo en sus brazos, pero definitivamente esto no es mejor, dios, este tipo es peligroso. Irina me explico lo que es, o mejor dicho quién
NikolaySalgo de la cama mientras la chica adorable que me gustaría realmente cuidar de otro modo aún duerme. Nunca nadie me ha importado realmente, en especial si son parte de alguno de mis tratos, pero ella me hace querer realmente cuidarla. Protegerla.No puedo hacer eso, lo sé, lo entiendo y es por eso que ni siquiera sé que voy a hacer a partir de ahora, no puedo dejarla aquí mucho tiempo. Tampoco puedo llevarla a casa o mejor dicho no quiero llevarla a casa porque eso solo traería muchos más problemas.Me detengo en la entrada de la cocina, me encuentro con la chica aún en pijama que Alex me envió. La nueva adquisición de mi amigo en realidad. Ella hace una reverencia rápida ante mi presencia.—¿Necesita algo vor? — murmura rápidamente — , aún es temprano, pero si lo desea yo podría…—No vuelvas a usar mi casa para tus cosas — gruño — : es una falta de respeto para mí.—Alex dijo que…—Alex ya sabe bastante bien como son las cosas — la miro — ; ahora lo sabes tú también, estás a
ReginaEl frío golpea mis pies por encima de las pantuflas, el hombre que me lleva a rastra hacia la parte exterior de la casa detiene sus pasos cuando estamos justo en medio de la nieve y el bosque.Mi pecho se siente de forma extraña mientras miro alrededor, la respiración se atasca en mis pulmones mientras el impulso de correr dentro una vez más pica bajo mi piel.—Este lugar es mejor que el cuarto donde te tenían — me dice — , puedes ir donde quieras mientras te mantengas a la vista o estés conmigo, así que no solo te quedes en la habitación, no te hace bien.¿No me hace bien?Qué infiernos sabe él de lo que me hace o no bien, estoy atrapada, encerrada por segunda vez en manos de un hombre que dice no poder confesarme por qué y que me aterra aún más por la forma en que me hace sentir así que estar fuera, con él siendo tan, tan…Ni siquiera sé cómo referirme a esto. El hombre en cuestión me toma del brazo una vez más, más nieve se cuela en mis pantuflas cuando me empuja un poco más
NikolayEl doctor me mira con calma mientras muestra los resultados del chequeo de mi esposa, nos sirvo un trago mientras lo escucho.—Todo parece estable, su vientre crece a un ritmo normal y pues el chequeo extra que me pidió — carraspea — , no parece tener ningún daño preocupante en sus partes femeninas, aunque le aconsejaría no tenerla tan apartada de la ciudad.—¿Qué tiene de malo aquí?—Su… — duda — : compañera tiene indicios de subida de tensión y estrés, quizás llevarla a un lugar más accesible sea mucho más preventivo.—No puedo llevarla a la ciudad, esto es un tema confidencial.—Era solo una sugerencia, si el clima se vuelve inhóspito y algo sucede podría poner en peligro al bebé y la vida de la madre en realidad.Saber eso me preocupa, pero no creo que sé a buena idea que la lleve a la sede justo ahora después de la muerte de mi tío. Los rumores comenzarían a circular y probablemente arruinen mi plan porque de sorprender al bastardo de mi hermano con la posesión de su dulc