"Qué hermosa”, pensó Sonia con ironía". Ni siquiera puedes tener miedo de algo que no sabes. La sensación de estar cerca de la muerte y no saber realmente cuándo llegará y llamar a su puerta, pero verse obligada a vivir con su fantasma día a día ..."
Los sonidos de la risa baja desviaron sus pensamientos. Cruzó la habitación hacia la cocina rápidamente y se detuvo asombrada cuando se encontró con esa escena.
Su madre y Brandon sentados en la pequeña mesa de la cocina, tomando café y hablando como viejos amigos. Nunca había vuelto a hablar con él, ni siquiera por teléfono, y honestamente no he tenido una cabeza para él ni para nadie en los últimos tiempos. Pero verlo allí tan suelto y relajado, tan hermoso y sexy, con esa camisa blanca y jeans maltrat
Día tras día, ella conocía a ese hombre aún más. Generosidad sin fin, cualquiera necesitado que llamara a su puerta y le preguntara qué comer, le daba trabajo. __Trabalho genera dignidad, honor. -dijo. Sin embargo, no admitió fracasos, ni deslealtad. Con Duarte no había segunda oportunidad. El amor que sentía solo aumentó. Tenía la impresión de que explotaría con tanta alegría. Agradecí a Dios todos los días por estar viva, por haber añorado una etapa de su vida, constituyendo su familia, por haber vivido lo suficiente como para encontrar lo que tanto buscaba: el amor verdadero. Pero... Enuna mañana gris de septiembre en Canela, Duarte la encontró encogida en la cama, llorando de niña. Su mirada exhibía toda la desesper
Beth sonrió entre las lágrimas de sus ojos. No sabía cuándo iba a terminar, y ni siquiera quería pensar en ello. Siempre fue sensata, sensata. Ahora lo que más quería era ser feliz, y si para eso necesitaba ser irresponsable, así sería ella. Y también desempleados. Sin embargo, no podía perdonarse a sí misma por estar tan involucrada en su pequeño mundo y no darse cuenta de que su amiga Sonia estaba tan enferma. No podía perdonarse a sí misma por ser tan feliz en un momento como el de Sonia viviendo una pesadilla. Lloraba todo en ese taxi. Frente a Redhead, sería fuerte y seguro apoyarla en ese momento difícil.Lana conducía sin prestar atención a los semáforos, los autos de al lado, nada a su alrededor. Había estado en el cielo hasta esa llamada telefónica
Soñar no cuesta nada. O puede costar demasiado. Arrodillada en el suelo, aferrada al inodoro, Sonia vomitó sin parar. La quimioterapia literalmente la estaba terminando. Brad no sabía qué hacer para disminuir esos horribles síntomas causados por el medicamento, que irónicamente servía para combatir las células malignas. Sin embargo, buscó mantener una actitud controlada y tranquila. Por dentro estaba devastado. Le ayudó a levantarse y detenerse frente al fregadero. Sonia se miró en el espejo y su figura la asustó. Las lágrimas saltaron a sus ojos rojos e hinchados
Lana sonrió diabólicamente cuando entró en la sala de escritorio de su esposo y no la vio allí. Le dio tiempo a su esposo y a su amante para prepararse cuando anunció su llegada por teléfono celular. Cada segundo de su venganza fue elaborado con extremo cuidado. No quería que nada salió mal. Pero no hubo tiempo para que la chica saliera de la habitación que se escondió en el baño semidesnuda y asustada. Armando sonrió torpemente, rojo, jadeando cuando la vio entrar por la puerta, casi siendo atrapado in fraganti. En sus ojos, sin embargo, había un destello de placer al ver a la mujer esa tarde. Lana se veía hermosa con un vestido amarillo ajustado, en contraste con su cabello oscuro y sus ojos verdes. Estaba extasiado y se olvidó por completo de su amante en el baño. __Que debemos el honor... dy su visita tan sin previo aviso
Por la noche en los brazos de Brad, después de amarse como nunca, dijo en un tono suave._-Podría morir hoy... y morir feliz... __Mas no va a ser hoy, Pelirroja. No, seguro que no lo hará. Deseaba poder tener tiempo para vivir, mucho más, momentos como los que vivió ese día. Quería tener tiempo para hacer un deseo más. Un deseo hasta entonces oculto, casi secreto que durante días había estado habitando sus sueños. Y es por eso que oraste solo por ella. "__Concédeme más de este deseo, Dios mío... Y te juro que no te pediré nada más y puedes llevarme cuando quieras ..." Entre despedidas y llegadasCapítulo16
Cuando se despertó, viéndose a sí misma en un hospital y entendiendo lo que había sucedido, Bia lloró decepcionada. No podía creer que estuviera viva, quetodavíaestuviera viva después de todo este esfuerzo por suicidarse. ¡Días sin comer, sin levantarse de ese sofá, por nada! ¡Todo en vano! __Nem probar cualquier otra cosa, ¡mujer despeina! Abrió los ojos ante esa voz imperiosa y enojada. Recordé esa cara. Ese tipo calvo por elección. El look verde. __No soy un ángel. ¡Soy el diablo mismo enojado contigo! Confundida, y tratando de ordenar los pensamientos, preguntó: __Quem lo llamó... ¿Raúl? En este punto, Lana entró en la habitación.__Eu, perra egoísta! - ella
Lana miró a una de sus amigas que estaba perpleja._-Sé que es raro, nunca me gustó la misma fruta... paraconocer aEl Rumano. Y si me preguntas, ¡puedes censurar no me importa! Nunca me han tocado, me ha encantado la forma en que ella me ama. Estoy cansada de la estupidez, la traición, la falta de contacto de los hombres en general. ¡La insensibilidad de estos machos hijos de puta! Y entonces no es mi culpa si me enamlozo... ella se calló avergonzada. Bia tomó sus manos y besó la parte superior cariñosamente. __Não censura, Lana. Por el contrario, estamos muy contentos por ti. Si este es el verdadero camino hacia "tu" felicidad, solo tenemos que animarte y regocijarnos por ti. Los ojos de Lana se represan y ella sonrió aliviada. __E Bia? --preguntó Beth después de un ra
Poniendo tu pie en la yaca Autor Emiliana Vaz Mi eterna gratitud a Verinha, a quien construí el personaje de Bia después de contarme un pasaje de ella en la historia. Como ella misma dijo una vez: "¡Puse un pie en la Jaca total! ¡Y quién no ha puesto ya la primera piedra!" Dondequiera que estés, sé que es un lugar lleno de luz y alegre como lo fuiste aquí en la tierra, te dedico este libro. (Edición, corrección, portada de Emiliana Vaz). La pasión es la embriaguez de la mente. La pasión vuelve el mundo Emiliana Vaz Esta obra está basada en algunos hechos reales, y mi participación con los personajes, puramente ficción. (Bia divagando...) __Quem inventado la frase: "¡Quien vive en el pasado es museo” es un imbécil, gilipollas”! ¿Cómo puede alguien querer excluir el pasado cuando es una referencia nuestra hoy? __No entiende, Bia. __ ¡Ah, sí! ¿Cómo podrías no entenderlo? __Não entender, ¿te gustaría ser más específico, po