— ¿Señorita? —Salgo de mi ensimismamiento al escuchar la voz de una señora —. ¿Se encuentran bien, señorita, necesita ayuda con algo?Desplazo mi mirada hacia la señora con una distancia de unos cuantos metros de dónde me encuentro. No es hasta ese momento que notó que tengo una cantidad de tiempo desconocido en el mismo lugar; en el medio de la plaza del centro comercial.«¿Cómo termine en este sitio, y en esta posición exactamente?», bajo mi mirada, notando que me encuentro en el suelo.— ¿Necesita que la acompañe a un hospital? —Me sorprende la amabilidad con la que está señora, una completa desconocida para mí insiste en ayudarme.—No se preocupe, señora, me encuentro bien. Es solo que salí sin comer, ese es el problema —Le comento con una sonrisa aceptando la mano que me ofrece para levantarme.—No hagas eso, cariño, es muy peligroso que salgas sin comer. Podría ocurrir algo mucho peor, pero gracias a Dios no fue más que un leve desmayo —Cuando escucho esa palabra es que todo vie
— ¿Todo bien, hermano?Me quedo sin responder unos segundos mientras leo los papeles que tengo en frente. Que no son más que un par de denuncias que han hecho las personas, como robos de sus pertenencias o acaso por algún vecino u conocido.—Sí, ¿Por qué, debería de estar mal por algo? —Respondo con calma sin apartar mi mirada de los documentos que me encuentro leyendo.—Bueno, no estoy seguro, es que tienes unos días extraño. Es normal que seas impersonal, pero tenéis varios días más serio de lo normal.—Lo estás pesando demasiado, quizás el de problema eres tú y estás desviando tus preocupaciones a mí —Respondo rápidamente sin prestarle verdadera atención a sus palabras.—Deja de desviar el asunto hombre, si tienes un problema puedes muy bien hablarlo conmigo. ¿Por qué guardarte las cosas? —Se vuelve tan intenso con el asunto que no puedo hacer más que dejar de leer lo que tengo frente a mí —. Sé que nosotros los hombres no hablamos de sentimientos y esas pendejadas, pero si tienes
— ¿En serio ya te tienes que ir?—Sí, es que ya he estado faltando varios días al trabajo, si no voy en lo que queda de semana mi jefe es capaz de descuartizarme —Pongo cara de tragedia luego de decir esto.—No te creo, ¿Cómo puede hacer con algo como eso? —Me pregunta con el ceño fruncido.—No conoces, es muy serio, así que haber faltado dos días es como si cometido el peor error laboral para él —Niego con mi cabeza de solo pensar la mirada intimidante que me dirigirá Karim.—Es que no debiste faltar tantos días cariño —Comenta Vaugh con una mirada extraña.—Es que tuve que apartarme un poco para poner en orden algunas cosas personales. Pero, ya está todo bien, así que no hay excusa para estar faltando por más tiempo —Digo, ocultando el hecho de mi verdadera razón al faltar.— ¡Wow!, Y yo suponiendo que era una de las razones por las que hayas tenido que faltar, me hieres —Una carcajada sale de mis labios al ver cómo se coloca la mano en su pecho simulando un corazón herido.—Fuiste
Espero pacientemente a que abran la puerta. Mientras espero paso mi mirada alrededor del edificio sin dejar de estar sorprendido por haber llegado a este lugar, no pensé que vendría tan pronto, quizás que pasaría un buen tiempo para poder encontrar el valor de venir nuevamente.«¿Cómo estarás Aubrey, será que todavía estás molesta conmigo por lo que pasó? Debería estar furioso porque hayas dicho esas cosas sobre mí a Simeone en forma de venganza, porque no hayamos llegado al final, pero no lo estoy…».Supongo que sí, debería de estar muy molesta por haber dicho tal tontería. Pero lo que menos supongo es en eso, no podría decir que entiendo por qué lo hiciste porque yo jamás sería capaz de mentir de esa manera. Por otra parte, por más que intente estar molesto contigo, no puedo.— ¿Por qué me cuesta tanto el estar molesto contigo, que me hiciste para que esto fuese así? —susurro.Aparto mi mirada del pasillo. Para volverla a colocar en la puerta que espero que abran, pero no tarda much
— ¿Qué forma tan fea es esa de hablarme? —me quedo en silencio viendo al hombre frente a mí.— ¿Cómo me encontraste? —le pregunto al instante.— ¿Acaso crees que es tan difícil encontrarte Aubrey? Ahora eres una simple civil que no tiene nadie en quien apoyarse, encontrarte es tan fácil como hacer una simple llamada —responde de manera gélida e impersonal—, aunque debo de acotar que es increíble lo mucho que has soportado estar en esta vida de clase baja.— ¿Nunca vas a cambiar en serio Winslet?— ¿Cambiar que exactamente si puedes ser más específica? —se cruza de brazos mientras se recuesta del marco de la puerta.—Por ejemplo; dejar de ser tan déspota, no es como si el mundo girará en torno a ti pedazo de imbécil… —mi mirada pasa de sorprendida a gélida.— ¿Aún no cambias ese vocabulario tuyo? Ya veo que la fortuna de los Kingston se desperdició en ti, por eso mismo agradezco que te hayas ido de casa, aunque sigo sin comprender por qué —ladea el rostro con una pregunta imaginaria en
Cierro la puerta de mi apartamento con fuerza para introducirme en este como alma que lleva el diablo. Tomo lo primero que encuentro para lanzarlo contra la pared, observo como la copa que tomé en mis manos conectar con la superficie plana, y el resultado es que comienzan a caer pedazos de vidrios por todas partes.— ¡Maldito hijo de puta! —tomo lo siguiente sin detallar esta vez que pudiese ser y así comienzo a hacer un completo desastre de mi apartamento—. ¡Desgraciado, esto no quedará así, pronto soltarás todo lo que tienes guardado!Me enfurezco de solo recordar su cara, tenía tantas ganas de destrozarle y más aún al ver su mirada de suficiencia, como si todo estuviese bajo su absoluto control. Es como si el hecho de estar encerrado en esa habitación acolchada no le pesará ni un poco.«¿Por qué, a pesar de que él se encuentra encerrado, aún se siente como si hubiese ganado? ¡Esto es horrible, no entiendo cómo puede pasar esto!», grito internamente sin dejar de lanzar cosas por la
Al momento de abrir mis ojos a la primera que veo es a Arlie a mi lado, una pequeña sonrisa surge en mis labios al verla acomodando la colcha para que no tenga frío. Comienzo a escudriñar en mi mente el porqué ella se encuentran aquí, pero no encuentro nada.— ¿Arly? —pregunto confundida viéndola con extrañeza—. ¿Qué sucedió? —no puedo evitar indagar por su repentina presencia en mi lugar.— ¿No te acuerdas de nada? —la ignoro por unos momentos mientras busco en mi memoria el porqué me encuentro acostada en mi cama.Comienzo a buscar exhaustivamente en mi cabeza la razón de que me encuentre aquí tirada. Me pasó suavemente mi mano por la cabeza, sintiendo una leve molestia en esta, a medida que indagó más siento como el dolor aumenta, pero me encuentro decidida a recordar que rayos es lo que está pasando.—Bueno, yo… —me quedo en silencio unos momentos tratando de recordar con mayor claridad el enredo en mi cabeza—. Recuerdo que después que vino Winslet, me comencé a sentir extraña y m
No puedo evitar sentirme triste al de ver la escena que encuentro en mi sala. Un puchero surge en mis labios de solo ver cómo todo se ha acabado, mayor fue el tiempo que tardamos en esperar y convencer de que en lo que duro.—Eso estuvo… —murmura Arlie a mi lado con una mirada que no se puede describir con otra palabra más que deleite.—Increíble —completo, yo aun saboreando la salsa de la pizza en conjunto con el queso y pepperoni extra—. ¿No podemos pedir otras…?— ¡Claro que…!— ¡No! —salto en mi lugar, sorprendida, ya que había olvidado el hecho de que Karim se encontraba en la sala.—Pero…—Pero nada, ¿En qué quedamos Arlie? Una sola es más que suficiente, después de esto no habrá segundas oportunidades de poder comer esa comida grasienta —nos giramos inmediatamente en nuestros asientos para posicionar nuestras miradas de perrito en él.— ¡No me puedes hacer esto Karim, al menos déjame disfrutar más tiempo! —exclama mi amiga.—Si puedo, además hice mucho con permitirte haberte co