LINDSAY
Entrando a literatura una sonrisa se apodera de mi rostro.
-señorita Monroe, ¿Qué son estás horas de entrar a clase?.-dice la molesta de mi profesora.
-lo siento he tenido un pequeño percance.-digo con algo de pena ya que toda la clase me mira fijamente.
-¡pequeño mi verruga! -exclama seriamente, la clase empieza a reír ya que su verruga de pequeña no tiene nada.
-vaya tome asiento.-arruga su nariz y por un momento casi suelto una carcajada en sus narices.
¿En serio Lindsay?
¿Oh vamos narices entiendes?
Definitivamente necesitas ayuda.
Cállate estúpida.
Sabes soy tu subconsciente, así que tu eres la...
-¡LINDSAY!-me sobresalto al escuchar a Alejandra gritar en mi oído.-acaso estás peleando con tu mente otra vez.-susurra.
Niego.
Es mi mejor amiga, casi mi hermana y bien creo que ya sabe que me falta un tornillo.
Bajo la cabeza y me acomodo en el pupitre.
-tienes que contarme porqué esa sonrisa cuándo entraste.-susurra a mi oído con voz vacilante.
Me sobresalto y la miro con los ojos como platos, entonces la imagen de James viene a mi mente ,su profunda mirada. Inconscientemente mis mejillas empiezan a arder y Ale, empieza a reír por lo bajo.
-¡SEÑORITAS TIENEN ALGO QUE COMPARTIR CON LA CLASE!-grita la verru..profesora.
Niego inmediatamente.
-veras profesora.-empieza a decir Alejandra. A la satanás.-Lindsay necesita ir al baño ¿podemos?
¿En serio? La fulmino con la mirada.
-aguántese señorita Monroe. -dice la muy profesora.
-pero profesora necesita hacer del 2 ya sabe. -dice, la que dice ser mi mejor amiga.
La clase empieza a reír por lo bajo.
Escondo mi cabeza contra el pupitre, deseando que venga un Dragón, me coma y me lleve a Narnia.
Sí definitivamente es mejor.
-¡VAYAN RÁPIDO!-exclama.
Unas manos me agarran y empiezan a jalarme hacía afuera.
La asesinare o sí.
Cuándo me suelta hemos llegado al patio del colegio, que esta casi vació, ya que todos se encuentran en lecciones.
-antes de que me asesines, quiero que sepas que lo hice con una gran intención, eres mi mejor amiga y te adoro, pero...estoy embarazada. -dice como si nada y yo quedo en estado de shock por unos segundos.
Pero entonces Alejandra empieza a reír como una foca.
-¿en serio te la creíste?.-o sí hoy la mato.-eh Lindsay ¿puedes dejar de mirarme así? me estás asustando sabes.
Sonrió de medio lado.
-corre.-susurro, antes de empezar la persecución.
(...)
-¿cómo dijiste que se llama?-pregunta Ale a mi lado.
Bueno luego de perseguirla por 5 minutos se rindió. Llegamos a mi casa luego del instituto y la hice ordenar completamente mi habitación, fue perfecto verla sufrir con el desorden que hicieron los abortos de mono en mi habitación. Hasta ahora, le he contado todo sobre el accidente de esta mañana.
Nos encontramos comienzo pizza y viendo Las ventajas de ser invisible nuestro típico de viernes por la noche. Ale tiene una gran obsesión con Logan Lerman.
- James. -digo sin más, pero no se porque al pronunciar su nombre siento un hormigueo en mi estomago.
-lindo nombre y bueno no le preguntaste nada ¿Cuántos años tiene? ¿ha que instituto va? Se ve que te traer loca.-dice en voz vacilante mientras trata de guiñarme los dos ojos.
Rio.
-que cosas hablas acaso te has vuelto loca, debe de tener unos 30 años.-Alejandra pega un brinco y se tapa la boca, la miro extrañada.
-oh por Dios, te trae loca un anciano.-ruedo los ojos.
Ni siguiera lo conoce.
-no me gusta y no lo conoces, no puedes decir que es un anciano. -digo algo aburrida.
-sí definitivamente te trae loca, ¡llámalo!.-abro mis ojos.
Acaso esta se ha vuelto loca.
-sí no lo haces tú lo hago yo, quiero conocer a tú ancianito.-dice en tono de burla.
Le arrebató el teléfono.
-no conocerás a nadie y YA TE DIJE QUE NO ES NINGÚN ANCIANO. -gritó cansada.
-demuéstralo y llámalo.-dice amenazante frente a frente.
-lo haré.-digo contraatacando.
Joder mi espíritu competitivo a veces puede ser una maldición.
Marco su numero.
JAMES
-señor Connor, la reunión con los japoneses se ha reconvocado para la próxima semana.-avisa mi secretaria.
Asiento.
Aún no puedo creer que una adolescente maleducada me hiciera perder mi reunión.
Miro el reloj y ya son las 5:30 pm.
Es hora de pasar por Valentine para ir al spa, costumbre de viernes.
Recojo mis cosas.
Tomo mi teléfono y llamó a Josep.
*llamando a Josep veneti.*
-señor.-contesta.
-te necesito en la empresa.-digo seriamente no me gusta hacer amistad con mis empleados.
-si señor ya estoy aquí.
*fin de llamada.*
Salgo de la empresa.
-señor.-Josep, abre la puerta del auto.
Yo asiento en modo de saludo.
-Al apartamento.
Josep pone en marcha el auto y yo cierro los ojos relajándome por un momento, pero de repente unos ojos azules invaden mi memoria.
-hasta en mis pensamientos apareces chica problemas. -pienso.
-¿Ha dicho algo señor?. -pregunta Josep.
Niego.
Ahora estoy hablando solo por tu culpa.
-demonios sal de mi cabeza..
-¿me habla señor Connor?
-¡NO!.-exclamo desesperado.
-disculpe señor. -contesta.
Empiezo a poner mis pensamientos en orden.
Pienso en mi prometida, mi trabajo, mis pendientes, pero entonces el sonido de mi celular me saca de mis pensamientos.
*número desconocido llamando*
Frunzo el ceño.
-Connor.-contestó de mal humor.
-James.-escuchó una voz tierna, hablar en la otra línea. Inmediatamente la reconozco.
-eres tú niña problemática.-contestó.
-¿PROBLEMÁTICA YO? TU ERES EL QUE CASI ME MATA CON TU AUTO DE MILES DE DOLARES.-grita, ¿acaso esta loca?
-¿que es lo que quieres, dinero, una patineta?-pregunto cansado. El silencio invade la otra linea. Empiezo a escuchar voces y murmullos ¿ahora que?.
-eh mira, necesitó ir por una Nutella al supermercado y mi patineta ya sabes.-acaso cree que no tengo cosas importantes que hacer como para llevarla al supermercado.
-te enviaré a mi chófer.-digo es obvio que no quiero ir esa niña es un problema.
-!NO!.-exclama. -es que bueno como veras me da miedo , tu chófer podría ser un psicópata en serie.
Suspiro, que tiene esta chica en la cabeza.
(...)
NARRA LINDSAY
Me encuentro en la puerta de mi casa, aún no puedo creer que Ale me haya hecho llamar a James. Cuando hable con el me sentí algo extraña, no se si fue por los nervios, pero sentí algo tan incómodo en mi pecho.
-¿porqué siempre eres la que me pone en vergüenza?.-digo a Ale mientras esperamos.
-agradece que no te hice ponerte un vestido, a tu ancianito le deben de gustar.-dice en tono de burla.
Ruedo los ojos, además no me veo tan mal, llevo puesta una sudadera que dice, "hate normal people". Unos jean y mis converse y el cabello lo llevo en una coleta.
Quizás James sea un anciano, pero debo admitir que es bastante sexy.
y ahora estoy pensando que el amargado es sexy. Sacudo mi cabeza borrando esos pensamientos de ella.
Ale empieza a reír.
-se que pensaste que es sexy, sacudes la cabeza de esa forma cada vez que piensas que alguien es sexy.- aquí es cuando me doy cuenta que mi mejor amiga es vidente.
-deja de pensar que soy vidente.-dice la bruja.
-enserio si que eres principiante, te conozco desde que naciste y piensas que soy una bruja.-demonios voy a parar de pensar.
-a veces me das miedo.-digo con una sonrisa.
Ale ríe.
-ven aquí, sabes que quieres a está loca.-dice mientras me abraza, sonrió, tiene toda la razón. Es como mi hermana perdida.
-ya quítate, me ahogas.-digo bromeando.
-sí sí claro si fuese tu vejestorio no dices nada.-dice antes de ver a un Lamborghini parqueando al frente de mi casa.
-ya veo porqué ocupa un chófer debe de ser tan anciano que no logra manejar.-susurra a mi lado vacilante.
La puerta del copiloto se abre y sale James de ella. Lleva su traje completamente ordenado y limpió. Por un momento sentí un impulso de correr hacía dentro y cambiarme pero bueno me da igual. James viene caminado lentamente hacía donde nos encontramos, su caminado y compostura son perfectos, su mirada seria trasmite un sentimiento indescriptible, temor o atracción, quizás las dos...
Volteo a ver a Ale y notó que tiene la boca abierta.
-cierra la boca.-susurró.
-dime que ese adonis que viene caminando lentamente es el chófer. -dice, y una carcajada sale de mis labios mientras niego.
-Buenas tardes señoritas. -dice James al llegar, sus ojos se fueron directos a Alejandra.
Genial.
-hola.-contestó secamente.-ella es Alejandra, Alejandra el es James.
-un placer conocerte.-dice, bien y ahora a este que le pico.
-igualmente.-contesta Ale mientras yo miro la amorosa escena.
-excelente ahora quiero ir por mi Nutella, si no fuese por ti ya lo tuviese.-digo a James.
Ale me fulmina con la mirada.
-vamos.-contesta cortante.
De dónde habrá salido este hombre...
NARRA JAMES.El camino va en completo silencio, pero en realidad no me incómoda. Lindsay observa fijamente por la ventana su expresión es seria. Me pregunto en que estará pensando. Quizás me arrepienta luego de lo que voy a decir.-sabes puedes poner un poco de música si así deseas.-digo.Ella voltea a ver y noto un brillo en sus ojos.-¿hablas en serio? -pregunta con tono sorprendida.-sí. -contestó, que tan malo puede ser.Ella empieza a revisar mis discos emocionada y noto que arruga la cara.-¿pasa algo?-preguntó.Ella niega.-en serio escuchas está música, cuántos años tienes 60.-dice con una sonrisa en sus labios.Sonrió.-¿qué tiene de malo? es música clásica y cuidado con esos discos valen mucho dinero.-digo, ella arca una ceja.-¿qué? -preguntó. Ella ríe y me contagia de su risa. tengo que admitir que tiene una linda sonrisa.-¿me dejas conectar mi celular a tu reproductor de un millón de dólares?- dice con su voz tierna. Asiento. Ella saca su celular y me sorprendo.-¿es tu
NARRA LINDSAYCorro rápidamente a casa, abro la puerta y subo a mi habitación sin que nadie me vea, cierro los ojos y me dejo caer por la puerta.-vaya ya llego la señorita, ven aquí y cuéntame todo.-dice Alejandra, demonios se me había olvidado que ella estaba aquí.-ahora no-susurro-solo quiero descansar.Ella me mira extrañada.-¿QUE TE HIZO? JURO QUE SI TE TOCO, LE CORTARE SU POLLA.-grita, le hago señas para que baje la voz.-puedes tranquilizarte, no me hizo nada.-digo mientras me recuesto en mi cama.-Lindsay Elizabeth Monroe Mills, no me mientas!.-exclama a mi lado, me tapo la cara con la cobija.-sabes que no me gusta que me llamen por mi segundo nombre.-digo cansada.-enserio querida Elizabeth, quiero que sepas Elizabeth, que te diré Elizabeth hasta que tú Elizabeth levantes tú trasero y ME DIGAS QUE OCURRE!!.-grita, encima mío.La empujó lejos de mí.-vaya que sí estas de mal humor.-dice y ahora me siento pésima por haberlo hecho.-en realidad no se porqué me siento así. -le
NARRA LINDSAYDoy la vuelta y mi respiración se detiene.James...Lo miró fijamente con sus vestimenta perfecta, noto que trae un gran paquete, sus mirada hace que me pierda en ella.-buenas tardes.-contesta Liam a mi lado, quedó mirando a James como tonta, las palabras no salen de mis labios.Tragó y respiró profundamente.- Hola. -contestó con algo de dificultad. No había notado que James y Liam se miran.-Liam el es James Connor, James el es Liam Clark un...-empiezo a decir pero Liam me interrumpe.-soy su novio.-dice dándole la mano, me sorprendo y a este que le sucede.El rostro de James no demuestra ninguna expresión.James dirige su mirada hacía mi. Mi garganta se seca.-se le ofrece algo.-pregunta Liam a James. Su mirada no se aparta ni un segundo de la mía y mi estómago da un vuelco.-¿podemos hablar?-pregunta con su voz autoritaria.Me sorprendo ante su pregunta.Volteó a ver a Liam me observa fijamente esperando a qué niegue.-iré un momento. -le digo en Tono de disculpa.El
NARRA JAMES.Qué demonios me está sucediendo, esa chica se está metiendo lentamente en mi cabeza. No sé por qué no negó a ese tal Liam, pude sentir su nerviosismo al mentir, porqué rayos lo besó.Frunzo el ceño al recordarla.-cariño tu Secretaria llamó avisando sobre una reunión en Nueva York. -dice valentine entrando a la habitación.La tomó de la mano y empiezo a besarla ferozmente, la llevó a la cama.-hace tiempo no lo hacías así. -dice valentine con una sonrisa pícara en su rostro.Beso su cuello mientras voy abriendo paso en su ropa interior, introduzco un y luego dos dedos, ella gime con locura. Sacó un condón de la mesa de noche, lo colocó rápidamente, y sin pensarlo dos veces la introduzco con fuerza en su interior, ella gime fuertemente, cierro los ojos y esos grandes ojos azules cruzan por mi mente, frunzo el ceño. Empiezo a moverme cada vez más rápido, haciendo que los gemidos de valentine aumenten y yo llegué a mi orgasmo.-no puedo esperar a que sea nuestra Luna de miel
NARRA LINDSAYDespierto de mi sueño sintiéndome con energía lo cual es raro ya que siempre me levanto como si me hubiese perseguido el mismísimo diablo. Miró el reloj las 7:30 am. ¡Oh joder! yo despierta a esta hora un domingo, estaré soñando, ha de ser, me doy un pequeño pellizco.Maldición...Sí, sí estoy despierta.Me levantó tranquilamente, lavo mis dientes y bajó a la cocina.Mi madre se encuentra dandole de comer a Lissy, mi padre lee el periódico tomando una taza de café, Gael y Kale juegan con unos videojuegos.-Buenos Días familia. -digo alegre dándole un beso a mamá.Todos quedan en silencio mirándome fijamente.¿Y ahora que les pico?-¿quién eres y qué has hecho con mi hija?-dice mi padre.Ruedo los ojos.-buenos días cariño. -dice mi madre, tan linda. -¿te pasa algo, estás enferma? -pregunta tocando mi frente, retiro lo dicho.-eres un tipo de alienígena o algo así-pregunta kale. Lo miró con el ceño fruncido.Y así es cómo se arruina una perfecta mañana.-hola pequeña. -di
NARRA LINDSAY- ¿vez esa estrella de allá? -digo a James señalando el cielo. Luego del beso no sabía que iba a suceder, pensé que él no me hablaría nunca más, pero fue todo lo contrario, se siente tan bien estar a su lado, mi subconsciente está saltando de alegría, aunque por dentro sé que no es lo correcto, pero al diablo con lo correcto. Nos encontramos en la terraza del yate acostados, el frio viento eriza mi piel.El asiente a mi lado mirando hacia el brillante cielo.-me recuerda a cuando era una niña, cada verano mi padre y yo íbamos a un campamento de padre e hijo. -digo mirando al cielo.-¿padre e hijo? -pregunta con un tono vacilante. -con razón.-¡oye! que fuera a un campamento para niños no signifique que no soy una chica como cualquiera. -exclamo con algo de enojo, me levanto de su lado y empiezo a caminar de un lado a otro.-soy una chica sabes James, me gusta ser como soy, no quiero verme estúpida usando esos estúpidos vestidos todo el tiempo. -empiezo a decir, el se ma
NARRA LINDSAYAbro mis ojos lentamente despertando de mi sueño. Me sobresalto al mirar a Liam mirándome fijamente.-Buenos Días pequeña, lo siento no quería asustarte. -dice algo apenado. -¿cómo dormiste?-¿eh bien y tú?-contesto algo incomoda. Los recuerdos de anoche vienen a mi mente, el casi beso, dormir en sus brazos, la canción...Mis mejillas en este momento deben de estar rojas, me oculto debajo de las sábanas.-¿Amanecí perfecto, tuviste algún recuerdo? -pregunta y puedo notar que se esta divirtiendo. Gruño por lo bajo.-te escuche. -dice, quito la cobija de mi rostro y le saco la lengua.-podría amanecer así todo el tiempo. -dice, me levanto inmediatamente al notar nuestra cercanía. Entro al baño, cepillo mis dientes y me miro al espejo. Okay estoy de asco, cepillo un poco mi cabello y me hago una trenza.- ¿qué hora es? -pregunto.-linda trenza y mmm deben de ser las once de la mañana. -contesta provocando que tosa, pero que..-tranquila, tus padres ya me dieron de desayunar.
NARRA LINDSAYVen conmigo a Nueva York...Las palabras de James rondan mi mente. Dios debo de estar soñando, James Connor, sexy empresario me ha invitado a Nueva York, Jódanme. Lo he besado, mi respiración se entrecorta al recordar los pocos besos que nos hemos dado, desearía estar en sus labios en este momento. No se en que realmente estoy pensando, pero ese hombre me esta volviendo loca de una manera que jamás he sentido por ningún chico, estar cerca de el no me deja pensar bien así que le dije que lo pensaría, pero por dentro desearía haberme tirado a sus brazos con un gran sí. Al llegar a casa entre directamente a mi habitación, Ale ya se había ido me ha mandado unos mensajes para saber si estoy bien, pero Liam no se que voy hacer con el, realmente me molesto que haya contestado mi celular y no me haya dicho nada. No se como se supone que iré con James, pensar en estar en Nueva York a solas con el me provoca un cosquilleo en mi interior.Suspiro...Como decirle a mis padres que a