AVA LAWLESS

Doy vueltas de un lado a otro, Dracco, mis hijos, mi hermana, Ronan, mi madre, mi venganza, los San Miguel y esta necesidad van acabar con mi cordura y me levanto en busca del regalo que Alec me dio pero cuando se abre la puerta de mi habitación lo escondo detrás de mi.

—Tienes que ver esto.

Es alec que se sienta en la cama con un Tablet en las manos.

—¿Qué es?

Con disimulo camino dejando debajo de mi almohada el vibrador cuando me siento a su lado.

—Dracco es un animal, mira este video.

Muestra una especie de rin improvisado con cuerdas, muchas personas y a Dracco en una esquina con solo una pantaloneta y nada de la cintura para arriba. Se me acelera todo verlo de espadas esperando el inicio de la pelea y solo se voltea como un cavernícola golpeando al hombre que derriba de un solo golpe.

—Salvaje—dice Alec—pero me encanta.

No digo nada mientras agua se me vuelve el sexo.

—No hay nadie—grita con soberbia—nadie digno de enfrentarse a mí—camina por el rin imponente—tu—los