**Amaral Watson**
Sin palabras, estoy muda, llevo así gran rato, lo único que hago es verla y ella a mí, ni siquiera me da a demostrar que Bruno está equivocado, su silencio, llanto y su mirada hacen entender que no miente.
¿Cómo pudo ser posible? Quiero saber cómo sucedió, pero es que ni eso soy capaz de preguntar, no tengo fuerzas para hacerlo, es como si no estuviera preparada para escuchar lo que dirá. Por mi mente pasaban tantas cosas que ella pudo haber hecho, menos esto, incluso llegue a creer que había sido cómplice en burlar la ley, pero de ser la amante del hombre con el que estoy casada jamás.
El nudo que tengo estancado en mi garganta me quema, quiero llorar, gritar y acabar con todos en esta oficina, incluyendo a Bruno, ese quien ni siquiera tiene que ver con lo que hizo mi madre. Había esperado tanto por la verdad que ahora se y no logro decir ni una palabra, tengo muchas preguntas que quiero y me responda, que quiero conocer la
**Amaral Watson** Me estaciono en frente de la casa, presiono el volante y poso mi frente en él llorando descontroladamente, no tengo idea de cómo les diré la noticia, me aterra el pensar que esta verdad podría matar a mi padre, ese simple hecho me espanta, mi papá apenas es que se está recuperando y una noticia tan fuerte y grave como la que le diré detendría en seco su hermoso corazón. Después de unos diez minutos de estar calmada y serena bajo del auto, camino con pasos lentos deseando nunca llegar a la puerta, jamás había sentido tanta responsabilidad por dar una noticia tan desagradable como la que daré hoy, si pudiera cambiar o corregir el error de mi madre lo haría con tal de no someter a mi padre y hermana a esta terrible realidad. Antes de abrir la puerta tomo aire muy profundo, cierro mis ojos y trago grueso, entro mirando la casa sola y en completo silencio, me pregunto dónde andarán los dos, no sé cómo reaccione cuando los m
**Amaral Watson**—¿Cómo sigue? — Bruno entra al comedor. Después de que papá recibió la noticia y dijo sus palabras recayó, lo llevamos a la clínica y el doctor nos informó que guardáramos la calma, que todo había sido un susto, papá está muy bien gracias a dios, lo único es que al recibir una noticia tan fuerte aceleró su corazón mucho y le causó dolor porque recién había salido de un infarto, pero que no bajáramos la guardia porque no sabemos si más adelante recaiga.—Está más tranquilo, subí hace un rato a la habitación para mirar como estaba, sigue durmiendo, pero lo veo mejor — recojo mi cabello, me siento muy exhausta.—¿Por qué no subes tu a descansar? Yo estaré pendiente, no has dormido nada en toda la noche y lo que va d
**Amaral Watson**Caí de una manera tonta en su trampa, aunque creí que era mi madre porque me escribió de su móvil ¿Cómo pudo hacer eso? Sería algo increíble si ella se prestase para hacer algo como esto, si es así la odiare hasta el final de mis días, hay que ser bien malvada como para entregarme a este hombre.Federico me mira de una forma malévola que me hace tambalear, en su mirada destella tanta maldad pura que hasta me hace pensar que yo he llegado a mi fin, estar bajo su poder solo significa que no volveré a escapar, y si lo hago sería un milagro de dios. Este hombre me hizo venir a él para terminar lo que no pudo en un inicio, y lo peor de todo es que está lleno de odio, rencor porque Bruno y yo estamos saliendo, me usara para castigarlo a él, me dañará para hacerlo sufrir y pagar por el hecho de haberle mentido.
**Amaral Watson**Cubro con la sabana mi cuerpo desnudo y lastimado, no tengo energías ni siquiera para moverme a un lado y ver si así el poderoso dolor de mi entre pierna no me molesta tanto, Federico ha hecho conmigo lo que ha deseado, ha pasado la noche abusando de mi sin ningún tipo de piedad, mientras esto para él es un gozo para mi es la peor y más devastadora tortura.—No me odies por lo que hice, créeme, no es algo de lo que me sienta orgulloso — se fuma un cigarrillo mientras mira el video — ¿En qué me he convertido Amaral? — es tan cínico al hacerme aquella pregunta — Todo es culpa tuya mi amor, tú… tú me has obligado a hacer cosas que yo no quería, jamás se me pasó por la mente tomarte a la fuerza, pero cuando me entere que tú y Bruno se revolcaban me llene tanto de ira y de celos que sentí la n
**Bruno Bergmann** Entro en la casa de mi madre desesperado por no tener conocimiento del paradero de Amaral, llame a Lucas para que viniera aquí, y la razón por la cual acudí a casa de mis padres es porque necesito de sus ayudas para encontrarla, toda mi familia excepto mi madre y hermana son detectives y tienes grandiosos contactos que nos pueden tender una mano en la búsqueda de mi hermoso ángel, algo me dice que Federico la secuestró, y lo que me preocupa de todo esto es lo que pueda hacer con ella. Doy vueltas por toda la sala intentando comprende que ocurrió, como es que desapareció de casa si cuando me dormí ella estaba a mi lado, que idiota fui al quedarme dormido, tenía que esperar a que fuera ella quien despertara, aunque ahora que lo recuerdo uno de los vigilante de la casa dijo que la vio salir, y eso cierto, su auto no estaba cuando la busque, la cuestión es ¿A dónde pudo haber ido ella? —De seguro tu estas bien preocupado y ella
**Bruno Bergmann**Me encuentro en shock, ha buscado la forma de hacerme reaccionar y nada, sigo de rodillas en suelo con aquel video plasmado en mi memoria, ver como abusan de la mujer que uno ama es algo devastador, me siento impotente por no haber hecho nada y evitado aquella desgracia que la marcará para siempre, y algo que me tortura es que ni siquiera sé si está viva o no, o si continua bajo su poder sufriendo.Me siento muy culpable, es mi culpa el que ella este ahí sufriendo, no debimos salir, no debí dormirme, si no fuese sido así ella y yo estaría juntos en su casa abrazados durmiendo más tranquilos, ¿Qué he hecho? ¿Qué carajos he hecho?—Mi amor, debes reaccionar — veo a mi madre quien está arrodillada también.—Hijo, ponte de pies, tienes que ser fuerte y encontrarla — ahora mi padre es quien me da aliento
**Bruno Bergmann**—Fue horrible, abuso de mí durante toda la noche — intenta moverse y se queja, procuro ser muy cuidadoso, no quiero ni mirar su cuerpo.—Lo siento mi amor, lo siento — mis lágrimas brotan por no haber hecho nada — Te juro que lo haré sufrir — no deja de temblar, incluso la siento hirviendo en fiebre, cuando intento separarme noto la sangre en la cama, eso me alerta — Amaral — intento moverla y se continúa quejando, ella no habla, está tan afectada — Estás sangrando — logro acostarla, siento que voy a enloquecer cuando mire las marcas que ha dejado en su cuerpo, si su cuello esta lleno de marcas no me quiero imaginar lo que hay oculto debajo del vestido.—No mires — cubre su rostro, con delicadeza subo el vestido, en su abdomen tiene moretones, su piernas están iguales, incluso tiene la marca de los dientes,
**Bruno Bergmann**Ha pasado una semana desde lo ocurrido, Amaral regresó a casa ayer, incluso su padre y hermana igual, quiera ella o no los médicos nos recomendaron que conversáramos con ellos, que la mejor ayuda que ella podrá tener a su lado es el apoyo de su propia familia. Amaral se rehusó a la idea por miedo a que su padre sufriera un nuevo infarto, pero hable con Amanda antes del tema y ella se encargó del resto.En cuanto el señor Armando entró a su casa me insultó por no haberla protegido, y lo entiendo muy bien porque también sé que fui responsable de su desgracia, lo peor de todo es que estuve a su lado ese día, pero por haberme quedado dormido no pude cuidarla y evitar que saliera de casa. Siempre me reprochare esa noche, por mi ella está sufriendo.La madre de Amaral no ha dado señales de vida y eso nos parece muy extraño, hasta